Como hiciera el Gobierno en el debate de la moción de censura de Vox de octubre de 2020, cuando intervino Pablo Iglesias en calidad de jefe de la delegación morada del Ejecutivo, esta vez ha sido la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, la que también ha tomado la palabra, junto a Pedro Sánchez, para replicar a Ramón Tamames. Una cuota de protagonismo que ha aprovechado para estrenar su nueva condición de líder de la izquierda a la izquierda del PSOE, aunque no materialice su decisión de presentarse a las elecciones hasta el 2 de abril. Es lo que Tamames ha resumido en un "discurso de presentación de un proyecto político que creo que se llama Sumar".

De comunista a ex comunista -Díaz conserva el carné del PCE- la dirigente gallega, que se ha dirigido a él como "profesor Tamames", le ha reprochado que "es un poco sorprendente que usted no cumpla con el reglamento de esta Cámara" por no presentar un programa de gobierno dado el carácter constructivo de las mociones de censura en nuestro país. "Está deteriorando la democracia. Esta es una moción destructiva", le ha espetado con un tono mucho más duro que el del propio jefe del Ejecutivo.

Recordando ese origen político común, ha narrado la vicepresidenta segunda que "hemos llegado a esta democracia a través de la lucha de los trabajadores, del movimiento sindical, de la lucha de las mujeres y de la lucha de un partido, sí, del que usted formaba parte, del PCE, y es hoy confuso escucharle intervenir que siendo candidato de un partido como es Vox".

Le ha acusado de "lecturas perversas", como interpretar en clave negativa que el Gobierno intervenga en la legislación laboral y de cuestionar la justicia fiscal y las pensiones, "que el partido por el que usted se presenta en esta moción quiere privatizar". Se ha centrado en los temas de sus competencias ministeriales, en reivindicar su gestión, aunque lo cierto es que la larguísima intervención previa de Pedro Sánchez ha bajado mucho el interés del resto del debate. "Gobernamos humildemente mejor que los que nos han antecedido", ha subrayado la vicepresidenta segunda.

"Guiño" a Belarra y Montero y agradecimientos a los ministros del PSOE

En su intervención ha hecho un claro "guiño" a las políticas sociales de la ministra Ione Belarra y a las de igualdad de Irene Montero, coincidiendo con una espinosa negociación para articular una fórmula de colaboración entre Sumar y Podemos. Pero también ha habido un amplio capítulo de agradecimientos a Pedro Sánchez, Nadia Calviño, Teresa Rivera, María Jesús Montero, José Luis Escrivá, Miquel Iceta y Alberto Garzón, entre otros, toda una declaración de intenciones para reproducir un gobierno de coalición tras las próximas elecciones si salen las cuentas.

Tras acusar a Tamames de "sindicalismo vertical", ha destacado que "cuatro de cada diez puestos de trabajo que se crean son españoles, el doble que Francia, cuatro veces que Alemania y trece más contratos indefinidos que Italia", y aunque tenemos uno de los índices de desempleo más altos de la UE y el doble de paro juvenil, "algo estamos haciendo bien" para acortar esas diferencias.

"Usted representa en esta Cámara a los que empuñan la Constitución como una arma arrojadiza y se niegan a cumplirla", es más "el partido al que usted representa se coloca extramuros de la Constitución española. A algunos se les llena la boca de hablar de Constitución pero no votaron favor de la misma", en alusión a la entonces Alianza Popular al tiempo que ha acusado al histórico comunista de venir al Congreso para "derrocar" al Gobierno. Asimismo, ha advertido que "no se sale indemne de este tipo de alianzas" con la ultraderecha al tiempo que ha pasado a abogar por proteger la democracia y hacer cumplir la Constitución.

Belarra acusa a Sánchez de "parecer de izquierdas"

Por su parte, la líder de Podemos y ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, ha aprovechado la ocasión para dar un toque de atención al presidente de Gobierno. En unas declaraciones en los pasillos del Congreso y tras calificar de "previsible" la moción de Vox, ha replicado a Pedro Sánchez al afirmar que "es muy fácil parecer de izquierdas porque contestarle a una fuerza de ultraderecha que es machista, racista, hace muy sencillo a cualquiera parecer progresista".

Lanzado este dardo, ha dicho creer que "la clave es que demostremos con hechos, gobernando, aprobando cuanto antes esa ley de vivienda; no volviendo al Código Penal de la manada de la mano del PP o derogando de una vez por todas la ley mordaza". "Esos son los hechos -ha agregado- que necesitamos para realmente gobernar mirando hacia la izquierda. Esta muy bien hacer discursos progresistas, pero la clave son los hechos".