Vox y el economista Ramón Tamames, exdiputado del PCE y el CDS, han llegado a un acuerdo para que éste encabece la moción de censura del partido de Santiago Abascal en las próximas fechas. La cual, será la segunda moción de censura contra el presidente del Gobierno Pedro Sánchez y su Ejecutivo en lo que va de legislatura después de la de 2020. Candidato y formación han cerrado los detalles de la negociación tres semanas después de que el propio presidente del grupo, Abascal, lo diera a conocer a través de Twitter. El 1 de febrero, el líder de Vox escribía que se había reunido con el profesor: "No es la primera vez y coincidimos en que la situación de España requiere una profunda reflexión de los representantes de la soberanía nacional. Y esa podría articularse mediante la moción prevista en el artículo 113 de la Constitución".
Desde entonces, toda declaración procedente de Vox se ha centrado en desplazar a un futuro cercano cualquier decisión. "Tamames es una buena opción, pero hay más. Un abecedario amplio", explicaban fuentes del partido recientemente. La noticia la ha adelantado el diario El Mundo, la ha confirmado Europa Press y la habría trasladado el propio Tamames a su entorno en un encuentro de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas este martes. Tamames, de 89 años, habría solicitado a Vox otros apoyos añadidos a sus 52 diputados a la hora de presentar el texto de moción en la cámara baja, algo que queda aún en el aire y se desconoce si se ha podido lograr. Entre los nombres puestos encima de la mesa, se habla de los díscolos navarros fichados por el PP de Navarra Carlos García Adanero y Sergio Sayas, o la diputada popular por Barcelona Cayetana Álvarez de Toledo. De hacerlo, tanto los ex de UPN como Álvarez de Toledo se alejarían de la abstención que manejan los de Feijóo. Y la diputada se arriesgaría a una sanción económica por romper la disciplina.
Durante estas semanas de diálogo, que surgió con Fernando Sánchez Dragó como enlace entre Tamames y Abascal, el exparlamentario ha destacado que Vox le ha "dejado hacer" en referencia a la preparación de su discurso, sobre el que ha reconocido que lleva trabajando desde la primera semana de febrero. Pero también aseguraba que había "muchos papeles" que gestionar. Todo, pese a que fuentes nacionales de Vox apuntaban a la sencillez del trámite desde el principio. "Hay que adaptar algunas cosas al borrador de 2020", añadían.
El 8 de febrero, ante la movilización mediática en relación a la cuestión, el propio Abascal, que anunció a principios de diciembre la intención de llevar a trámite esta moción tras la disposición del PSOE de reformar el Código Penal, derogar la sedición y rebajar las penas por malversación, pedía "un poco de paciencia" para abordar la negociación. "Hay mucho interés", pero "seguimos trabajando para llegar a un acuerdo que permita presentar una moción de censura histórica", afirmó entonces. En Vox, de hecho, se apreciaba cierta disconformidad con el 'baño' mediático que se estaba dando Tamames. Y reafirmaba: cualquier decisión será tomada conjuntamente y Vox tendrá la última palabra, reconocían fuentes del partido. De hecho, pese a que el propio Tamames reconoce haberse llegado a un pacto, los de Abascal siguen sin desvelarlo. "Quedan flecos pendientes" de la negociación, pero "lo sabremos muy pronto", ha dicho el portavoz parlamentario Iván Espinosa de los Monteros horas después en los pasillos del Congreso.
Abascal anunció la moción a principios de diciembre como reacción a las reformas de sedición y malversación del Gobierno a demanda de ERC. Él mismo se ha encargado de la agenda y los contactos
La disposición de Tamames, según fuentes de su entorno, no radica en que esté de acuerdo en las principales líneas ideológicas de Vox. De hecho, contradice, cuando se le pregunta, el ideario de los ultraconservadores en materia de género o de inmigración. Pero sí está preocupado por la unidad nacional y las cesiones desde el Gobierno al independentismo. Especialmente tras la aprobación de las mismas medidas que han gestado la moción desde los despachos de la sede nacional de Bambú. Su intención es explicar a los 349 diputados -el escaño del exparlamentario de Unidas Podemos Alberto Rodríguez aún no ha sido ocupado- su percepción de la realidad política de España y pedirles que reflexionen y cambien el rumbo. A nivel general, en cuanto a crispación y disposición a consensos. Hacia el Gobierno, para que Sánchez cese su vínculo con el extremismo.
Tamames ha pasado de posiciones de izquierda y pro democráticas, justificadas con su militancia en el PCE desde mediados de los cincuenta, a posturas conservadoras. Sobre todo a nivel económico, su rama profesional. Él mismo califica su presencia en el ámbito comunista como único brazo amplio que luchaba por la democracia frente al régimen de Franco. En los ochenta se desvinculó del PCE, creó su propia fuerza progresista, se acabó integrando en IU y después dio un breve salto a la CDS de Adolfo Suárez. En política, ha sido diputado y primer teniente de alcalde en Madrid durante el mandato del socialista Enrique Tierno Galván.
Por el momento, Vox sigue sin pronunciarse. Se estima que sea Abascal quien comunique los próximos pasos a seguir junto a Tamames, ya que él se ha encargado del trabajo y la agenda personalmente. La fecha del pleno de moción de censura queda, por tanto, también abierta, dado que es la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, la que decidirá los tiempos. Previsiblemente no se hará antes del próximo pleno del día 7 de marzo, cuando se tomará en consideración la proposición del PSOE para reformar la ley del 'sólo sí es sí'.
No hay un plazo para revocarlo. Batet dará dos días más una vez se registre la moción para que otros grupos presenten alternativas. Y concluido, será ella la que fije sobre el calendario la fecha que considere. Cabe recordar que la moción 'nace muerta' debido a que no existe mayoría alternativa a la actual en la cámara. Ello ha servido al PP a acusar a Vox de reforzar a Sánchez, que saldrá indemne de la contienda. Feijóo, incluso, intentó evitar que Tamames diera ese paso. "Si fueses mi padre, no te dejaría", le dijo en una conversación previa a que Abascal diera a conocer el hecho.
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 Quién es Rubén Gisbert, colaborador de Íker Jiménez
- 2 El experto que cree que los humanos podríamos vivir 20.000 años
- 3 Lo de Valencia no corre prisa: "Si quieren ayuda, que la pidan"
- 4 Zonas inundables de España: "Pueden baja el valor de las casas"
- 5 La Confederación Hidrográfica no emitió alertas tras detectar que el caudal del Poyo se multiplicó por nueve por no ser su competencia
- 6 España, Francia y Marruecos frente a la justicia europea en el Sáhara Occidental
- 7 Revuelta, Frente Obrero... los ultras se conjuran en el fango
- 8 Valencia, imagen de un fracaso, motivo de orgullo
- 9 El jefe de la UME asegura que estuvieron listos "en 15 minutos" tras recibir "luz verde" de la Generalitat