Tras dos ampliaciones del plazo de enmiendas, la reforma de la ley del "sólo sí es sí" tiene fecha para su paso por el Congreso, esto es, el próximo 20 de abril, según informó ayer el portavoz socialista, Patxi López. Será el momento en que vuelva a ponerse a prueba la resistencia de las costuras del Grupo Confederal de Unidas Podemos, que no tuvo fugas de voto cuando rechazó la toma en consideración de la proposición de Ley del PSOE, pero donde las distancias se han ido agrandando en mitad de la accidentada negociación entre Podemos y Sumar de cara a su hipotética colaboración futura en una amplia plataforma electoral, encabezada por la vicepresidenta segunda.

Yolanda Díaz viene crecida tras su indubitado triunfo parlamentario en el debate de la moción de censura de Ramón Tamames. Ha quedado claro que "Pedro Sánchez la va a cuidar, la necesita", dicen en Unidas Podemos respecto a la imagen de tiquet electoral que dieron ambos, mientras que las ministras moradas, Ione Belarra e Irene Montero, son orilladas de manera indisimulada. Se vio con toda su crudeza este martes, cuando se vetó la comparecencia ante la prensa de la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030 para explicar su Ley de las Familias.

En el entorno de la titular de Igualdad aseguran que no habrá ruptura del Grupo Confederal

En el entorno de la titular de Igualdad aseguran que no habrá ruptura del Grupo Confederal y que todo los demás son "intoxicaciones", pero en el seno del mismo conviven desde hace tiempo dos almas, cada días más distanciadas, esto es, la que representa Pablo Echenique, por un lado, y Jaume Asens, por otro.

En el sector menos beligerante del Grupo Confederal asumen que la proposición socialista para reformar una ley que ha abierto la puerta a beneficios penitenciarios para más de 700 agresores sexuales, "va a salir adelante en los términos en los que la redactó el PSOE", y no sólo porque el PP vuelva a esta dispuesto a apoyarla, sino porque no descartan que esta vez "se puede romper la disciplina de voto" en Unidas Podemos en un tema sobre el que creen que la ministra Montero ha tensado innecesariamente la cuerda del Gobierno de coalición.

Por su parte, la resistencia de Díaz a negociar ningún término de su futura plataforma antes del 28 de mayo, día de las elecciones locales y autonómicas, -salvo una declaración pública y multilateral que no satisface a Podemos- está envenenando la convivencia interna aún más. Asens, de los comunes y, por tanto, próximo a la vicepresidenta segunda frente a los morados, apeló este martes a la necesidad de "superar el narcisismo de las siglas" para no caer en "exceso de tacticismo político", al tiempo que alertó del riesgo de poner en peligro al Gobierno de coalición.

Echenique vuelve a apelar a unas "primarias abiertas"

Pero Echenique, aunque ayer se mostró más cauto, vuelve a apelar a unas "primarias abiertas en las que todo el mundo pueda participar. Eso garantizaría la unidad, que es lo que queremos todo el mundo", aunque dijo no querer entrar en detalles para no malograr las vías de comunicación abiertas.

Mientras se sigue negociando in extremis para intentar que Podemos vaya a la cita del domingo 2 en el madrileño polideportivo de Magariños -lo que cada día que pasa parece más improbable- los plazos de tramitación de la reforma de la ley del "sólo sí es sí" siguen avanzando. En Igualdad aseguran que no hay novedades y que el Grupo Socialista "no se ha puesto en contacto" con el de Unidas Podemos. "Todo depende de ellos", afirman en alusión a los socialistas.

El próximo 10 de abril concluye el plazo enmiendas y el 11 pasará por la Comisión de Justicia, que preside el socialista Felipe Sicilia. Posteriormente, el dictamen final se discutirá en pleno en la penúltima semana del próximo mes. Los populares han venido insistiendo en que hubiera sido posible agilizar los plazos de la reforma, dado que los delitos sexuales que se produzcan de aquí al 20 de abril serán juzgados con un Código Penal más favorable para el agresor.