El Pleno del Congreso ha acordado este jueves tramitar la reforma del Código Penal enviada por el Senado para despenalizar las injurias a la Corona y el ultraje a la bandera y los símbolos nacionales y lo ha hecho con el rechazo de PP, Vox y Ciudadanos, que habían presentado sendos textos alternativos para intentar frenar esa iniciativa.

Esas tres iniciativas han sido tumbadas con los votos del PSOE, Unidas Podemos, Más País y los partidos nacionalistas e independentistas, que han facilitado así que la reforma impulsada en el Senado por ERC y Bildu inicie su tramitación en el Congreso.

Los partidarios de la reforma han subrayado que el Consejo de Europa y Naciones Unidas han recomendado poner fin a estos delitos. Así, la socialista Andrea Fernández ha indicado que "modificar estos tipos penales no tiene por qué generar indefensión" y que "sobreproteger cualquier institución puede dañar el derecho a ser escuchado".

En cualquier caso, la dirigente socialista ha garantizado que su grupo "no va a permitir "que el subtexto de esta reforma se convierta en una afrenta al orden constitucional".

Enrique Santiago, de Unidas Podemos, ha señalado que la tipificación de estos delitos en España causa "estupor" en Europa. "No creo que la monarquía esté tan débil que necesite este tipo especial reforzado", ha añadido.

La Corona ya está "superprotegida"

Como Santiago, Jon Iñarritu, de Bildu, ha aludido a la doctrina del Tribunal Europeo de Derechos Humanos en esta materia y ha hecho hincapié en que estos delitos están "obsoletos" y sirven para proteger a "una institución que ya está superprotegida porque es inviolable e irresponsable en todos sus actos", un aspecto en el que también ha incidido la portavoz adjunta de ERC, Carolina Telechea.

Desde la CUP, Albert Botran ha denunciado que es "una vergüenza democrática" que haya "cantantes encarcelados" por canciones contra el Rey y también han recordado las causas contra Pablo Hasél o 'Valtonyc' otros portavoces como Néstor Rego, del BNG.

Tanto el PP como Vox y Ciudadanos han echado en cara al PSOE que en ocasiones anteriores rechazara revisar estos delitos y le han acusado --junto con Foro Asturias y Navarra Suma-- de aceptar hacerlo ahora para contentar a sus socios independentistas para que ellos faciliten la permanencia de Pedro Sánchez en La Moncloa.

Propuestas alternativas

El PP ha defendido su texto alternativo por boca del diputado Eloy Suárez, quien ha remarcado la conveniencia de mantener el "statu quo", dejando estos delitos tal y como están ahora en el Código Penal. Su apuesta ha recabado el apoyo de Vox y Cs.

Actualmente, quien calumnie o injurie "al Rey, a la Reina o a cualquiera de sus ascendientes o descendientes, a la Reina consorte o al consorte de la Reina, al Regente o a algún miembro de la Regencia, o al Príncipe o a la Princesa de Asturias, en el ejercicio de sus funciones o con motivo u ocasión de éstas", será castigado con la pena de prisión de seis meses a dos años "si la calumnia o injuria fueran graves", y con la de multa de seis a doce meses si no lo son".

De su lado, el diputado de Vox, José María Sánchez, ha tachado de "bobada" la reforma. En su texto alternativo, rechazado por Ciudadanos y que tampoco ha sumado al PP, los de Santiago Abascal apostaban por subir las penas para los delitos de injurias o calumnias de manera que si éstas son graves se penen con entre uno y tres años de cárcel y multas de entre 12 y 24 meses. También querían elevar las previstas para el delito de ultraje a España.

El texto alternativo de Ciudadanos, defendido por su portavoz adjunto, Edmundo Bal, planteaba modificar únicamente el artículo 490 de manera que las calumnias o injurias al Rey o su familia dejen de ser castigadas con cárcel y se penen sólo con multas de 12 a 24 meses si la calumnia es grave o de seis a doce meses si no lo es. El PP ha optado por abstenerse, mientras que Vox ha votado en contra.