Este sábado los morados celebran un acto de reafirmación y de demostración de fuerza bajo el lema "Con vosotras, Podemos" encabezado por Ione Belarra e Irene Montero. Constituye el arranque de una estrategia que tiene mucho de pulso a Sumar, tanto después de su exclusión de las portavocías adjuntas del Congreso de los Diputados como de carácter preventivo ante la posibilidad de quedar fuera también del reparto de ministerios en caso de volver a conformarse un gobierno de coalición con el PSOE.
Y aunque formalmente no se está en ese momento procesal, aunque incluso no se descarta una indeseada -al menos por parte de Yolanda Díaz- repetición electoral, los morados parecen empezar a aceptar el riesgo de quedar fuera de la ecuación si insisten en la opción Irene Montero para el Ejecutivo.
"Podemos ya sabe que Irene no", dicen a El Independiente fuentes conocedoras de las tensiones internas en Sumar. El partido de Belarra tiene pocas, por no decir nulas, posibilidades de sentarse en el Consejo de Ministros, pero si finalmente hubiera una ventana de oportunidad al respecto, deben olvidarse del nombre de la controvertida titular de Igualdad.
Los morados vienen lanzando mensajes claros al respecto, el último el pasado miércoles, día en que se reunió por vez primera desde el 23-J la Junta de portavoces del Congreso de los Diputados. Tras la reunión de este órgano, lo lógico es que vayan compareciendo en la sala de prensa de la Cámara los distintos portavoces para dar cuenta de los acuerdos adoptados en la misma y analizar la actualidad política.
Podemos volvió a exigir este miércoles un ministerio y elegir a su representante
Pero incluso antes de esa cita, Javier Sánchez Serna, diputado de la cuota de Podemos y, por tanto, sin ninguna responsabilidad en el Grupo Plurinacional de Sumar, se adelantó y ofreció una rueda de prensa para lanzar dos mensajes, esto es, la exigencia morada de estar en el Consejo de Ministros y poder elegir quién les representa en el mismo, además de autonomía política en el Grupo Parlamentario. "Creemos que tenemos que estar en el Gobierno de coalición y lo vamos a manifestar dentro del espacio y al PSOE. No concebimos que se excluya a Podemos", reiteró.
Y aunque siguen reivindicando el nombre de Montero es precisamente esa insistencia la que les puede dejar sin silla gubernamental, habida cuenta, además de que los socialistas quieren recuperar la cartera de Igualdad esta legislatura, todo sujeto al acuerdo con Junts. Uno de los nombres que ha irrumpido con fuerza en las quinielas como futurible ministro es el del secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, a su vez Secretario de Economía y Nuevo Proyecto de País de Podemos y portavoz económico de Sumar.
Pero para muchos morados Álvarez resulta más próximo a Yolanda Díaz que a Belarra y Montero. Un dirigente con discurso claro en lo económico y en lo social, pero no significado en las peleas internas ni en las batallas culturales tan del gusto de Podemos.
Mucho se ha especulado en torno al acto de este sábado en el teatro Fernando de Rojas del Círculo de Bellas Artes, una vez se cambió su ubicación inicial prevista en la plaza Nelson Mandela del madrileño barrio de Lavapiés, sitio emblemático para los morados pues allí celebraron su primer acto político cómo partido. Belarra convocó para este sábado a la militancia a través de un vídeo colgado en Twitter que constituía toda una declaración de principios y, también, un aviso a navegantes.
"Necesitamos más Podemos que nunca", proclama Belarra
"Necesitamos más Podemos que nunca. Es la única herramienta política que ha demostrado en estos años su capacidad de transformación, la única herramienta política que ha dicho lo que nadie más se atreve a decir". Y añadía, acaso en referencia a las batallas intestinas del espacio de Unidas Podemos, que "el coste por avanzar ha sido muy alto pero con vosotras y con vosotros estamos dispuestas a seguir construyendo Podemos. Seguimos".
Sin embargo, no son sólo los morados quienes quieren marcar perfil propio, aunque sí los más problemáticos para la vicepresidenta segunda. El mismo martes en que Sánchez Serna volvía a presentar en el Congreso la carta de exigencias de Podemos, se vivió un carrusel de comparecencias de Sumar. Además de la autodenominada "portavoz principal", Marta Lois, lo hicieron Aina Vidal, por los comunes; Àgueda Micó, por Compromís y Jorge Pueyo por la Chunta, cada uno con sus reivindicaciones territoriales.
No va a haber, en definitiva, ministerios para tanto partido, sin descartar, además, una reducción en el elefantiásico número de carteras actual. El socio minoritario podría pasar de tener una vicepresidencia y cinco ministerios a cuatro, perder Igualdad pero, acaso, mantener Trabajo recuperando para este departamento las competencias de Seguridad Social. No obstante, esa será la siguiente batalla. Ahora hay que convencer y dar satisfacción al prófugo de Waterloo.
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