La ley de Amnistía afronta este jueves en el Pleno del Congreso su última votación parlamentaria, en la que se necesita mayoría absoluta (al menos 176 diputados) para levantar el veto del Senado. Si no hay sorpresas, la norma podría estar en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el viernes o el sábado para su entrada en vigor.

Su objetivo es amnistiar a todos los implicados en movilizaciones soberanistas e independentistas desde el 1 de noviembre de 2011 hasta el 13 de noviembre de 2023, y comprende a los condenados por la consulta del 9 de noviembre de 2014, a los del referéndum independentista de 2017, así como el archivo de las investigaciones abiertas por los disturbios posteriores contra la sentencia del Tribunal Supremo.

La proposición de ley fue registrada en solitario por el Grupo Socialista el 13 de noviembre del año pasado y, aunque formalmente se ha tramitado por el procedimiento de urgencia, no va a ver la luz hasta más de seis meses después.

Si no hay sorpresas de última hora, será la segunda ley que apruebe el Parlamento desde la llegada del Gobierno de Pedro Sánchez el pasado diciembre, además de la reforma constitucional para eliminar el término disminuido de la Carta Magna.