La puerta se ha abierto y por ella cruzarán, salvo sorpresas, las federaciones vascas de Pelota vasca y de Surf. Lo harán para convertirse en selecciones oficiales con reconocimiento internacional y poder competir al margen de las selecciones de España en las que ahora están integradas. La oficialidad de ambas selecciones vascas en el caso de estas dos disciplinas se da ya por segura. Venían reclamándola desde hace años y desde los Gobiernos vasco y español se considera que la modificación este martes de la Ley del Deporte lo permitirá. Sin embargo, la última palabra la tendrá, en todos los casos, la Federación Internacional de cada disciplina deportiva.

La Pelota Vasca y el Surf podrían ser las primeras en beneficiarse de la modificación legal, pero no las únicas. Analizada la literalidad de la moción acordada con el PNV, en el que se establece como uno de los requisitos la existencia de un “arraigo histórico y social” del deporte en cuestión o la existencia de una federación propia con participación internacional anterior a la conformación de una federación española, algunos expertos consideran que el abanico de opciones sería mucho mayor. Así lo cree David Salinas Armendariz, letrado del Gobierno vasco, experto en derecho deportivo y uno de los abogados que ha participado en los numerosos procesos de petición de reconocimiento oficial internacional promovidos en los últimos años por un buen número de federaciones vascas.

Asegura que “si nos atenemos a la literalidad del artículo” incorporado en la Ley del Deporte “habría muchas federaciones que tendrían ese arraigo histórico, esa presencia exterior previa como selección”, señala. Recuerda que todo esto es aplicable a cualquier comunidad Autónoma y a cualquier deporte que en ella se practique y cumpla con los requisitos. En su opinión, hasta una decena de disciplinas deportivas vascas podrían entrar en alguno de los supuestos: “Aquí incluso el Fútbol vasco podría ser reconocido. La Federación vasca de fútbol es de 1915 y ya jugaba entonces partidos internacionales. Es anterior a la Selección española, que es de 1920”.

Destaca el caso del Montañismo, cuya federación acumula más de un siglo de existencia. O el del ciclismo, con gran tradición en Euskadi, “y con precedentes lejanos como el equipo KAS o equipos compuestos por corredores vascos como fue el Euskaltel”. Suma a ellos el caso del Rugby, con una larga tradición en Euskadi, “con equipos como el Euskarians que se creó hace muchas décadas”. Entre la decena de deportes que Salinas ve con opciones para alcanzar la oficialidad de sus selecciones “si hay voluntad” también apunta al Remo, el pádel, la Soka-Tira o el boxeo.

Procesos en marcha

En algunos casos ya han intentado ese reconocimiento de la oficialidad, como ocurrió con la Federación vasca de Fútbol, que en diciembre de 2020 solicitó ante el FIFA y la UEFA ser reconocida oficialmente. La petición fue rechazada por ambos organismos. Lo mismo sucedió con la Federación de Halterofilia, que fracasó en su pretensión y que ahora trabaja para volver a presentar la petición.

Ahora, otras cuatro federaciones vascas han aprobado en sus respectivas asambleas iniciar este camino hacia el reconocimiento oficial de sus respectivas federaciones internacionales. Se trata de las federaciones vascas de Esgrima, Natación, Automovilismo y Squash, y a las que el cambio de ley aprobado el martes en la Cámara Baja podría allanarles el camino.

Salinas asegura que esta opción está abierta a todos los deportes y a cualquier comunidad autónoma que cumplan los requisitos. “Hay que acreditar ese arraigo social de ese deporte, que no supone contar con un volumen de licencias elevado sino de un pasado, de una historia que lo avale”.  

Muchas federaciones vascas, como la de Padel, Boxeo o Montañismo tienen presencia en federaciones de carácter internacional, pero en muchos casos sin que suponga ser reconocidas oficialmente como selección propia con capacidad para competir internacionalmente.

Acuerdo entre federaciones

Ese camino conlleva no sólo formalizar la petición, sino que exista un acuerdo con las federaciones de rango superior, en primer lugar la española, y finalmente la aceptación de la Federación Internacional. Una tramitación en la que el aval del Consejo Superior de Deportes es esencial y al que ahora se le aporta un asidero legal para actuar en los casos en los que considere que se cumplen los requisitos.

En el caso del País Vasco hace décadas que desde las instituciones se ha promovido un movimiento en favor del reconocimiento como selecciones nacionales de sus respectivos combinados deportivos. A tal fin se han movilizado recursos y ayudas públicas para orientar, asesorar y apoyar a las federaciones de las disciplinas que lo solicitasen a poner en marcha el proceso. Actualmente existen selecciones vascas en multitud de deportes, en muchos casos con participación en eventos de carácter internacional, pero en la mayoría de los casos sin reconocimiento oficial.  

Las 47 federaciones vascas reciben subvenciones por un valor de 4,8 millones de euros de los presupuestos vascos. En 2003 se constituyó una Unión de Federaciones Deportivas vascas que da cobertura “al conjunto de federaciones deportivas de nuestro país”. Al mismo tiempo, el Gobierno vasco ha constituido la fundación ‘Basque Team’ que, a modo de organismo de ‘selecciones vascas’, funciona de forma paralela a los combinados oficiales bajo la marca de las selecciones de España.

El año pasado, gracias a los 2.3 millones de fondos públicos concedidos, destinó 825.000 euros a financiar alrededor de un centenar de becas, trabaja en la creación de un centro de alto rendimiento y cuenta con cerca de medio millar de deportistas vascos en una suerte de red de deportistas de élite vascos.