Por ahora es sutil, puntual, pero en el PNV comienzan a repetirse los guiños hacia el PP. El aún socio preferente del Gobierno de Pedro Sánchez lo ha vuelto a hacer. Mientras el enfado con el Ejecutivo por sus incumplimientos y desaires en los procesos de aprobación y tramitación de normas se repiten, los nacionalistas comienzan a abrir un tiempo de zozobra en la solidez de su apoyo a Sánchez en el inicio del último año del mandato.

Si la semana pasada fue Andoni Ortuzar quien advirtió al presidente del Gobierno que si mantenía sus incumplimientos en los compromisos adquiridos quizá se tendría que empezar a acostumbrar a perder votaciones, hoy ha sido el lehendakari Iñigo Urkullu quien ha subrayado la distancia con Sánchez, la cronificación de sus incumplimientos y, lo que empieza a repetirse, a confrontarlos con lo que sucedía con los gobiernos del PP: "Al menos con Rajoy se aprobó la ley de Concierto Económico".

En julio pasado el presidente del PNV y el líder del PP se vieron durante el acto en recuerdo a Miguel Ángel Blanco que se celebró en Ermua. Tras aquella cita ambas partes mostraron su intención de celebrar un primer encuentro tras el verano.

El lehendakari ha asegurado que la última vez que habló con Sánchez fue en marzo pasado y que desde entonces no ha vuelto a tener noticias. "Entiendo que tiene su agenda", ha asegurado, "pero tienen compromisos pendientes de cumplir". En este sentido ha recordado que la moción de investidura que le aupó a la presidencia del Gobierno estuvo soportada sobre compromisos como el desarrollo íntegro del Estatuto de Gernika de 1979. Ha apuntado, en declaraciones a la Cadena SER, que pese al cronograma que se firmó a comienzos de la legislatura y que supondría el cumplimiento íntegro del Estatuto, "han pasado tres años y no parece que en un año pueda cumplirse".

'Sin noticias' de las transferencias

Urkullu ha señalado que por ahora tan sólo se han traspasado "cuatro transferencias", entre ellas la gestión de las prisiones, y que aún resta otra veintena de materias por transferir. Pese a la voluntad expresada por la ministra de Política Territorial de dar nuevos pasos, el lehendakari ha reiterado que "no tenemos noticias" sobre la posibilidad de que se puedan conformar las comisiones bilaterales.

Ha afirmado que la única realidad que aún persiste es el incumplimiento de una norma aprobada hace 43 años y que mantiene importantes transferencias en manos del Estado y que deberían estar gestionadas por la Administración vasca. Urkullu ha recordado que el Estatuto vasco sigue siendo el único que no ha sido cumplido ni renovado de todos los que están en vigor.

Preguntado por su proyecto para dar un salto en el encaje de Euskadi en el Estado, el llamado 'nuevo estatus vasco', ha reconocido que ya hizo hace un año un llamamiento a los partidos del Parlamento Vasco para retomar la cuestión pero que ninguno de ello ha respondido. Por ello, ha dejado entrever que no se referirá a esta cuestión en el próximo debate de política general que se celebrará a finales de este mes en la Cámara vasca.