Hace unos años, cuando Isabel Díaz Ayuso convocó elecciones por sorpresa tras la moción de censura de Murcia, la líder de Más Madrid, Mónica García (16 de enero de 1974), aún era una desconocida para la mayoría de la población. Llevaba años como diputada en la Asamblea de Madrid, primero de la mano de Podemos y, más tarde, con Más Madrid. Pero pronto su bandera de "médica y madre" caló durante la campaña electoral y, tras arrebatar el segundo puesto al PSOE, se convirtió en la principal oposición de la presidenta de la Comunidad de Madrid y en una de las caras más conocidas de la política madrileña. Ahora, la anestesista da el salto a la política nacional y se hace con la cartera de Sanidad, hasta ahora en manos del PSOE.
Ya desde pequeña vivió de cerca la política y la medicina. Su padre, Sergio García Reyes, fue psiquiatra y diputado del Partido Comunista en la Asamblea de Madrid entre 1983 y 1987. Los mismos pasos siguió su hija que, tras formarse en un colegio de El Viso, uno de los barrios más exclusivos de la capital, estudió Medicina y Cirugía en la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y se especializó en Anestesiología y Reanimación en el Hospital 12 de Octubre, donde ha trabajado desde entonces compatibilizándolo con la política.
Formó parte de Marea Blanca desde sus inicios
Comenzó a coquetear con la política a través de Marea Blanca, el movimiento social en defensa de la sanidad pública que nació con fuerza a finales de 2012 en contra de los recortes en sanidad y que lleva 11 años criticando la "privatización" de la sanidad pública madrileña.
Ya por entonces Mónica García se alzó como una de las caras más visibles de las manifestaciones, ejerció un papel activo como portavoz de la Asociación de Facultativos Especialistas de Madrid (AFEM), apareció en distintos medios de comunicación e incluso fue la cabecilla de aquellos bailes a las puertas del hospital que hacían moverse de manera sincronizada a los sanitarios en las protestas contra la privatización de la sanidad impulsadas por el PP en el año 2012.
Una década después, García sigue acudiendo a las manifestaciones de Marea Blanca, como ha hecho estos últimos meses en contra de Ayuso tras el acuerdo de la presidenta con los médicos de Atención Primaria.
Mónica García, atiende a los medios de comunicación durante una marcha por la sanidad pública a 17 de diciembre de 2022, en Madrid (España)
Precisamente la sanidad ha sido siempre una de sus mayores reivindicaciones desde que entró en política y su perfil sanitario uno de los puntos fuertes de su candidatura. A la Asamblea de Madrid llegó de la mano de Podemos en 2015, pero 4 años más tarde, cuando Iñigo Errejón y Manuela Carmena fundaron Más Madrid, García se sumó a sus filas y mantuvo su escaño en la Asamblea.
Líder de la oposición
Durante la pandemia, Ayuso no solo se encontró con la oposición, si no con una sanitaria que veía de cerca, día a día, el colapso de los hospitales y la cara más oscura de la pandemia. Realmente la oposición del PP estaba a cargo del PSOE, que era la segunda fuerza en la cámara, pero un Ángel Gabilondo apagado que poco confrontaba contra Ayuso, frente a una Mónica García agresiva y reivindicativa dio a pie a que, poco a poco, los socialistas pasaran a estar en la sombra y fuera Más Madrid quien comenzara a liderar la oposición.
"Médica y madre" de tres hijos
"Médica y madre". Así es como se define continuamente Mónica García y así es como se presentó a los comicios de 2021. Una de sus bazas electorales que ha repetido una y otra vez, y que el periodista Federico Jiménez Losantos ha utilizado para ridiculizar a García como "mema", un acrónimo de "médica y madre".
La política, casada con Enrique Montañés García, vicepresidente senior de la multinacional CHEP dedicada a las cadenas de suministro para el sur de Europa, con el que tiene tres hijos, publicó su primer libro, Política sin Anestesia, en 2022. Ahí narra su vida entre el quirófano y la Asamblea de Madrid. La dirigente compatibilizó ambos trabajos y se mantuvo como médico a tiempo completo durante su primera etapa política, como diputada del partido. Cuando dio el salto y fue elegida portavoz de la formación madrileña pasó a estar media jornada en el hospital, al que solo acudía algunos días de la semana.
Rechazó la "testosterona" de Pablo Iglesias
El martes 16 de marzo de 2021, la anestesióloga publicó un vídeo en su cuenta de Twitter en el que rechazaba el ofrecimiento de Podemos de concurrir en conjunto a los comicios de mayo. "Las mujeres estamos cansadas de hacer el trabajo sucio para que en los momentos históricos nos pidan que nos apartemos", le espetó a Pablo Iglesias. Madrid no es una serie de Netflix, advirtió, que necesitase "más frivolidad ni más espectáculo ni más testosterona" y anuncio que Más Madrid concurriría en solitario en las elecciones autonómicas.
Fue entonces, en 2021, con unas elecciones anticipadas por Ayuso que nadie esperaba tras la moción de censura de Murcia, cuando el nombre de García empezó a sonar aún más en el panorama político. García se presentó como portavoz y candidata de Más Madrid, y triunfó. Pese a que igualó al PSOE en diputados -24-, consiguió más votos, se consolidó como la segunda vencedora de la noche y como una alternativa de izquierdas tras perder los socialistas 12 escaños.
Los rifirrafes con Ayuso
Desde entonces, sus choques con Ayuso son casi semanales. Entre ellas siempre hay tensión. Mientras Ayuso define a García como "la reina de los bulos", dice de ella que" "viene de Podemos", y que por eso "sabe bien el sistema criminal que hay tras las drogas", García echa en cara a la presidenta -como comentó en una entrevista a El Independiente-, que a "la señora Ayuso le importan un bledo los problemas de los madrileños y madrileñas".
Los rifirrafes no se quedan solo en las palabras, también ha habido gestos entre ellas. Uno que se hizo viral fue por parte de García a Ayuso el pasado octubre cuando la diputada de Más Madrid le hizo un gesto desde su escaño que se asemejaba al de una pistola. Más tarde lo desmintió García advirtiendo de que "estaba señalando", unido a su "artrosis del pulgar".
Polémica por el bono social de su marido
En varias ocasiones García se ha visto envuelta en ciertas polémicas que han azotado su reputación. Una de ellas se ha producido este mismo año en el mes de marzo. La diputada de Más Madrid pedía la dimisión del vicepresidente madrileño, Enrique Ossorio por ser beneficiario del bono social térmico. Poco después se supo que el marido de la propia Mónica García también accedió a esta ayuda. En ambos casos, el bono no supera los 195,82 euros asignados a los "consumidores vulnerables", frente a los 313,30 que se reserva para los "vulnerables severos".
Elecciones autonómicas de 2023
En las elecciones del 28-M, pese a los intentos de García de arrebatarle el puesto a Ayuso y hacerse con la Comunidad de Madrid, el PP logró la mayoría absoluta. Más Madrid se quedó a las puertas como segunda fuerza por delante del PSOE y Vox.
Rita Maestre, Mónica García e Iñigo Errejón, comparecen tras el seguimiento de la jornada electoral a 28 de mayo de 2023
Hasta entonces, la anestesista había compaginado su actividad política con el ejercicio profesional en el hospital madrileño, pero pidió una excedencia para centrarse en la campaña electoral.
Su relación con Yolanda Díaz y Sumar
Desde que Yolanda Díaz lanzara su plataforma Sumar, antes de que se convirtiera en un partido político, Mónica García se dejó ver en numerosas ocasiones con Díaz, acompañándola a diferentes actos para reivindicar el "tsunami feminista" como una nueva vía para hacer política. Es un perfil de confianza para Díaz y en las manifestaciones se les ha visto muy unidas. Ahora, García se proclama como una de las ministras imprescindibles de Díaz en una cartera que, desde la pandemia, ha cobrado especial importancia.
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