Cuatro sedes sociales del PNV han sido atacadas esta noche. Los locales o 'batzokis' han amanecido pintadas con la 'Z' con la que se han identificado las tropas de Putin en la invasión de Rusia y que se ha convertido en un símbolo de apoyo a las tropas rusas. Además, también se han pintado símbolos comunistas, como la hoz y el martillo. Se trata de los 'batzokis' de Larrabetzu, Lezama, Lemoa y Zeberio, en Bizkaia. Estos ataques se suman a los que ya padeció el PNV en otras dos de sus sedes la semana pasada, en Loiu y Armintza.

La Ejecutiva del partido de Andoni Ortuzar, el EBB, ha emitido una nota en la que condena esta "ola de pintadas prorrusas". Califica las acciones de "ruines, vandálicas e injustificadas que atentan contra los derechos fundamentales y la dignidad humana de las personas refugiadas llegadas a Euskadi desde Ucrania".

Para el PNV este tipo de agresiones "evidencian la miseria humana y la falta de escrúpulos de sus autores ante un drama de la magnitud de la que sufre el pueblo de Ucrania". El partido asegura que continuará denunciando cualquier tipo de agresión que "socave el respeto a los derechos humanos" y subraya que las pintadas protagonizadas por una minoría no borra "el no mayoritario a la guerra del Pueblo vasco": "Resulta muy difícil de entender, por no decir imposible, qué es lo que puede motivar a las personas autoras de estos ataques a apoyar la guerra orquestada por Putin y los crímenes de lesa humanidad que está cometiendo el Ejército ruso".

Por último, lamentan que una minoría "casi residual" pretenda justificar la invasión militar rusa en Ucrania, y "resulta deplorable que sean capaces de revictimizar con sus pintadas a las personas, en su mayoría mujeres, niñas y niños, que han tenido que huir de su país y de su casa para poder sobrevivir".