Los expresidentes del Gobierno Felipe González y Mariano Rajoy han dialogado en el Foro de La Toja de Pontevedra sobre la Unión Europea y la situación bélica en Ucrania tras la invasión de Rusia. En ese sentido, el exdirigente gallego ha señalado que la guerra ha puesto sobre relieve la necesidad de un ejército europeo, contar con autosuficiencia energética o ha fortalecido la OTAN, con nuevas solicitudes de incorporaciones como la de Suecia o Finlandia.

En el caso de González, ha apelado al actual bloqueo del Consejo General del Poder Judicial, en plena visita del comisario de Justicia europeo Didier Reynders, que se ha reunido con los ministros Pilar Llop y Félix Bolaños, y con el vicesecretario de Acción Institucional del PP, Esteban González Pons. Mientras que el PP dice coincidir con la exigencia de Reynders, de dar salida al encallamiento a la par que se cambia el sistema de elección, para garantizar la independencia judicial, el Gobierno, con el PSOE como encargado de la cuestión, no coincide. González ha sugerido -sin hacer referencias a ninguna de las partes de forma directa- no atacarse por quién es más europeísta y hacer caso a las directrices del comisario de Justicia, que "viene de Bruselas": "Quizá el modelo belga nos va mejor", apelando a la nacionalidad de Reynders. Porque, "hasta ahora, el actual no ha funcionado".

Previamente a los exmandatarios popular y socialista, han intervenido en una mesa de debate económico figuras como el expresidente de Argentina Mauricio Macri. Y, antes, también, el líder del principal partido de la oposición. El presidente del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, ha participado en el Foro este viernes, donde sin aludir concretamente al CGPJ ha hecho un alegato por distanciarse de los populismos. Especialmente en momentos de crisis como el que actualmente vive Europa.

Todo, en un intento, además, de relacionar esa práctica política con la actuación del Gobierno de Pedro Sánchez. Al menos a nivel de gestión económica, que ha tachado de "populismo fiscal" y "una invasión de competencias" de las Comunidades Autónomas, la "inseguridad jurídica" y "de doble imposición" para las Comunidades. Frente a ello, ha defendido la aplicación de medidas "sosegadas" y meditadas, entre ellas, su propuesta de deflactar el IRPF. "Lo están haciendo presidentes autonómicos del PSOE", ha mencionado, en alusión al presidente de la Generalitat Valenciana Ximo Puig.

Feijóo ve la gestión económica del Gobierno como "improvisada" y "populismo fiscal"

Feijóo también ha reivindicado su última propuesta de rebaja de impuestos ha sido una "improvisación" en reacción de la supresión del impuesto de patrimonio en algunas comunidades gobernadas por el PP, como la Comunidad de Madrid y Andalucía. En lo que se refiere al IVA de los productos básicos. Génova pide a Moncloa que reduzca el gravamen del diez al cuatro porciento, a parte de prever, además, casos excepcionales de productos sin ningún impuesto. Esto hace referencia a la pasta seca, los huevos, la carne y el pescado o las conservas y el aceite, entre otros. También a los productos de higiene femenina, algo que plantea el Gobierno y a lo que los populares si verían factible apoyar. Aunque prefieren que sea mediante una medida que englobe a todos esos productos.

Para el dirigente popular, propuestas como el pacto de rentas con la patronal que propone el Ejecutivo y los sindicatos "sería bueno" y "no imposible". Pero recrimina que Moncloa llame a "la movilización y la huelga" y no "al diálogo". "La política es una mezcla entre dogmatismo y realismo, y en este momento lo primero se impone a lo segundo", ha indicado. En alusión a ese dogmatismo, el líder del PP considera, como ya apreció este jueves desde el Puerto de Vigo, que la propuesta de implantar un impuesto a las grandes fortunas "es un enorme error". Primero, "porque no afectará a nadie" en lo que resta de año". Del resto de rebajas fiscales entiende que "solo beneficia a las rentas menores de 21.000 euros, como si el resto de contribuyentes estuvieran de bonanza". Asimismo, Feijóo cree que el anuncio de Moncloa es "un mensaje en contra de la inversión; el resto de países hacen lo contrario", ha concluido.

En su opinión, Feijóo considera que de haber sido Cataluña quienes hubiesen suprimido el impuesto de patrimonio, y no Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid, primero, Andalucía y Juanma Moreno, segundo, y la Región de Murcia o Galicia -con una bonificación de la mitad- después, el Gobierno "no habría actuado así".

Rajoy se suma a la crítica del populismo

El expresidente del PP se ha sumado a la crítica hecha por su partido al populismo. Rajoy teme que se implante "un sistema fiscal Frankenstein", que adopte propuestas aleatorias de los socios del gobierno para contentar a unos y a otros. También alerta de la "dualidad entre ricos y pobres" a la que parece conducir, "si no hemos llegado ya", Moncloa. "Algunos creen que gobernar es acabar con los ricos, acaben con los pobres", ha meditado el popular.

"La demagogia no conduce a ningún sitio", solo a "tensión" y a problemas legales, ha añadido. Adhiriéndose al argumentario del PP, ha señalado que se "está recaudando más dinero que nunca, recibiendo fondos europeos como nunca". "No sumemos a eso la demagogia, ni dar un tortazo a ciertas empresas o unas personas que tengan un patrimonio; no tiene ningún sentido", ha considerado, alertando de los problemas de credibilidad de cara al extranjero.