A las 6:00 horas del pasado domingo 1 de octubre el 112 recibió la primera llamada que alertaba de que se había producido un incendio en tres discotecas de Murcia: Fonda Milagros, Teatre y Golden. La incertidumbre comenzó a crecer mientras los familiares de las personas que estaban allí de fiesta trataban de contactar con ellas para asegurarse de que estaban bien. Pero algunas nunca contestaron. Y una semana después tenemos algunas certezas y muchas incógnitas de lo sucedido.

Lo cierto es que el caso se ha enturbiado progresivamente a medida que se iban conociendo más detalles. Pero hay tres personas en el foco. El primero es Juan Inglés Rojo, propietario de Teatre y de Fonda Milagros. El segundo es Marco Andrés Martínez Alcázar, que gestionó las dos salas de fiesta hasta 2017, cuando estaban unidas y conformaban una única discoteca. Y el tercero es Juan Esteban Ramírez, el empresario colombiano que dirige actualmente Fonda Milagros, que alquila a Inglés Rojo.

El incendio

Las primeras hipótesis apuntan a que las llamas se originaron en Fonda Milagros, un local de ambientación colombiana, antes de extenderse a las otras dos salas. Pero mientras que Teatre quedó muy perjudicada, Golden, sólo se vio afectada por el humo. No obstante, desde Fonda Milagros consideran que el fuego pudo haber comenzado en Teatre. Algo que sólo podrá confirmar la Policía Científica cuando finalice su investigación, que ya está en marcha. 

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Las tres discotecas están ubicadas en el polígono de Las Atalayas. Una zona que ejerce como uno de los principales núcleos de ocio de la ciudad, y que cuenta con diversas salas de fiesta, centros comerciales e incluso con el Palacio de Deportes de Murcia. Sin embargo, en los últimos años diversas fuentes apuntan que el lugar se había degradado bastante, siendo los robos, las peleas y los conflictos muy habituales.

Las víctimas

Lo que sí se conoce es el balance de fallecidos. Hubo 13 muertos, todos ellos latinos, a los que hay que sumar otros 24 heridos. Según informaron El Mundo y El País tenían profesiones y edades muy variadas. Juan Esteban Ramírez, el empresario que gestiona la discoteca Fonda, admitió que conocía a casi todos ellos personalmente. 

Miriam Montealegre muestra una foto de sus sobrinos Erick y Sergio Silva acompañados de su madre Martha Hernández. Los tres fallecieron en el incendio | EFE

Estas fueron las víctimas:

  • Erick Torres, nacido en Nicaragua, alquiló un reservado en Fonda para celebrar su cumpleaños. Era padre de una niña de siete años y trabajaba como repartidor.
  • Orfilia Blandón, de 27 años, era la pareja de Erick y también originaria de Nicaragua. 
  • Martha Hernández, de 62 años, era la madre de Erick. Llevaba más de dos décadas residiendo en nuestro país y trabajaba como interna cuidando a un hombre. 
  • Sergio Silva, de 39 años, hermanastro de Erick. Era camarero.
  • Tania Salazar, nicaragüense de 49 años, fue otra de las invitadas al cumpleaños. Llevaba 17 años residiendo en España y trabajaba como empleada doméstica.
  • John, ecuatoriano y pareja de Tania. Se sabe que era padre de varios hijos.
  • Yosi Esteban, de 34 años, era amigo de Erick. Llevaba sólo unos meses en España y trabajaba en una residencia de la tercera edad. Su madre lo buscaba en los alrededores de la discoteca en las horas posteriores al incendio.
  • Rafael Miranda, ecuatoriano de 37 años, era otro amigo de Erick. A él también lo buscaban su hermano y su padre a primera hora del domingo. Llevaba dos décadas en España y trabajaba en una fábrica de alcantarillados.
  • Jorge Batioja, ecuatoriano de 38 años, trabajaba como tractorista. Residía en Caravaca de la Cruz, a 80 kilómetros de Murcia.
  • Rosa María Rosero, de 32 años y también ecuatoriana, era esposa de Jorge, con quien tenía tres hijos (todos ellos menores de edad). Estaba realizando un curso de empleo de limpieza y mantenimiento de jardines en el Ayuntamiento de Caravaca.
  • Leidy Correa, de 28 años y colombiana. Era amiga de Rosa y Jorge. Fue autora del único mensaje que los atrapados pudieron enviar antes de morir. A las 06.06 le envió un audio a su madre para despedirse de ella: "Mami, la amo. Vamos a morir. Mami la amo".
  • Kevin Alejandro, colombiano y pareja de Leidy. Ambos se habían desplazado a Fonda Milagros desde Caravaca, en el mismo coche en el que también iban sus amigos Jorge y Rosa María.
  • Olga Lucrecia, ecuatoriana, de 56 años, era pareja del Ferney Lozano, un conocido locutor radiofónico de una emisora murciana. Era enfermera en una clínica privada.

Los cadáveres

Los 13 cadáveres fueron hallados por los bomberos en Fonda Milagros. La mayoría se encontraron en la primera planta del local, donde estaban los reservados, y en un área de apenas 20 metros cuadrados. Cuatro estaban en los aseos, donde trataron de refugiarse del fuego, siete en el pasillo y otros dos entre los escombros. Pero la proximidad entre los cuerpos hizo que algunas informaciones señalaran que la discoteca, en esa zona en concreto, era poco menos de una ratonera.

Sin embargo, Ramírez negó categóricamente esto. "El local no era laberíntico, todo estaba debidamente señalizado. Y también es falso que murieran porque se les cayó el techo encima. Lo que sucedió es que las llamas provocaron que las luces se fueran, incluso las de emergencia. Nos quedamos totalmente a oscuras, y por eso hubo gente que no pudo salir", relató en la emisora colombiana Blu Radio, donde también explicó que a la hora del incendio quedaban cerca de 150 personas en su local. 

El dueño de las discotecas

El Confidencial informó de que esta no es la primera vez que a Inglés Rojo se le quema una de sus discotecas. En 2019, en San Pedro del Pinatar (Murcia), ardió Flamingoville, que el empresario gestionaba a través de Flamingo San Pedro SL. En septiembre de 2020 aquella discoteca tampoco tenía licencia musical, algo que el Ayuntamiento de Murcia certificó que seguía ocurriendo en agosto de 2021.

Inglés Rojo, dueño de las discotecas del incendio. El Independiente

Aunque Inglés Rojo figura como el propietario actual de Teatre y Fonda, El Mundo ha consultado a varios empresarios hosteleros murcianos, que no tienen dudas de que "el verdadero dueño" es Marco Andrés Martínez Alcázar. Un empresario murciano, muy conocido en la zona (al contrario de Inglés Rojo), que legalmente dejó de estar al frente de la discoteca en 2017 pero que fue condenado en 2018 por puentear la luz del local. Tuvo que pagar 36.160 euros por defraudar electricidad.

Locales sin licencia

Cuando en enero de 2022 Inglés Rojo quiso dividir su discoteca Teatre en dos para poder abrir otro local (que sería posteriormente Fonda) el Ayuntamiento de Murcia le comunicó que las dos discotecas tenían que tramitar una nueva licencia de actividad por separado. Y hasta entonces no podrían abrir al público. Sin embargo, ambas siguieron funcionando con normalidad hasta el incendio, que destapó la situación.

Lo cierto es que en octubre de 2022 el Ayuntamiento ordenó comprobar a los trabajadores municipales si ese cierre se había producido. En caso de que no fuera así, el local debía ser precintado. Pero todos sabemos que eso no sucedió. ¿Por qué? Según La Verdad, esa orden acabó "en el limbo". Se levantó un acta en el que se explicaba que los titulares del local presentaron la "documentación técnica que les faltaba para la tramitación de la legalización". Pero el proceso se quedó ahí estancado, y ninguna fuente oficial ha sabido explicar por qué.

La investigación

Después de lo sucedido el alcalde de Murcia, José Ballesta (PP), decretó tres días de luto oficial en el municipio. Y confirmó que el Consistorio se va a personar en esta causa y depurará responsabilidades: "Que no tengan la menor duda, sea quien sea y caiga quien caiga", afirmó Ballesta.

Desde el Gobierno municipal también anunciaron que habían apartado a los funcionarios que intervinieron en el expediente sobre Teatre Murcia S.L en 2022 hasta aclarar la situación. Y al tiempo, admitieron que en Murcia hay más locales que siguen abiertos a pesar de tener una orden de cierre. Algo que se comprometieron a investigar y subsanar.

El Ayuntamiento

Ballesta gobierna con mayoría absoluta desde las elecciones municipales de este mismo año. Pero en el pasado ya estuvo al frente del Gobierno municipal de Murcia entre 2015 y marzo de 2021, cuando una moción de censura promovida por PSOE, Ciudadanos y Podemos le arrebató el poder. A pesar de ello, esta situación ha servido para ver una imagen de unión entre PP y PSOE nada habitual.

Y es que el actual teniente de alcalde de Planificación Urbanística, Huerta y Medio Ambiente, Antonio Navarro (PP), compareció en una rueda de prensa acompañado de Andrés Guerrero, que ocupó ese mismo cargo durante la etapa de Gobierno socialista. Ambos ediles apuntaron que no tenían constancia de que las discotecas estaban abiertas, calificaron lo sucedido como "una tragedia sin precedentes" y señalaron que "el único responsable es la empresa que, a pesar de las comunicaciones efectuadas en el sentido de cerrar los locales, hizo caso omiso de ellos".