El Gobierno se reconoce tremendamente indignado con las últimas palabras de José María Aznar, en las que llama a una suerte de rebelión nacional contra la futura e hipotética ley de amnistía. Cree que sus palabras no son otra cosa que "llamamientos golpistas" que han de ser rectificados inmediatamente por el jefe de filas del PP, Alberto Núñez Feijóo.

Los socialistas y la propia Moncloa continúan guardando discreción respecto a sus contactos con los independentistas para amarrar la investidura de Pedro Sánchez, por eso la portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, no ofreció más datos de esas conversaciones en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de este martes. Pero sí llevaba munición preparada contra Aznar y contra el PP: el Gobierno entendía, señalaban fuentes del entorno de la ministra después de la comparecencia, que debía emplear total rotundidad para condenar unas declaraciones muy severas del expresidente del Gobierno.

Para el Gobierno, son de "absoluta gravedad" declaraciones que "se parecen más a comportamientos antidemocráticos y golpistas"

Este, en una intervención esta mañana en un campus de la Fundación Faes, recalcó que la amnistía legitimaría la "intentona sediciosa" y sería una "invitación a volver a hacerlo". Acusó a Sánchez de hacer peligrar la continuidad nacional y llamó a una respuesta cívica, una movilización de la sociedad española como la que en su momento salió a las calles contra el terrorismo.

"Resulta de absoluta gravedad que un expresidente del Gobierno haga este tipo de declaraciones que se parecen más a comportamientos antidemocráticos y golpistas que a los propios de un expresidente y que son, desde luego, incompatibles con los valores democráticos y constitucionales de nuestro país", censuró Rodríguez desde la Moncloa.

Respuesta "contundente"

La portavoz recordó que fue Aznar "quien mintió a los españoles" y "quien utilizó el mayor atentado terrorista a nuestro país", el del 11 de marzo de 2004. Por eso entiende que "quien hizo todo eso tiene poca credibilidad" y sus declaraciones "no tienen ningún valor político ni tan siquiera moral".

La rectificación "inmediata" es necesaria, aduce Rodríguez, porque si no, "¿qué sería lo siguiente, la llamada a un alzamiento?"

Sin embargo, "por lo que representa su figura y el papel que aún tiene en el Partido Popular", el Gobierno cree que Feijóo debería exigirle que rectificara "en aras del interés de nuestro país, de los valores constitucionales y democráticos que nos son propios".

Rodríguez sostuvo que esos "llamamientos golpistas" y "comportamientos propios de sistemas antidemocráticos", que "no son nuevos en el PP", han de ser enmendados "de inmediato" por la actual cúpula conservadora. Instó a Feijóo a que "corrija esa dirección" porque, de lo contrario, "¿qué sería lo siguiente, la llamada a un alzamiento?".

La Moncloa, explicaron después fuentes gubernamentales, decodificó las palabras del expresidente como una suerte de llamamiento a la rebelión nacional, no solo cívica, por lo que merecía una "respuesta contundente" por parte del Ejecutivo central. Y por otra razón que entienden no menor: Aznar, apuntaban, "no es un verso suelto" dentro del PP, sino que es un exdirigente que sigue pesando mucho en su partido.