Los médicos de Cantabria han acordado este lunes en asamblea seguir la huelga convocada en Atención Primaria desde hace ocho días, porque no aceptan el preacuerdo que alcanzaron con la Consejería de Sanidad el viernes.
El principal escollo siguen siendo las agendas, ya que, si bien el borrador de preacuerdo recoge que se limiten a 35 pacientes como pedían los médicos, éstos quieren garantías para que esta cifra se cumpla y un protocolo sobre cómo gestionar al número 36. Además, otro aspecto que no acepta el colectivo es tener una agenda cerrada y que no se permita a los médicos citar a sus propios pacientes.
Esos son los dos "puntos esenciales" que han hecho a la asamblea rechazar el documento por mayoría, y que los representantes sindicales trasladarán a Sanidad en la nueva reunión que mantendrán esta tarde, convocada a las 17.00 horas. A continuación, la asamblea volverá a reunirse mañana a las 11.00 para tratar los posibles avances que se consigan hoy con la Administración.
Al inicio de la reunión de esta mañana, celebrada desde las 11.00 horas en el Colegio de Médicos, todo apuntaba a que la huelga se iba a aplazar y los profesionales iban a volver a sus puestos desde mañana. La intención del sindicato era optar por el aplazamiento y no por la suspensión de la huelga, ya que el primero permitía retomar el trabajo en los centros de salud a la espera de que Sanidad cumpliera todo lo pactado, y de no ser así, volver a parar.
Sin embargo, a medida que los representantes sindicales han ido desgranando a los profesionales el borrador de preacuerdo que alcanzaron el viernes ha ido surgiendo el debate, centrado principalmente en el asunto de las citas y las agendas.
Como ha explicado en declaraciones a los medios tras la asamblea el vicepresidente del Sindicato Médico, Santiago Raba, no se ha aceptado el documento porque no ven que refleje claramente que los médicos de Atención Primaria no vayan a ser responsables del paciente número 36, que quedaría ya fuera de sus agendas. "No vemos garantías suficientes de cómo se va a gestionar el paciente número 36. Queremos garantías de que ese paciente no va a acabar en nuestra agenda o a las puertas de nuestra consulta", ha explicado Raba, señalando que el otro punto que "no es tolerable" para el colectivo es no poder citar a sus pacientes.
Esos son precisamente los "flecos" que quedaban por cerrar a los que el representante del sindicato se refirió el viernes tras la reunión con Sanidad,. "No teníamos claro que la asamblea fuera a aceptar esa condición", ha reconocido hoy, añadiendo que también exigían que "desde ya" tanto pacientes como médicos notaran esos cambios puestos en marcha a raíz de las negociaciones, entre ellos el límite de 35 pacientes.
Una de las posibilidades para absorber a esas personas que quedan fuera es que los médicos hagan horas extras, para lo que creen que no sería un problema la dotación económica por parte de Sanidad, pero dudan de si habrá suficientes voluntarios.
A pesar de estas dos líneas rojas, los médicos han aplaudido otros avances logrados en las negociaciones con Sanidad, sobre todo para el personal de continuidad, ya que las 74 nuevas plazas de médico que ofrece Sanidad ya no serán contratos de este tipo.
Además, también se han mostrado de acuerdo con la mejora de la seguridad pactada. En este punto, la Consejería ha puesto en marcha la instalación de 64 cámaras de seguridad y la contratación de personal de vigilancia para algunos centros, además de que abrirá expediente administrativo sancionador en todos los casos de violencia a los profesionales.
La asamblea se ha prolongado casi hasta las 13.00 horas, por lo que de ella los médicos han partido hacia la concentración por la agresión al médico del centro de salud de Los Castros, que comenzaba a las 13.30.
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 El experto que cree que los humanos podríamos vivir 20.000 años
- 2 ¿Cuál es el Mejor Magnesio para los músculos? Estas son las 10 mejores marcas en 2024
- 3 España, Francia y Marruecos frente a la justicia europea en el Sáhara Occidental
- 4 Y en el caos, a Sánchez lo persiguen nazis con escoba
- 5 Quién es Rubén Gisbert, colaborador de Íker Jiménez
- 6 La Confederación Hidrográfica no emitió alertas tras detectar que el caudal del Poyo se multiplicó por nueve por no ser su competencia
- 7 El Barranco de El Poyo acumulaba 99 inundaciones previas y constaba como área de alto riesgo de inundación
- 8 El Gobierno trata de desmontar las "mentiras" de Mazón sin entrar al combate directo
- 9 Lo de Valencia no corre prisa: "Si quieren ayuda, que la pidan"