Primera comparecencia desde Bambú tras el comité de acción política y desde que se han oficializado los nuevos pactos con el PP, caso del programático y de investidura de Baleares, y de coalición en Extremadura, el que más ha costado a los de Santiago Abascal en estas semanas de negociación. Quedan por delante otra arena complicada como la murciana, con el popular Fernando López Miras enrocado en la negativa a incorporar a Vox en su nuevo gobierno, y Aragón, donde todo está dialogándose con baja repercusión pública. Allí, el acuerdo puede ser muy parecido al extremeño. Sobre el asunto de los pactos se ha referido este lunes el secretario general de Vox Ignacio Garriga.
"Seguimos con la mano tendida, y dentro de poco anunciaremos buenas noticias", ha dicho en referencia a las conversaciones con el líder de los populares aragoneses Jorge Azcón. "En Murcia no están tan dispuestos", ha señalado Garriga, evidenciando las diferencias que hay en la región con los populares. De hecho, hoy estaba previsto que recibieran una llamada, pero por el momento no se ha producido. En este enclave, Vox considera troncal entrar en el Ejecutivo, pero especialmente garantizar que haya un órgano de control del pacto que se pueda alcanzar. Más cuando existen precedentes como "el anterior pacto de investidura que [el PP] traicionó" y el gobierno durante el resto de la legislatura con "tránsfugas de Vox" y de Ciudadanos. "Pedimos respeto a nuestros votantes y garantías para que no se produzca lo sucedido", ha dicho Garriga en referencia a Murcia.
"Parece que en Génova están dispuestos a usar a Murcia como laboratorio" político, ha recalcado con una clara connotación nacional y en respuesta al PP. Este lunes, el presidente del PP nacional, Alberto Núñez Feijóo, ha insistido en que su deseo es lograr un gobierno en solitario. Lo ha hecho en una entrevista en Telecinco en la que ha sugerido que seguirá el mismo criterio que en las autonomías: si se supera la suma de toda la izquierda, se buscará un gobierno en solitario. "Está en torno a los 150 diputados. Mi objetivo no es sacar 150, es una mayoría suficiente superior. A partir de los 160 escaños empezamos a hablar", ha considerado Feijóo.
Rajoy obtuvo la mayoría absoluta tras el peor gobierno de España, del PSOE de Zapatero, y no sirvió de nada"
Ignacio Garriga, secretario general de Vox
Frente a ello, Garriga ha mencionado que no están dispuestos a "regalar ni un solo voto" si el PP suma más que toda la izquierda. Exigimos "respeto a los votantes de Vox". "Los sillones nos importan nada, pero queremos empezar por cambiar las políticas y vamos a seguir poniendo sobre la mesa medidas de sentido común. Ya las conoce el PP", ha asegurado el secretario general de Abascal.
De seguido, Garriga ha recordado que el PP de Mariano Rajoy, frente a los números que plantea Feijóo, "obtuvo la mayoría absoluta" tras "el peor Gobierno que ha tenido nuestro país, el de José Luis Rodríguez Zapatero". "Y no sirvió para cambiar nada. Imagínense para qué puede servir [la suma que plantea el PP], para nada". "Vox estará en función de la fuerza que obtenga, pero siempre poniendo los intereses de los españoles en el centro de cualquier conversación", ha indicado el de Vox.
Rechazo a las encuestas publicadas
Ante la movilización de la izquierda, que empieza a favorecer ligeramente al PSOE de Sánchez frente a un estancamiento en escaños de PP y Vox, que pese a todo siguen superando la mayoría absoluta, desde Bambú rechazan las estimaciones de voto y escaños que están dándose en las últimas semanas; tras los pactos de PP y Vox en las diferentes regiones. "No tengo ninguna duda de que estas encuestas impuestas desde los despachos [no sé precisa de cuáles] pretenden desmovilizar. Responden al miedo de que se acaben ciertos privilegios y para frenar la alternativa", ha respondido Garriga cuestionado por ello.
"Estas encuestas teledirigidas salen de los medios que critican al PSOE [puede entenderse GAD3 en ABC, NC Report para La Razón o SocioMétrica para El Español, entre otras], pero parece que tienen más interés en desanimar y condicionar el voto", ha descrito el secretario general reflejando que, pese a una estimación media de 39 escaños, "hay una respuesta de españoles en las convocatorias que hacemos, que se van a traducir en votos con papeletas de Vox".
Vox se atribuye el "fin de la imposición lingüística"
Garriga ha valorado como "histórico" el acuerdo de Baleares, "un avance que ninguna otra formación había logrado". El dirigente de Vox se ha referido así al "fin de la imposición lingüística, igual que en la Comunidad Valenciana". "Gracias a Vox garantizamos un derecho fundamental de los padres con sus hijos, y más pronto que tarde se abrirá una etapa de libertad en el resto de nuestra querida nación", ha ejemplificado Garriga con Cataluña o País Vasco. "Vox va a trabajar sin descanso" para asegurarlo, ha recalcado. Precisamente ello, con la creación de la Oficina de la Libertad Lingüística en Baleares, ha sido "suficiente" para que Vox no entre en el Gobierno [sí en el consell de Mallorca] de Marga Prohens, con un órgano, además, de control del pacto mediante.
Garriga ha valorado positivamente el giro de la líder del PP de Extremadura en esta pasada semana, y ha alentado a López Miras ha tomar ejemplo: "Seguimos esperando a que se sume a las reconsideraciones de sus compañeros de partido".
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