No ha habido sorpresa en Galicia, consolidada como fortín popular a día de hoy. El PPdeG ha conseguido su quinta mayoría absoluta de manera consecutiva -la primera sin Alberto Núñez Feijóo como cabeza de cartel-, pese al ascenso considerable del Bloque Nacionalista Gallego (BNG) de Ana Pontón, incapaz de dar la puntada necesaria para tejer una alternativa sólida con la que hacerse con la Xunta. Especialmente por el resultado crítico del PSdeG, que ha tocado suelo histórico electoral. El aterrizaje de José Ramón Gómez Besteiro en la región, desde el Congreso de los Diputados como representante por Lugo, no ha surtido efecto en unas siglas sin fuelle desde la etapa de Emilio Pérez Touriño.

Sobre el escrutinio, el PPdeG ha bajado su representación de escaños, pero Rueda supera la primera candidatura de Feijóo, con 38, en 2009, la que le llevó a la Xunta inicialmente con la mayoría absoluta mínimamente requerida. Concretamente, el barón popular y presidente en funciones, consigue 40 (47,36%) de los 42 diputados que tenía en el Parlamento de Galicia hasta el adelanto de comicios. Los populares han conseguido mantener la fidelidad del voto pese a que han experimentado un porcentaje pequeño de desgaste. Pero en ningún caso se ha producido un trasvase de votos. Ni si quiera el aumento de la participación ha influido en ello.

Sí se ha producido un claro desgaste en el PSdeG en favor del BNG. El Bloque ha experimentado la mayor subida electoral de su historia, en contraste con el máximo descalabro de los socialistas en la tierra, en esos mismos términos. Pontón ha pasado de 19 parlamentarios en 2020 a 25 (31,57%); un incremento de 7,6 puntos. Cinco de esos seis ganados, provienen de los socialistas y uno de los populares. La candidatura de Besteiro, frente a la de su antecesor, Gonzalo Caballero, ha descendido de 14 diputados regionales a 9 (14,04%).

Imposible ha sido el reto electoral para Sumar Galicia (1,9%), Vox (2,19%, con un 0,15% de crecimiento) y Podemos Galicia (se hunde al 0,26%, 3,68 puntos menos), que han quedado lejos de la barrera del 5% electoral. Los morados, con 3.845 papeletas a favor, han obtenido menos apoyo que candidaturas como PACMA, que ha sacado 5.373 votos. Al margen de la crecida nacionalista y la resistencia del PPdeG en la Xunta, la otra gran sorpresa de la noche la ha protagonizado Democracia Ourensana (DO). La marca del alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, tendrá un diputado autonómico con el 1,03% de los votos regionales; el 8,87% en la provincia.

El PPdeG dobla en votos a la izquierda

Pese a perder algo menos de medio punto de apoyo en las urnas, el PPdeG ha doblado en votos al Bloque y a los socialistas. Con el 100% escrutado, los populares logran 700.491 votos de los 627.762 de 2020. El BNG llega a los 467.074 (desde 311.340) y el PSdeG (desde 253.750) a los 207.691, sumando en conjunto 674.765 papeletas a la izquierda. La lectura es que el incremento de la participación ha beneficiado a Rueda.

Si se atiende a la suma completa de bloques ideológicos los 28.171 apoyos nóveles de Sumar Galicia y los de Podemos Galicia previamente mencionados, añaden 32.016 papeletas a nacionalistas y socialistas. Solo así se supera al PP, con 706.781 respaldos. Pese a ello, la caída del espacio que representan morados y magentas es considerable. Son 22.500 menos que en 2020. Pontón gana más de 155.700, las mismas pérdidas de PSdeG y el espacio a su izquierda.

Duro es el golpe para Yolanda Díaz y la implantación de su proyecto político que, en su tierra y siendo vicepresidenta del Gobierno, Vox le haya superado en votos con un candidato prácticamente anónimo. Más que Marta Lois, según la tanda de más de cuarenta encuestas que se han ido publicando hasta el lunes pasado. El partido de Santiago Abascal, con la candidatura de Álvaro Díaz-Mella, ha logrado 32.493 en total.

"Hoy para nosotros no es una noche fácil, los resultados no son los esperados, son malos sin paliativos", apuntó Lois en una comparecencia al término de la jornada. La candidata, en todo caso, lo achacó al recién estreno de las siglas. "Somos un proyecto de futuro, que tiene representación en el Congreso y vamos a seguir trabajando duro", dijo.

Besteiro mencionó anoche que ningún cambio "es fácil". "Nuestro cometido fue hacer entender la necesidad de un cambio pero no lo hemos conseguido. Por ahora", aseguró, previendo un nuevo intento en la próxima convocatoria. Desde Ferraz, la portavoz nacional de los socialistas, Esther Peña, transmitía con el escrutinio casi al 99% que la dirección "confía plenamente en Besteiro, que es el mejor líder para recuperar la confianza de la mayoría de los gallegos". "Vamos a trabajar durante los próximos cuatro años con el PSdeG para darle a los gallegos una alternativa", añadió. "No ha sido un buen resultado", reconoció, para después felicitar a Rueda por poder gobernar en solitario.

El BNG se refuerza en todas las provincias

Pontón ha arrebatado escaños a PPdeG y PSdeG en todas las provincias, especialmente en las dos grandes de Galicia. En el caso de A Coruña, el BNG se ha llevado 9 escaños de los 25 que se repartían. Dos más que hace cuatro años. Ha quitado uno a Rueda y otro a Besteiro allí. De los 22 que da Pontevedra, el Bloque ha pasado de 6 a 8, en este caso, ambos a costa del socialista [puede comprobarse en el siguiente gráfico interactivo, pinchando encima]. Pontón sube uno, a los 9, por Lugo a costa del PPdeG.

La entrada de DO y Pontón han adherido dos parlamentarios más del PSdeG en Ourense. El reparto es de los mismos 8 para el PPdeG, de 3 a 4 para el BNG y de 3 a 1 para el PSdeG para dar entrada a Jácome.

Pese al ligero retroceso popular, la euforia se ha colado en Génova, donde Feijóo sale airoso de una posible crisis interna. Más a tener en cuenta tras una semana complicada por sus declaraciones favorables a un indulto a Carles Puigdemont si se daban las condiciones necesarias, como el arrepentimiento.

No ha sido así en el seno del BNG. En Santiago de Compostela compareció Pontón para dar las gracias a militancia y simpatizantes. "Conseguisteis que hoy tengamos un resultado extraordinario, y que hoy el BNG sea el referente indiscutible como alternativa al PP". "Tuvimos un resultado que rompe con todos los techos electorales y nos sitúa como la esperanza de todas las personas que creen que Galicia necesita más", dijo Pontón, alentando a profundizar en el cambio ya producido. "Hoy es un antes y un después, ya nada va a volver a ser como antes", añadió. Pontón se hecha a la espalda al espacio progresista. "Hubo una enorme movilización y vamos a tener un grupo fuerte que va a dar la cara por la gente".