Hace años que José Luis Rodríguez Zapatero es uno de los principales apoyos de Pedro Sánchez. No fue siempre así, pero desde que el hoy presidente del Gobierno ganó las primarias en 2017, el expresidente se alineó con él. Y está a tope con él. Siempre. No le falla. Y este sábado volvió a suceder. La dirección del PSOE le encomendó la apertura de la conferencia municipal, el último gran acto de partido antes del 28-M, y su mensaje no dejó lugar a dudas: los alcaldes y presidentes autonómicos, los candidatos, los cargos y las bases han de defender con "convicción" la gestión del Gobierno. Y especialmente hacer suyo uno de los elementos que más dudas ha generado en las filas socialistas: su estrategia de distensión con Cataluña. El expresidente cree que hay que aplaudir la "valentía" que Sánchez tuvo a la hora de conceder los indultos a los dirigentes independentistas, que su decisión de "pacificar" Cataluña fue un acierto y que hay que reconocérselo.

Meses atrás, cuando el presidente decidió derogar la sedición y, sobre todo, reformar el delito de malversación para pasar página definitivamente del procés, el PSOE tembló. Tenía miedo. Miedo a que la modificación del Código Penal no fuera entendida por los ciudadanos y a que se produjera un goteo de rebajas de condenas por delitos relacionados con la corrupción, como ocurrió con la ley del sí es sí. Pero no ocurrió y Cataluña, pese a los intentos del PP por meterla en agenda del 28-M, no está en primer plano. Por eso llamó más la atención que el expresidente decidiera que sí, que el PSOE debe hablar de Cataluña y sacar pecho de la gestión del Ejecutivo.

España va al 28-M "con paz, sin violencia en ningún territorio", con "una Cataluña pacificada gracias a la postura de diálogo de Sánchez"

Zapatero recordó que el "ideal democrático" es "la paz y la igualdad". "La paz, la convivencia en la diversidad, la no violencia, el respeto". Y ahora España camina hacia unas elecciones, las autonómicas y municipales del 28-M, "con paz, sin violencia en ningún territorio, ni en el País Vasco y con una Cataluña pacificada gracias a la postura de diálogo de Pedro Sánchez". El expresidente sostuvo que lo que distingue a un jefe del Ejecutivo "con liderazgo y visión de futuro" es la que que el líder del PSOE adoptó "con valentía y gran acierto", la de "aplicar los indultos" a los independentistas catalanes. "¡Qué lejos parece que quedan los buenos momentos cuando estamos en paz y en tranquilidad!", exclamó.

"La política social más comprometida"

El expresidente enfatizó que "no hace tanto" España sufría una "crisis gravísima" porque estaba en duda su "unidad". Por esa razón, "todos los compañeros del PSOE, en cada rincón de España", tienen el "deber, el compromiso y la convicción" de proclamar que "gracias al Gobierno de Pedro Sánchez el futuro de la unidad de España está en un tiempo de estabilidad y tranquilidad".

La reflexión de Zapatero no era menor. La estrategia con Cataluña despierta recelos en territorios como Aragón o Castilla-La Mancha, pero sin embargo sí ha ayudado a fortalecer al PSC en una comunidad que aporta millones de votos. Y esa reivindicación también estira de las opciones del candidato a la alcaldía de Barcelona, Jaume Collboni, en competida disputa con el aspirante de Junts, Xavier Trias.

Podemos estar convencidos, confiados y decididos a defender lo que pensamos"

JOSÉ LUIS RODRÍGUEZ ZAPATERO, EXPRESIDENTE DEL GOBIERNO

Pero no es la política con Cataluña lo único que, a juicio de Zapatero, debe agradecer el PSOE al presidente. Si el empleo ha crecido, si hay crecimiento económico sólido y por encima de la media europea, si se están desplegando fondos europeos, si el Gobierno ha impulsado "la política social más comprometida de toda la democracia" (el salario mínimo, las pensiones, el ingreso mínimo vital...), entonces el PSOE debe salir a la ofensiva, concluyó: "Podemos estar convencidos, confiados y decididos a defender lo que pensamos", defender la gestión de Sánchez y "a ganar las elecciones del 28-M". "España está en marcha y con un futuro de progreso", apuntaló.

De entre las conquistas del Ejecutivo, el expresidente citó, y era previsible, la ley de vivienda, acordada definitivamente con ERC y Bildu este viernes y que podría estar ya aprobada antes de las urnas. "[En la derecha] Ya están diciendo que van a subir los precios. Que no tengan tanta ansiedad, que tengan un poco de paciencia —ironizó—. Es un esfuerzo que merece la pena hacer, la vivienda es uno de los grandes temas que preocupan a la mayoría de los ciudadanos".

Zapatero subrayó la importancia de la ley como minutos antes lo había hecho la vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero: "La vivienda no es un lujo, es un derecho de los ciudadanos. El PP ha estado a la contra desde el minuto uno, que ha pensado que cuanto peor, mejor le iría en sus intereses electorales". Los populares, se quejó, "juegan a poner piedras en las ruedas", tratan de que "no florezca ni se abra camino" la política del Gobierno. Pero mejor para los socialistas, vino a decir, porque así se verá con nitidez que los conservadores siguen representando "intereses singulares", de las empresas, de las minorías, dijo. "Nosotros, a lo nuestro, a ese avance de derechos y libertades", sostuvo, reclamando a los suyos también que se abstraigan del ruido y reivindiquen la gestión.

Montero también alude a Doñana, otro asidero electoral potente que los socialistas están explotando contra Moreno en Andalucía

Montero, muy aplaudida en este arranque de la convención municipal, también aludió a otro de los asideros electorales a los que se está agarrando el PSOE con firmeza: el plan de Juanma Moreno de indultar un millar de hectáreas de regadíos ilegales de Doñana. "Doñana no se toca. Salvemos Doñana. La principal tarea que tiene un gobernante es ser capaz de dejar condiciones de vida más adecuadas para los que vienen detrás y no se pueden hipotecar las generaciones futuras por un puñado de votos", sostuvo la ministra de Hacienda, quien recordó que en estos comicios del 28-M no se la juega el PSOE, sino "los hombres y mujeres que no tienen más patrimonio que la política". Sánchez, desde Bilbao, donde acudió un homenaje al fallecido dirigente Rodolfo Ares, también reivindicó la ley de vivienda y la firmeza de su Ejecutivo con el parque nacional onubense.

Zapatero pintó una oposición desnortada, que no sabe "qué hacer, qué proponer", porque el Ejecutivo "está haciendo las cosas muy bien". Y es que la oposición, "o es muy imaginativa o cae en el estrambote", se burló, y puso como ejemplo la moción de censura de Ramón Tamames o el recurso del PP a la telepredicadora evangélica Yadira Maestre.

Montero, por su parte, animó a los alcaldes y candidatos recordándoles que ellos son las terminales del partido en toda España, la "articulación de la política útil que esperan los ciudadanos". "La fuerza de este partido son sus profundas raíces. Todas las organizaciones que nacen coyunturalmente al albur de una situación política y no se enraízan, pasa la ola y no dejan rastro", subrayó, refiriéndose a los nuevos partidos. Sin embargo, lo que ha hecho al PSOE "fuerte" es precisamente su "capacidad de enraizarse en cada barrio, en cada plaza, en cada pueblo donde se intenta poner rostro a la política". El PSOE es, remachó, "el mejor instrumento que tienen los españoles para cambiar sus vidas.

La número dos defiende las "raíces" fuertes del PSOE frente a los nuevos partidos, que "pasa la ola y no dejan rastro"

La vicesecretaria general y el expresidente del Gobierno cargaban así las pilas a los suyos en el arranque de una convención municipal que los socialistas celebran en medio de la incertidumbre. Con la sensación, aseguraban alcaldes, candidatos y cuadros, de que el partido aguantará el 28-M y que podrá revalidar su poder territorial siempre que sus socios no se hundan. Pero la competición estará muy reñida y nadie tiene claro que el mapa quede igual al que arrojó 2019, cuando la ola era claramente a favor de los socialistas.