Arrancó la sesión de control al Gobierno en el Congreso, la última ya antes del parón de Semana Santa, algo quizá más sosegada, más que la semana pasada. Si el Gobierno puede seguir adelante sin Presupuestos Generales del Estado, preguntaba Alberto Núñez Feijóo. El líder del PP daba pie al jefe del Ejecutivo a sacar pecho de la gestión económica de su Gabinete, e incluso de avanzar que 2023 se cerró en el 3,7% del PIB, dos décimas por debajo del objetivo previsto. Pero, en las réplicas, y en las siguientes preguntas, el hemiciclo volvió al punto que se dejó la semana pasada. La corrupción. La esposa de Pedro Sánchez, utilizada recurrentemente por el PP, e Isabel Díaz Ayuso, en la diana del Gobierno. Ninguno va a ceder su presa. Feijóo anticipa una investigación parlamentaria y, "si es necesario", judicial, sobre Begoña Gómez, mientras que el Ejecutivo pide cuentas por el presunto fraude fiscal cometido por la pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid.

Feijóo comenzó insistiendo al presidente que gobernar "no es vivir en la Moncloa". Tampoco lo es, le contestó Sánchez, vivir "en dos pisos valorados en más de dos millones de euros pagados en buena medida por el fraude fiscal a Hacienda". Era la referencia evidente a Ayuso y a su novio, Alberto González Amador.

Si vuelve a negarse a dar explicaciones y van tres veces que se las pido, habrá una investigación específica sobre los asuntos que le afectan a su entorno más inmediato. Parlamentaria, seguro, y judicial también si es necesario"

ALBERTO NÚÑEZ FEIJÓO, PRESIDENTE DEL PP

"Los españoles le vamos conociendo. Quiere aparentar estar tranquilo, pero está muy nervioso. Hace bien, tiene motivos. Por eso pone el ventilador a la desesperada y por eso le digo que los españoles necesitamos algo más, merecemos algo más y tendremos algo más", ironizó Feijóo en su segundo y último turno de este miércoles ante Sánchez. Pero "se equivoca", añadió, si cree que ha "resuelto las dudas de lo que ha pasado en su Gobierno y su partido", si cree haber dado "carpetazo" a lo que "ha pasado en su casa".

"Si vuelve a negarse a dar explicaciones y van tres veces que se las pido —le lanzó—, habrá una investigación específica sobre los asuntos que le afectan a su entorno más inmediato. Parlamentaria, seguro, y judicial también si es necesario". Era esta, por tanto, la amenaza más clara del líder del PP al jefe del Ejecutivo por su mujer, por Begoña Gómez. Los populares, por tanto, seguirán percutiendo a Sánchez por las relaciones de su esposa con el rescate de Air Europa. La Oficina de Conflicto de Intereses archivó la denuncia interpuesta la semana pasada por el PP, pero Génova ya señaló que emprendería una ofensiva parlamentaria por este asunto, sin descartar ir a los tribunales. Algo que Feijóo confirmó este miércoles en el Congreso en su duelo semanal con Sánchez. "Todo es mentira. Esta amnistía fraudulenta es mentira y su Gobierno, también", acabó.

"¡Qué paciencia hay que tener con ustedes!", exclamó de vuelta el líder socialista. Sánchez entonces presumió de que su Gobierno "colabora con la Justicia y asume responsabilidades", mientras que los populares han señalado a la Fiscalía, a la Agencia Tributaria y a los medios por el caso que rodea a la pareja de la presidenta madrileña. "Plante cara a la corrupción y exíjale la dimisión a la señora Ayuso", terminó. Justo eso fue lo que le dijo la semana pasada al líder del PP: que reclame la caída de la baronesa madrileña.

Lección aprendida

Las relaciones de Gómez con Air Europa salieron recurrentemente en las siguientes preguntas de los diputados del PP. Uno tras otro. El caso, según lo anunciado por Feijóo, será objeto de estudio en la comisión de investigación sobre corrupción que los populares impulsaron en el Senado, Cámara en la que disfrutan de mayoría absoluta. El pleno del Congreso, por su parte, aprueba mañana jueves la constitución de otra comisión de investigación, esta impulsada por los socialistas, sobre las contrataciones de material sanitario en plena pandemia, para indagar sobre el caso Koldo, aunque muy probablemente acabará desfilando por ella la propia Ayuso. La munición que ha encontrado el PSOE contra Feijóo es también otra información periodística: según avanzó ayer martes infoLibre, la Xunta presidida por el hoy líder del PP concedió al menos 114.000 euros en subvenciones a la empresa para la que trabajaba su pareja. Un asunto que agitó la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, en su cruce con la número dos de los populares, Cuca Gamarra.

Gobernar tampoco es vivir en "dos pisos valorados en más de dos millones de euros pagados en buena medida por el fraude fiscal a Hacienda"

PEDRO SÁNCHEZ, PRESIDENTE DEL GOBIERNO

El caso es que la sesión de control de este miércoles no parecía comenzar en el mismo barro de la semana pasada. Feijóo citó las palabras de Sánchez en 2019, cuando disolvió las Cortes y convocó elecciones generales porque no pudo sacar adelante los Presupuestos de ese año, porque se los tumbaron ERC y Junts. "Gobernar no es vivir en la Moncloa. Estamos de acuerdo en esto. Usted también. ¿Está hoy de acuerdo con la mayoría de españoles, conmigo y con usted mismo o ya ha cambiado de opinión?".

Sánchez, tras el rejonazo a Ayuso por disfrutar de esos dos pisos de "dos millones de euros pagados en buena medida por el fraude fiscal", defendió que gobernar es "tener capacidad de diálogo", apostar por el "crecimiento económico", la "extensión de derechos" y la convivencia. Ahí el presidente incidió en que España, como reconoció la semana pasada el comisario Paolo Gentiloni, está "en mejor forma" que la Unión Europea, ya que crece "cinco veces más que la media de la zona euro", tiene 21 millones de afiliados a la Seguridad Social, cuenta con una tasa de temporalidad del empleo del 16% o una de las inflaciones más bajas.

Y lo hace el Ejecutivo, sostuvo, con "responsabilidad fiscal". Fue en ese punto en el que Sánchez anunció que, gracias a ese comportamiento responsable y al "buen desempeño del país", España cerrará 2023 con un déficit del 3,7% del PIB, dos décimas menos de lo esperado, así que el Gobierno "cumple" con los objetivos que se había "marcado". "Eso es gobernar, y gobernar bien", concluyó.

Gobierno y PSOE han decidido responder a las acusaciones del PP

Presupuestos y gestión económica centraron el primer turno de la pregunta. Pero fue ya en su réplica donde Feijóo se reorientó hacia la corrupción. "No está de acuerdo consigo mismo", ironizó. Si se aplicara "la vara de medir" del Sánchez de 2018, entonces este le pediría al de 2024 que convocase elecciones porque no hay cuentas nuevas y le presentaría una moción de censura "porque está lleno de corrupción".

La corrupción es lo que seguirá anegando la política española en los próximos tres meses electorales. El PP quiere seguir disparando en esa dirección y el Gobierno y el PSOE tienen decidido que no se van a "callar" y que deben "responder". Tienen la lección "aprendida", como decían fuentes próximas al presidente. Lo que ocurrió en la pasada legislatura, cuando el PP tejió una estrategia de "desgaste" que no fue replicada por el PSOE, no se repetirá.