El estallido del "caso Koldo" y la ley de Amnistía se han convertido en un enorme problema para el Gobierno de Pedro Sánchez en la misma medida en que son una gran oportunidad para el PP de Alberto Núñez Feijóo. Tras el descalabro de los socialistas en Galicia el pasado 18-F, seguido de las incógnitas en torno a si saldrá adelante la ley de impunidad para Carles Puigdemont y, ahora, el supuesto caso de corrupción con epicentro en el Ministerio de Transportes, se ha organizado una especie de tormenta perfecta que los populares quieren aprovechar.
Igual que preparó un retiro de dos días en un cigarral de Toledo con su comité de dirección, los pasados 12 y 13 de enero, Génova tiene en mente convocar a todos sus presidentes autonómicos para coordinar estrategias ante un escenario político más que incierto. La cita, a falta de cerrar definitivamente la agenda, tendría lugar entre los días 8 y 9 de este mes en la ciudad de Córdoba. Uno de los asuntos a analizar será el de la posible duración de la legislatura con un Gobierno que consideran "en clara descomposición".
Además, la cita se producirá tan sólo un día después de cumplirse el plazo para que la comisión de Justicia del Congreso emita dictamen sobre la Ley de Amnistía, el jueves de la semana que viene. Para entonces debería conocerse ya si Gobierno y Junts han llegado a un acuerdo sobre las exigencias de Carles Puigdemont para blindarse contra la acción de los jueces. De esa cesión cuelga el futuro de la legislatura, pero la decisión del Supremo de aceptar la causa contra el prófugo de la Justicia para investigar sus presuntos vínculos con 'Tsunami Democràtic' -organización a la que que acusa de terrorismo-, no pinta bien para Sánchez y para sus socios. En todo caso desde Junts aseguran que daban por descontado que la Justicia iba a intentar torpedear la amnistía.
"Terreno abonado" para intentar debilitar al Gobierno
Esto, unido al 'caso Kold0' y a la traumática ruptura con quien lo fue todo en el equipo más estrecho de Sánchez, José Luis Ábalos, es, según los populares, "terreno abonado" para intentar debilitar al Gobierno, en uno de los peores momentos que se le recuerdan. No obstante, en la agenda territorial del PP también hay otros asuntos preferentes para los presidentes autonómicos, esto es, desde los problemas de la sequía, al levantamiento del campo, pasando por la financiación autonómica. Todo ello sin olvidar el frente común que los populares han hecho en materias como, por ejemplo, la promesa de instaurar una especie de examen único para el acceso a la Universidad.
La cita cordobesa excluye a aquellos presidentes regionales del partido que no gobiernan. La idea de esta iniciativa se le atribuye a la madrileña Isabel Díaz Ayuso, formulada antes de estallar un caso cuyos tentáculos llegan también al Ministerio del Interior de Fernando Grande-Marlaska y a los gobiernos autonómicos de Baleares y Canarias, gobernados por el PSOE cuando se declaró la emergencia del Covid y adquirieron mascarillas a la supuesta trama corrupta.
La idea de esta iniciativa se le atribuye a la madrileña Isabel Díaz Ayuso
Uno de los argumentos defensivos de los socialistas, esgrimido incluso por el presidente del Gobierno, es comparar dicha "organización criminal" -que comenzó a investigar la Fiscalía hace dos años en secreto y hace uno trasladó a la Audiencia Nacional-, con el caso del hermano de la presidenta autonómica madrileña, que proveyó de mascarillas a la Comunidad de Madrid. Este caso pasó hasta por la Fiscalía Europea, puesto que se pagó con fondos comunitarios, pero no vio causa. En todo caso, sí abrió una profunda crisis en el PP, saldada con la defenestración de Pablo Casado y la elección de Núñez Feijóo como nuevo presidente del PP.
Ayuso está muy beligerante con esta cuestión por la que ha recibido el apoyo cerrado de la dirección nacional del partido. Por ello es de prever que sea uno de los temas centrales que traten los barones populares en su "retiro espiritual", donde incluso estará vetada la entrada de teléfonos móviles a las reuniones.
El mismo día 9 se ha convocado en la Plaza de Cibeles de Madrid una concentración bajo el lema "Sobran los motivos, ¡Sánchez Dimisión!" que convocan las mismas organizaciones civiles que se han movilizado contra la amnistía. A la pregunta de si el PP mandará algún representante a ese acto, fuentes de Génova explican que "no se ha abordado aún esa decisión".
Tampoco los populares madrileños han decidido si la secundarán. En otras ocasiones sí se han sumado. Fue el caso de la manifestación más numerosa, el 18 de noviembre del pasado año, a la que acudieron Núñez Feijóo y Díaz Ayuso y el líder de Vox, Santiago Abascal. El lema fue entonces 'No en mi nombre: ni amnistía, ni autodeterminación. ¡Por la libertad, la unidad y la igualdad! La del próximo día 9 va más allá y pide directamente la dimisión de Sánchez, un paso que no se ha atrevido a dar Feijóo, quien, por ahora, ha exhortado al jefe del Ejecutivo a que, voluntariamente, explique si conocía irregularidades en el Ministerio de Transportes en la adquisición de las mascarillas y si por ese motivo cesó a Ábalos como ministro en julio de 2021.
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