Otra revolución absoluta y "valiente" en materia de igualdad. Eso anunció este sábado el presidente del Gobierno: el martes aprobará este martes en el Consejo de Ministros el anteproyecto de ley de representación paritaria de mujeres y hombres en órganos de decisión, que obligará a la composición de Consejos de Ministros paritarios, a llevar la paridad a los consejos de administración de las grandes empresas y que forzará a los partidos a componer para las convocatorias electorales listas cremallera, con una alternancia de hombres y mujeres al 50%, para las elecciones.

Prometió Pedro Sánchez un "impacto" en la lucha contra el feminismo y lo lanzó ante los suyos. Un anuncio de calado que busca dar una vuelta completa al ambiente político adverso instalado en las últimas semanas, en las que ha ido sumando tensiones en su Gobierno a cuenta de la reforma de la ley del sí es sí, y que en esta semana ha estado marcado por el caso Mediador, una presunta trama corrupta que tenía como cabecilla a un exdiputado nacional socialista y que terminaba las jornadas con fiestas con mujeres prostituidas. El jefe del Ejecutivo, al frente de un partido que siempre se ha reivindicado como radicalmente feminista, como el motor de todos los avances en igualdad en España, quiere dar otro salto sustantivo, y lo anuncio este sábado ante un millar de militantes y simpatizantes en un acto por el Día de la Mujer en el Pabellón de Convenciones de la Casa de Campo de Madrid, acompañado además del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, el que puso en pie la primera Ley de Igualdad del país, la de 2007, recurrida por la derecha y ganada por los socialistas en el Tribunal Constitucional.

La cremallera se aplicará en generales, municipales, autonómicas y europeas. Hoy hay en el Congreso un 42,69% de mujeres, y en el Senado, un 40%

El mensaje que el presidente desea lanzar con esta ley es evidente, que no habrá "ni un paso atrás en la defensa de la igualdad entre hombres y mujeres", tal y como recalcaban desde la Moncloa. El anteproyecto de ley toca varios puntos claves y persigue reforzar la paridad en la esfera pública y privada. Primero, se modificará la Ley del Gobierno para que en los Consejos de Ministros se garantice "el principio de presencia equilibrada de mujeres y hombres", de forma que cada uno de los sexos suponga como mínimo el 40%". Esto supondrá que futuros jefes del Ejecutivo tendrán que componer a la fuerza Gabinetes paritarios, sean del color que sean. El actual Gobierno de coalición supera con mucho ese porcentaje: rebasa, de hecho, el 60%. Son 14 mujeres (63,64%) y ocho hombres, con el presidente aparte.

También se retocará la Ley Electoral para obligar a los partidos a que compongan listas cremallera, de manera que hombres y mujeres se alternen en las candidaturas. Hasta ahora, la norma de Zapatero de 2007 hizo que las listas tuvieran un mínimo de un 40% y un máximo de 60% de integrantes de cada sexo, paridad que debía cumplirse en cada tramo de cinco. Ahora, la ley forzará la igualdad a 50%, como de hecho el PSOE ya se aplica a sí mismo. La reforma se aplicará a todos los procesos electorales: diputados al Congreso, municipales, miembros de consells insulares de Baleares y cabildos de Canarias, diputados al Parlamento Europeo y parlamentarios de las asambleas autonómicas, y también operará cuando las candidaturas al Senado se agrupen en listas (artículo 171 de la LOREG). Hoy, en este punto de la legislatura, solo el 42,69% de los escaños del Congreso y el 40% del Senado están ocupados por mujeres, según los datos de ambas Cámaras.

A través de una modificación de la Ley de Sociedades de Capital y de la Ley del Mercado de Valores, las grandes empresas deberán asegurar que su consejo de administración tenga una composición con presencia, como mínimo, de un 40% de mujeres y velará para que esa composición opere en la alta dirección.

La obligación de paridad operaría en las sociedades cotizadas y en las entidades de interés público, con más de 250 trabajadores y 50 millones de volumen de negocio anual

La nueva regulación será de aplicación a todas las sociedades cotizadas y a todas aquellas consideradas como entidades de interés público, con más de 250 trabajadores y 50 millones de volumen de negocio anual. Para las primeras, entrará en vigor el 1 de julio de 2024, y para las segundas, de manera gradual, de manera que el 40% se alcance el 30 de junio de 2026. La ley actual, la de 2007, simplemente indicaba que las grandes empresas "procurarán incluir en su consejo de administración un número de mujeres que permita alcanzar una presencia equilibrada de mujeres y hombres en un plazo de ocho años". Es decir, no establecía una obligación.

"Molesta mucho a la derecha"

El anteproyecto también obligará a que haya un 40% de mujeres en las Juntas de Gobierno de los Consejos Generales y los Consejos Profesionales. La aplicación será gradual, para que esté operativa el 30 de junio de 2026.

Por último, en la composición de los tribunales, jurados u órganos colegiados que se constituyan para otorgar premios o condecoraciones financiados o concedidos por organismos del sector público o en los que estén presididos por un representante público se garantizará que haya, al menos, un 40% de mujeres.

También se obligará a la paridad en los consejos profesionales y en los jurados que otorguen reconocimientos o premios financiados con dinero público

Durante el acto, tanto la exministra Leire Pajín —que participó en vídeo— como el expresidente Zapatero reivindicaron el sistema de cuotas que se introdujo en 2007. Un modelo que "molesta mucho a la derecha", subrayó Sánchez como preludio de su anuncio. Hace 10 años, recordó, cuando se abrió el debate de las cuotas en el sector privado, solo un 13% de mujeres formaban parte de los consejos de administración. Esa era la media europea. Los países que en este tiempo no hicieron "nada" han visto que ese porcentaje solo se ha estirado tres puntos, hasta el 16%. Pero los que apostaron por el sistema de cuotas han visto crecer la cifra muchísimo más: ya se sitúa en el 37% en España.

"Todavía nos queda. Por tanto, claro que el sistema de cuotas nos permite reducir, incluso superar, la desigualdad histórica en la representatividad en los centros de decisión públicos y privados", sostuvo el presidente. Así que ahora es tiempo de dar un salto adelante, que se materializará, dijo, con esta nueva ley. "Si las mujeres representan la mitad de la sociedad, la mitad del poder político y del poder económico tiene que ser de las mujeres", subrayó. Y ya anticipó las críticas de la derecha: "Habrá gente que le parezca grave e incluso absolutamente desproporcionado" esta obligación de paridad, pero al PSOE le "parece simple y llanamente de justicia".

Dará tiempo a la tramitación

El martes, por tanto, el Consejo de Ministros aprobará el anteproyecto. Pero la legislatura ya se agota. El texto tendrá que pasar por los órganos consultivos, volver al Ejecutivo para una segunda lectura y para su remisión a las Cortes. Fuentes de la Moncloa subrayaron que sí hay tiempo para tramitar la iniciativa, aunque de entrada el anuncio, agregaron, forzará al PP y al resto de fuerzas a pronunciarse. Y ahí el partido de Alberto Núñez Feijóo, apuntaban en Ferraz, tendrá difícil negarse a que las mujeres, por ejemplo, ocupen un 40% de los Consejos de Ministros o a que no se compongan listas cremallera.

Sánchez no alude de forma directa al 'sí es sí', pero subraya que la agenda de progreso del Gobierno "supera con mucho cualquier discrepancia" entre los socios

En el equipo del presidente señalaban que sí adelantaron el anuncio a Podemos, que sabían del contenido del anteproyecto. Sánchez, en su discurso, también lanzó un mensaje conciliador hacia los morados. Este Gobierno de coalición, con una agenda de progreso y de políticas sociales, "supera con mucho cualquier discrepancia" que puedan tener los socios. La referencia implícita era clara: la reforma del sí es sí, cuyo primer trámite parlamentario, la toma en consideración, será votado el martes en el Congreso. Socialistas y UP votarán separados, pero en la Moncloa están ya enfrascados en la tarea del control de daños, para minimizar las consecuencias de la ruptura por este asunto. Ni Sánchez, ni la secretaria de Igualdad del PSOE, Andrea Fernández, mencionaron los avances de la Ley Trans, liderada por Irene Montero y fuente de tensiones dentro del PSOE, pero sí la reivindicó el expresidente Zapatero.

El jefe del Ejecutivo sí enarboló las políticas feministas y a favor de la "mayoría social" de su Gobierno —"Necesitamos una década de progreso para fortalecer lo que la derecha debilitó"—, como la revalorización de las pensiones, la subida del salario mínimo, la ley de igualdad retributiva, que ha conseguido reducir tres puntos —del 21% al 17%— la brecha salarial, o la reforma laboral, que ha "reducido en 13 puntos la temporalidad que sufrían las mujeres".

Zapatero sacó también orgullo de partido, orgullo por el Gobierno "más feminista del mundo". "No puede haber mejor cosa que pueda exportar un país, derechos. Y esto es así porque ha sido una democracia de mujeres en España". Y tras remarcar que el balance de este Ejecutivo va a ser "imbatible", por sus políticas sociales y de ampliación de derechos, recordó cómo el PP ha intentado boicotear todas las leyes de igualdad con recursos ante el Tribunal Constitucional, recursos que no sabe si son "más ridículos o hipócritas", porque "nadie renuncia a la libertad, a vivir libremente, a amar a quien quiera, sin que nadie imponga ninguna norma".

El recuerdo a Alborch y a Chacón

"¡Que anuncien nuevos recursos, es lo único que saben hacer porque no tienen política ni proyecto!", se burló el expresidente, para recalcar que las leyes de derechos que han impulsado los socialistas son las que han hecho de España un país "más decente". Leyes que han buscado "acabar con el machismo intolerable que ha presidido la historia", leyes como la de igualdad, la del matrimonio igualitario, la primera norma integral contra la violencia machista o la ley de plazos del aborto.

Zapatero ensalza las leyes de derechos del PSOE y Fernández llama a la unión de las feministas frente a sus "enemigos", como una derecha que "siempre juega" con los derechos de las mujeres

Por eso precisamente Zapatero está "tan seguro, tan orgulloso y tan convencido de la próxima victoria electoral", del triunfo también de un presidente, Sánchez, "que nunca se queja" y cuya "mejor" faceta es su "fuerte convicción". "Es un líder que está haciendo una política de protección de los sectores más débiles y a la vez es firme y exigente con los poderosos".

"Aquí están las feministas socialistas, firmes y valientes", proclamó Andrea Fernández. Ella introdujo las intervenciones grabadas de mujeres que han pasado a la historia del PSOE por su gestión, bien en el Ejecutivo o bien en el partido. Un repaso de los avances feministas con sello socialista. Matilde Fernández, Paca Sauquillo, Leire Pajín, Elena Valenciano, Bibiana Aído, Carmen Calvo, Laura Berja, Isabel Rodríguez, María Jesús Montero... y también Miguel Lorente, exdelegado del Gobierno contra la Violencia Machista. Un gesto de hermanamiento entre las feministas de ayer y de hoy. Fernández defendió entonces un movimiento "unido, que debata, que sepa caminar cómplice", que se eleve sobre las "discrepancias". Llamamiento capital en un momento en el que el feminismo se ha dividido, entre otras razones, por la Ley Trans. "Nuestra fuerza transformadora es tan potente que no le faltan enemigos, nuestra fuerza reside en las alianzas", destacó.

La secretaria de Igualdad alertó de que la derecha "siempre juega con los derechos de las mujeres" y que ahora son "feministas de ocasión". Pero el PP, dijo, nunca podrá hacer actos como el de este sábado salvo que se dedicara a repasar sus recursos contra leyes de igualdad de los gobiernos socialistas. Como el de la ley del aborto de 2010, declarada constitucional 13 años después, y que ha demostrado que la interrupción voluntaria del embarazo "solo puede ser dos cosas, o un derecho o una manera de jugarse la vida, nada más".

Al acto acudieron varias ministras del Ejecutivo de Sánchez, como María Jesús Montero —también vicesecretaria general del partido—, Isabel Rodríguez, Pilar Alegría y Reyes Maroto, a quien el presidente cumplimentó por partida doble como "próxima alcaldesa de Madrid", ya que ella es su apuesta para la capital este 28-M. El auditorio estaba animoso y gozó del anuncio del líder del Gobierno, como también agradeció y aplaudió el recuerdo de Zapatero de dos exministras feministas ya fallecidas, Carmen Alborch y Carme Chacón. El acto tenía miga interna, pero sobre todo se colará en el libro de honor del PSOE por el compromiso de una ley que extenderá, si llega a aprobarse, la paridad a los grandes centros de decisión públicos y privados.