El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo ya anunció que usaría todos los instrumentos del Estado de derecho a su alcance para frenar las posibles cesiones de Pedro Sánchez al independentismo para asegurar su investidura y eso pasaba por hacer valer, entre otras cosas, la mayoría absoluta de los populares en el Senado así como su enorme poder autonómico con el gobierno de 12 Comunidades además de las ciudades de Ceuta y Melilla.
De hecho, este jueves confluirán en la Cámara Alta esos barones populares, convocados a la comisión general de Comunidades Autónomas, "en defensa propia", esto es, "en rechazo del Estado asimétrico", según explican fuentes de Génova. Sin embargo, no está previsto que acuda el líder del PP a la Cámara en la que ocupó un escaño. Génova no quiere que esta cita se interprete como un acto de partido sino de índole territorial, esto es, por presidentes "que temen que Sánchez trate a Cataluña de manera privilegiada y en detrimento de los ciudadanos de cada uno de sus territorios".
La gran sorpresa ha saltado a media mañana cuando el presidente de la Generalitat catalana, Pere Aragonès, ha anunciado su presencia, de modo que la ley de Amnistía centrará la cita cuando esa no era la intención inicial de los populares. En su caso querían centrarse más en las cesiones económicas que pueda hacer a Cataluña para conseguir el apoyo de los catorce diputados de ERC y de Junts. Las reivindicaciones en materia de financiación autonómica y fiscalidad las han formulado especialmente los de Oriol Junqueras, dado que están al frente de la Generalitat, y parece uno de los grandes escollos con Moncloa a decir de los republicanos independentistas.
El PP alienta la sospecha de que el PSOE puede dar un trato de favor a Cataluña como pago por la investidura
Desde el PP se alienta la sospecha de que, una vez más, el PSOE puede dar un trato de favor a Cataluña, como denuncian respecto al actual modelo de financiación autonómica, cerrado en su momento, entre José Luis Rodríguez Zapatero y Artur Mas, aunque los independentistas acabaron renegando pronto de mismo. De ahí que en Génova hablen de "defensa propia" del resto de los territorios, aunque sólo acudirán los presidentes del Partido Popular, mientras que el canario, Fernando Clavijo, que gobierna en coalición con el partido de Feijóo, mandará a su vicepresidenta.
Los socialistas Emiliano García Page, Adrián Barbón y María Chivite han declinado acudir "para no hacer el juego al PP". Tampoco irá el vasco Íñigo Urkullu ni nadie en representación del Gobierno.
En el PP explican que éste "no es un acto de oposición a Sánchez sino que se debatirá sobre si las necesidades de Sánchez para ser investido implican asimetría entre los territorios", lo que viene a ser lo mismo. Se trata de dilucidar, agregan las fuentes consultadas, "cuánto vamos a pagar en términos de dignidad y de dinero" para que el inquilino de la Moncloa vuelva a ser reelegido jefe del Ejecutivo.
En ausencia de Feijóo y con intervenciones de unos diez minutos de duración, cada presidente hablará de las necesidades de su región y del riesgo de que Sánchez desestime las mismas "para asegurar su investidura. Que no lo pague con el dinero de los demás", insisten respecto al que será el mensaje central de la cita.
Cabe recordar que la Generalitat ha puesto ya una cifra a sus necesidades económicas, empezando por déficit fiscal, esto es la diferencia entre lo que aporta cada región y lo que recibe del Estado, que sólo de los años 2020 y 2021 se eleva, según sus cálculos, a 32.000 millones de euros, todo ello sin contar con que está pendiente un nuevo modelo de financiación autonómica dado que el actual caducó hace nueve años. La renovación de este modelo es una necesidad para muchas Comunidades.
Los independentistas ya han puesto precio a su apoyo: 450.000 millones
Pero Junts fue aún más lejos al estimar en 450.000 millones la deuda histórica con Cataluña, insistiendo además en una Hacienda propia, vieja reivindicación del nacionalismo. Y ya de paso, ha puesto sobre la mesa la condonación de la deuda del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA). Y en el PP no dudan en que Sánchez cederá en alguno de estas cuestiones "creando agravios comparativos entre las regiones". Un frente más, el económico que no es un tema menor en la carta de exigencias presentada, principalmente, por ERC.
Precisamente ayer, Feijóo reclamó a las comunidades gobernadas por su partido primar las políticas sociales y atender "desafíos" pendientes en materia de dependencia, la enfermedad de ELA o la soledad no deseada frente a la agenda del socialista Pedro Sánchez y los independentistas, informa Europa Press. Así se expresó en una reunión interna con los consejeros de Política Social, junto a la vicesecretaria de Políticas Sociales y Reto Demográfico de la formación, Carmen Fúnez, celebrada ayer tarde en la sede nacional del PP.
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