La "lógica matemática" se impuso este martes en la sesión constitutiva de la Asamblea de Extremadura. Es la lectura que hace el PSOE después de lograr hacerse con la presidencia de la Cámara por el desacuerdo de PP y Vox. Pero el partido entiende que esa es la misma "lógica" que debe operar para que también continúe al frente de la Junta el socialista Guillermo Fernández Vara, ya que fue quien ganó las elecciones autonómicas del 28-M, por encima del PP, con el que empató en escaños.

Debería ser así, señaló este martes desde Ferraz la portavoz federal del partido, la ministra Pilar Alegría, si Alberto Núñez Feijóo no cayera en una "falsedad": defender la lista más votada y al mismo tiempo incumplir ese principio arrebatando alcaldías y gobiernos al PSOE.

El PSOE recuerda su "ejercicio de responsabilidad" cuando en 2016 se abstuvo para que Rajoy pudiera ser investido

El líder del PP estuvo el lunes por la noche en Hora 25, en la SER, y allí defendió que él se abstendría si Pedro Sánchez ganara las elecciones para que no dependiera de Sumar y de las formaciones nacionalistas e independentistas, y emplazó al PSOE a que haga lo mismo. Para Alegría, "el cinismo de Feijóo roza el insulto", porque el pasado sábado, con la constitución de los ayuntamientos de toda España, cuajaron "187 acuerdos" entre PP y Vox, y en 52 de ellos ambos arrebataron la vara de mando a la lista más votada, que fue la del PSOE.

Además, "la memoria de Feijóo es frágil", apuntó la ministra, porque fueron también los socialistas los que se abstuvieron en 2016 —desgarro mediante del partido— para facilitar la investidura de Mariano Rajoy. "Ese ejercicio de responsabilidad no lo hemos visto en ninguna ciudad y en ninguna comunidad autónoma", señaló a los periodistas.

Mayoría absoluta en la Mesa extremeña

"Si la palabra de Feijóo tuviera más valor que un euro de madera deberíamos tener 52 alcaldes más socialistas", censuró la ministra, tras ocultar al jefe de los populares de "ocultar sus verdaderas intenciones".

Al no haber acuerdo de PP y Vox, el PSOE y Podemos lograron cuatro puestos en la Mesa de la Asamblea, por los dos de los populares. Vox, fuera

La jornada estaba marcada por lo sucedido en la Asamblea de Extremadura. La ruptura entre populares y Vox hizo que la socialista Blanca Martín fuera elegida en segunda vuelta presidenta de la Cámara autonómica, con los 28 votos de su partido y los cuatro de Unidas por Extremadura, la coalición de la que forma parte Podemos. El PSOE se hizo también con una vicepresidencia y una secretaría de la Mesa y cedió una secretaría a los morados.

El PP, mientras, se quedó con una vicepresidencia y una secretaría, por lo que la izquierda tiene mayoría absoluta en el órgano rector de la Asamblea, de 4 a 2, con la derecha extrema fuera. El PP tiene 28 diputados en el Parlamento extremeño, los mismos que el PSOE, aunque fue segunda fuerza, y con los cinco de Vox alcanzaría la mayoría absoluta para que su candidata, María Guardiola, lograse la investidura y derribara a Vara. Pero la jefa de los populares extremeños advirtió este mismo martes de que está dispuesta a ir a nuevas elecciones si la ultraderecha no renuncia a entrar en el Gobierno.

Desde la Moncloa no se creen las palabras de Guardiola frente a Vox, como tampoco las de Feijóo. Recuerdan que en 2019 el PP votó en contra de la investidura de Sánchez por dos veces, pese a que el líder socialista fue el más votado en las urnas. Lo que se ha visto en los últimos días, apostillan, es que allá donde pueden, pactan PP y Vox.