La Mesa del Parlament no ha tomado una decisión -todavía- sobre le futuro del equipo de asesores de Laura Borràs. Seis cargos de confianza que suponen un coste mensual de 26.438 mensuales para la cámara autonómica en sueldos. El órgano de gobierno del Parlament ha rechazado este martes la petición de información presentada por Cs, pero es consciente de que no puede dilatar la decisión en el tiempo.

La republicana Alba Vergès, presidenta en funciones como vicepresidenta primera de la cámara ha pedido este martes "tiempo político y atender a las razones personales" de los seis asesores de Borràs para resolver la cuestión. Y ha obtenido margen de maniobra de socialistas y CUP, que integran la Mesa junto a ERC y Junts.

Pero fuentes de la Mesa advierten de que esta situación no se puede dilatar en el tiempo y confían en que se resuelva antes de fin de mes. El problema, para Vergès, es que un despido de los asesores no pactado con Junts abriría sin duda un nuevo frente entre ERC y Junts a las puertas del debate de política general. La cita fijada por JxCat para examinar el compromiso independentista de Pere Aragonès antes de someter a sus bases la consulta sobre la continuidad del partido en el gobierno de coalición.

El equipo de Borràs

El equipo de Borràs lo integraban siete cargos de confianza, de los que una de las técnicas ya ha abandonado el Parlament, fichada por la consejería de Vicepresidencia de la Generalitat. Los seis restantes ocupan los cargos de Jefe de Gabinete, con una retribución de 6.306 euros mensuales, su adjunto con un sueldo de 5.506 euros y dos asesores con retribuciones de 3.884 euros. Junto a ellos, la responsable de gestión del gabinete y una técnica con sueldos de 3.429 euros mensuales.

Se trata de un costo que el Parlament no puede asumir indefinidamente, advierten fuentes de la Mesa. En agosto, tras la suspensión de Borràs, la Mesa optó por aplazar la decisión atendiendo a la petición de reconsideración presentada por Junts. Pero ahora coinciden en que hay que tomar una decisión.

Especialmente después de que Junts dejara claro que no piensa sustituir a Borràs hasta que tenga sentencia en la causa abierta por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña por presuntos delitos de corrrupción.

El órgano de gobierno de la cámara ha dejado manos libres a Vergés para gestionar su salida, que contará con el apoyo de PSC y la CUP. La presidenta en funciones se ha reunido con ellos este martes, según confirman fuentes parlamentarias, convencida de que merecen un trato respetuoso. Pero recuerdan en el Parlament que se trata de "cargos de confianza" que ninguno de los actuales responsables de la Mesa quiere asumir en sus equipos.