En medio de la tormenta, la portavoz en el Congreso de los Diputados por Ciudadanos y expresidenta del partido a nivel nacional, Inés Arrimadas, guarda calma. Tampoco aventura su futuro inmediato, aunque deja en el aire dar de nuevo un paso electoral. Corren tiempos difíciles para la organización liberal, un declive acelerado desde los comicios de Andalucía el verano pasado que les hicieron desaparecer del parlamento. Ni siquiera la refundación emprendida, las primarias y el cambio de liderazgo, o los trabajos internos que estructuraron las directrices de valores y estatutos aprobados en ponencia han permitido cambiar la tendencia electoral. Es muy baja y, a priori, no da ninguna opción al partido de entrar en la mayor parte de los ayuntamientos y las comunidades autónomas en mayo, o la cámara baja en diciembre tras las generales.

Los mejores datos, con cuatro concejales atribuidos, los consigue Begoña Villacís como cabeza de lista al Ayuntamiento de Madrid, pero sus dudas iniciales y la propuesta de ser una corriente interna del PP después de la remodelación de su partido, y ahora, ya reafirmada en las filas naranjas, el consecuente descalabro del aparato madrileño con dos tercios de fugas del grupo en el Palacio de Cibeles -a falta de saber si irán a parar a las listas populares en la localidad-, empañan más el panorama de supervivencia de la formación.

Frente a cuestiones como esta, Arrimadas evitaba entrar en detalles al respecto el martes tras la Junta de Portavoces del Congreso, tan solo un par de horas después de que la vicealcaldesa madrileña anunciara su nuevo equipo. Y abogaba por destacar que, independientemente de las salidas o los nuevos nombramientos, la candidatura centrista, de la que se conocen los diez primeros puestos y que lidera el núcleo duro de Villacís en apoyo a profesionales de la sociedad civil, "es el mejor equipo de gobierno" posible. "Estamos preparados para afrontar la batalla de mayo. Vamos a seguir defendiendo las políticas de Ciudadanos y en el Ayuntamiento de Madrid seguimos siendo decisivos". "Las encuestas lo dicen"; que el Ejecutivo local "va a depender de los votos de Ciudadanos, y ojo, porque podríamos seguir" dentro, opinaba la jerezana.

Fuentes de Ciudadanos reconocen, no obstante, que la situación electoral no es buena en términos generales, y eso se percibe desde dentro y en todas las capas del partido. Y advierten que la propia Arrimadas también es consciente. "En mayo se va a dar una bajada muy importante en muchos sitios, que nadie piense que esto va a ser como hace cuatro años", recalcan integrantes del partido naranja. Las previsiones, por promedio de todos los sondeos, con todo, son claras. Solo en Aragón, donde los problemas para presentar candidatura han sido notables, se vislumbra uno de los doce representantes logrados en las anteriores elecciones con menos de un tercio de votos estimados.

El mismo patrón, de un tercio de pérdida de sufragios se da en Castilla-La Mancha, con la excepción la Comunidad Valenciana, donde los naranjas pasarían de algo más de 466.000 a 100.000, según las mejores previsiones. En el resto del país, el desplome es generalizado. En datos totales y sin contar a aquellas regiones que no acuden a urnas, caso de Castilla y León, Cataluña, País Vasco, Galicia y Andalucía, los de Patricia Guasp perderían el 67% de sus votantes; de 1,3 millones a cerca de 400.000.

Desde el partido también trasladan que la actitud de Arrimadas es relativamente positiva pese al contexto político turbio. Explican que ella, en distintas conversaciones, recalca que aún con "la bajada importante" de representación no sería la primera vez que un partido liberal en Europa pasa por momentos complicados. La posición de la portavoz parlamentaria, añaden, es la de "seguir trabajando" para reflotar con una coyuntura más favorable.

Esta comparativa de Arrimadas ya fue recurrente en el proceso de refundación con alusiones a los liberales alemanes, que en 2013 desaparecieron del Bundestag y retornaron en la siguiente legislatura, aunque ahora atraviesan complicaciones tras su integración en el tripartido de gobierno progresista. También fue empleada en la previa de las elecciones andaluzas. Y es que desde la formación se aseguraba que no sería un desastre perder veinte escaños. Finalmente, perdieron 21 arrollados por la mayoría del PP, y ahora los feudos locales están siendo barridos de cargos de manera silenciosa por los de Juanma Moreno.

La actitud de Arrimadas es positiva. Entiende que, pese a los resultados, que se prevén muy bajos, la clave es seguir trabajando para la recuperación"

Sobre su futuro político y la posibilidad de optar a las próximas primarias para decidir el candidato a las generales, esas fuentes conocedoras aseguran que Arrimadas aún no ha decidido nada. "No lo tiene aún decidido, y probablemente tomará una decisión después de las elecciones de mayo", indican. Pero en ninguno de los casos, dicen, tiene pensado transitar al PP de Alberto Núñez Feijóo como augura Fran Hervías, el exsecretario de Organización que dio el salto a Génova con el auspicio de Teodoro García Egea. Ella misma, lo afirmó el martes desde el Congreso y ha reincidido en ello en un acto junto a Villacís este jueves en el campus de Getafe de la Universidad Carlos III de Madrid: "Yo con Ciudadanos, o con nadie. Lo tengo clarísimo".

Hay una línea en la que coinciden varios miembros de la formación cuando se les pregunta, y es la de que Arrimadas "aguantará hasta el final" frente a otros compañeros de escaño que, como ha publicado El Independiente, podrían adelantar su marcha del Congreso si reciben una oferta para retornar al sector privado. Porque hay un aperturismo generalizado. Pero por ahora, y a la espera de cerrar el ciclo municipal y regional para empezar a analizar los movimientos electorales del partido para diciembre, Arrimadas, dicen desde Ciudadanos, está centrada en las responsabilidades de la cámara baja y completamente ajena a la toma de decisiones.

La agenda parlamentaria de Arrimadas ahora ya sin la reforma de las pensiones de fondo, aunque con el discurso en defensa de las familias como leitmotiv, ha pasado a ser la gestación subrogada tras la polémica de finales de marzo que obligó a tomar postura a todos los partidos. En Ciudadanos, que ya ha registrado una proposición de ley para regular la reproducción asistida que no podrá llegar hasta septiembre a toma en consideración, quieren alargar la cuestión todo lo posible para obligar a PP y PSOE a postularse.

En el caso de los populares, por la ambigüedad que ejercen y que dejaron con la ponencia de valores de hace seis años; respecto al PSOE, por el rechazo del Comité Federal. "Hay gente del PP y del PSOE muy proclive a esta técnica y que ha acudido a ella", indican fuentes parlamentarias, que piden "libertad" a la cúpula de esos partidos para que cada cual se pronuncie como considere. Así quería reflejarlo la formación la próxima semana con una moción consecuencia de interpelación que englobaba otras cuestiones. Pero la Mesa del Congreso, con mayoría de PSOE, PP y Unidas Podemos, ya ha frustrado ese intento.

En Ciudadanos entienden que su propuesta deja líneas concretas: acceso a este método de reproducción a aquellas personas en edad de adoptar, entre 25 y 45 años, y de aquellas gestantes que lo hagan por altruismo, que cuenten con recursos económicos para evitar que impere el objeto de lucro y con más de 25 años. "Está muy pensado y es razonable. Si el resto de grupos leen bien la ley, los inconvenientes que plantean quedan resueltos", añaden desde el partido.

Descarta ir al PP, pero no ser candidata de CS

Aprovechando la publicación de Ciudadanos, la historia jamás contada, el exfontanero de Ventas -barrio donde se ubica la sede nacional del partido-, que arremete entre las páginas del libro contra Arrimadas, ha difundido que la política podría estar negociando su salto a las siglas conservadoras para aspirar a ser diputada por Cádiz. Lo cierto es que Arrimadas ha retornado a Jerez de la Frontera, pero es algo que responde a cuestiones familiares y de conciliación. Así lo ha asegurado ella, quien en privado, según ha podido saber este periódico, ironiza con la posibilidad de que el PP vaya a hacerle una oferta y achaca el rumor a un bulo fomentado por Hervías. Con todo, junto a otros cargos, Arrimadas era una de las grandes apuestas del PP de Pablo Casado.

Guasp estudiará como Arrimadas presentarse a las primarias de otoño; Bal adelantó en enero que buscaría una segunda oportunidad"

Si puede darse un planteamiento político en los próximos meses, ese será el de optar a ser cabeza de cartel de los liberales en las generales. Durante el proceso de refundación, se acordó implantar un doble ticket de primarias para elegir al portavoz político y al secretario general, primero en el contexto de la renovación de las siglas; y posteriormente para revalidar a la figura política elegida previamente o no como candidata a la presidencia del Gobierno.

El entorno de su mano derecha parlamentario y aspirante en enero, Edmundo Bal, que a priori sí buscará una segunda oportunidad en esa votación, denunciaba en campaña de candidaturas que el paso atrás de Arrimadas escondía un deseo de volver a dar el salto con posterioridad. De hecho, se alude a una conversación privada entre ambos dirigentes en la que Bal habría rechazado esa maniobra sugerida por la expresidenta, de retroceder conjuntamente del mando del partido para luego volver meses después, por catalogarla de poco transparente [ello habría llevado a Bal a presentarse contra la corriente de Arrimadas]. Ahora, y aunque su entorno negó que esa versión fuese real, la portavoz deja la puerta abierta a meditar volver a situarse al frente del partido. Guasp, en el cargo, tras el 28-M, también analizará concurrir al proceso.

Cualquiera de los aspirantes que resulte ganador, pese a todo, tendrá que navegar en un entorno hostil. Aplicando la misma regla porcentual que en las autonómicas, si en estos momentos las encuestas otorgan a Ciudadanos de media un 2,18% del voto, se prevé que de los 1,65 millones obtenidos el 10-N, solo logren 765.517.