El último estudio del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), de este lunes, pone el broche, salvo sorpresa, a la última remesa de encuestas para las elecciones europeas del próximo domingo 9 de junio. El organismo que dirige José Félix Tezanos atribuye la victoria al PSOE de Teresa Ribera con entre 31,6 – 33,2 puntos. Por debajo, y en segunda posición, está el PP y su candidata Dolors Montserrat, con entre el 28,3 – 30,5%. Son 3 puntos de diferencia entre la atribución más baja de ambos y la más alta.
La tercera plaza la asumiría Vox (9,9 – 11,0%), seguido de Sumar (5,4 – 7,1%). Podemos queda a la mitad de los magentas (3,6 – 3,9%). La última media de encuestas privadas elaborada por El Independiente otorga la victoria a los populares, y deja a Ribera, con 20, a tres escaños de Montserrat.
La sorpresa de las europeas, según el CIS, sería Se Acabó la Fiesta, la agrupación de electores que lidera el agitador de ultraderecha y activista Alvise Pérez. La media de sondeos le otorga una media de 2,5 puntos. El CIS dobla la apuesta con una horquilla de entre 4,9 – 5,7%. Más que los morados de Irene Montero e incluso que la alianza a tres entre ERC, EH Bildu y BNG, Ahora Repúblicas (3,7 – 4,1%).
El estudio de Tezanos, que vuelve a despegarse del resto de sondeos en una nueva convocatoria electoral, aumentando la querencia de los socialistas entre uno y tres puntos aproximadamente y bajando entre dos y cuatro las del PP, deja a Junts (1,5 – 1,6%) y CEUS (1,0 – 1,3%) al borde de quedar fuera del Parlamento Europeo. Ciudadanos, con una estimación similar entre 0,7 – 1,2%, difícilmente conseguiría aguantar con un eurodiputado de los ocho que ha tenido en la legislatura.
Como acostumbra el ente, en su edición de encuestas previa al cierre del plazo legal de publicaciones oficiales como recoge la ley electoral, no ofrece escaños. Solo porcentajes. Sí los proporcionó en la previa al inicio de la campaña electoral. Y si se tiene en cuenta, se da un crecimiento exponencial generalizado. No se aporta una explicación determinada para ello. Ni es consecuencia de cambios en la abstención o entre los indecisos.
Si se miran los datos directos puede verse de dónde procede su potencial base: un 5% del PP, un 6,2% de Ciudadanos y un 18,2% de Vox. Casi dos de cada diez votantes en el caso de los de Santiago Abascal y Jorge Buxadé. Se confirma que el potencial votante de Alvise es conservador. Especialmente entre los sectores más extremistas. Pero, por otro lado, se mueve bien entre el público joven, los abstencionistas y entre los descontentos. Saca un 3,9% y un 4,5% de los que votaron en blanco y nulo. Un 8% de los que no votaron, que supone un millón de papeletas a su favor. Y uno de cada diez nuevos votantes, lo apoyará (11,2%).
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