José Luis Ábalos se sentía solo dentro del PSOE desde que salió en 2021 del Ministerio de Transportes. La única persona que seguía a su lado era quien fue su sombra durante los últimos años, su asesor y amigo Koldo García. Ahora tanto este "último aizkolari" como el departamento que dirigió le traen por el camino de la amargura.

Ábalos dijo estar "estupefacto" al enterarse que su hombre de confianza había sido detenido por la Guardia Civil. Nada menos que en una operación anticorrupción que desgaja la gestión de la compra de material sanitario en los momentos más duros de la pandemia por parte de su Ministerio. Los agentes y la Fiscalía creen que Koldo era uno de los cabecillas de la trama que cobró comisiones por contratos que suman 53 millones de euros.

Nacido en Valencia, lo ha sido casi todo en el PSOE. Llegó a ser secretario de organización, la mano derecha del secretario general, la persona que conoce los entresijos del partido en cada provincia. Militante desde principios de los 80, tuvo una primera militancia en el Partido Comunista, breve, donde forjó una forma de entender la posesión de un carné político con una disciplina seria, fiel.

Familia humilde

De familia humilde, se sabe que su padre fue torero. Le apodaron Carbonerito, por el origen de su estirpe, de un municipio conquense de Carboneras de Guadazón. Antes de dedicarse a la política, el exministro pasó por varios trabajos para pagarse los estudios. El más conocido, y pintoresco, es el de llevar un negocio familiar de muñecas artesanales.

Una vez en política, también ha pasado por todos los niveles: secretario general de la agrupación socialista de Valencia, presidente del Comité Nacional del PSOE en esa comunidad, concejal del Ayuntamiento de la capital, pasó por la Diputación valenciana, diputado en el Congreso... Hasta llegar al Ministerio.

Un secretario de organización es alguien que se labra enemigos. Va de suyo. Es el encargador de poner y quitar, de crear las listas o de desterrar a quienes no son de su cuerda. Por eso no es de extrañar que en su Valencia natal hay quien se la tuviese jurada desde hace tiempo. Un caso conocido es el de su enemistad con Ximo Puig. Entre los dos pugnaron por el control del partido en el levante, y Ábalos perdió. No ha salido a la luz el grado de enfrentamiento entre ambos, pero para muestra un botón: durante el mandato de Puig, la Generalitatat reclamó a una ONG fundada por el ministro, Fiadelso, las ayudas millonarias que había recibido por no presentar sus cuentas durante años.

Ábalos dejó el último cargo que le quedaba, al margen del acta de diputado, este lunes. Presionado por su partido y por el Gobierno, renunció a la presidencia de la Comisión de Interior en el Congreso. El miércoles se reúne esta dependencia para hablar, entre otros puntos, de corrupción. El socialista se aferra como puede a su sillón en el Hemiciclo. El PSOE le dio a mediodía de ayer 24 horas para que renuncie a su acta. Esta por ver qué hara ante las amenazas de mandarle al Grupo Mixto.

Cinco hijos, tres mujeres

El socialista es muy celoso de su vida privada. Ha estado casado tres veces y tiene cinco hijos: dos con su primera mujer, un tercero con la segunda y dos más con la tercera. Quizás esta última sea la más conocida. Carolina Perles, 15 años menor que él, y policía municipal. Hasta septiembre de 2021 fue asesora en la Delegación del Gobierno en Madrid, según fuentes oficiales.

Según su declaración de bienes ante el Congreso, pasa unos 1.500 euros al mes por la manutención de sus hijos. Además tiene una vivienda en Valencia desde 1987 y un piso en Madrid, en La Latina, al 50% con su última mujer que compraron en 2010. Además cuenta con dos locales en la ciudad del Turia: uno desde 2003 al 50% y otro más que compró en 2022. En uno de ellos estuvo la sede de la mencionada fundación Fiadelso.

Sus cuentas, según lo que declaró al Congreso, recogen un plan de pensiones y otro de vida. Además, tiene deudas por valor de 140.000 euros de distintos préstamos hipotecarios. En los últimos años se ha comprado dos coches: un Range Rover de 2008, que compró en 2021, y un Volkswagen Tiguan de 2020, que adquirió en 2022.

Renunciar a la presidencia de la Comisión de Interior no le ha salido gratis. Ábalos dejará de ingresar 1.598,13 euros brutos extra al mes. Si se resiste a la dirección de su partido -el ultimátum vence a las 11 de la mañana de este miércoles- se embolsará 5.160,55 euros: 3.142,14 brutos, lo mínimo que cobran todos los diputados, a lo que hay que sumar 2.018,41 euros netos porque fue elegido por una provincia distinta a la de Madrid.