El Pleno del Parlament abre hoy su XV legislatura con la reedición del bloque independentista integrado por Junts, ERC y la CUP. Un acuerdo que ha permitido imponer a Josep Rull, el candidato de Carles Puigdemont, como nuevo presidente de la cámara. Los socialistas ha perdido la primera votación de la legislatura y se tendrán que conformar con una de las dos vicepresidencias, pese a su victoria el pasado 12M, con 42 diputados frente a los 35 de Junts.

Rull ha sido escogido en segunda ronda por 59 votos, los de Junts, ERC y la CUP, frente a los 42 obtenidos por la socialista Sílvia Paneque, que solo ha obtenido el apoyo del PSC. En primera vuelta, republicanos y cuperos han votado en blanco, mientras PP, Vox y Comunes votaban a sus respectivos candidatos, y Aliança Catalana, el partido de Sílvia Orriols, escenificaba su independentismo de extrema derecha con un voto por Estat Català. Voto que ha sido contabilizado como nulo y ella misma se ha encargado de publicitarlo en redes.

La votación ha incluido los votos delegados de Puigdemont y Lluís Puig, pese a la sentencia del Tribunal Constitucional que hace una semana dictaminó que la delegación del voto de Puig durante la pasada legislatura es ilegal porque incumple el reglamento del Parlament. Tanto el PP como Vox han denunciado esta situación y anunciado que recurrirán el voto de ambos diputados de Junts ante el TC.

Pero el presidente de la Mesa de edad, el también miembro de Junts Agustí Colominas, ha impuesto su criterio para aceptar los votos. Lo ha hecho con el apoyo de la secretaria de ERC Mar Besses, frente a la oposició de Julia Calvet, de Vox. "La mesa de edad me otorga a mi la decisión", ha replicado Colominas a las quejas de Vox, al tiempo que rechazaba una reunión de la Junta de Portavoces porque "todavía no se ha constituido el Parlament" ni designado, por tanto, la nueva Junta.

Pacto frustrado de PSC e independentistas

Durante las últimas horas se ha especulado con un pacto entre socialistas e independentistas que permitiera a Esquerra hacerse con la presidencia de la cámara. Un pacto que habría contado también con el apoyo de los Comunes, garantizando una amplia mayoría en las tres votaciones para constituir la Mesa del Parlament. Pero durante la mañana de este lunes Junts ha lanzado su último órdago, advirtiendo que solo votarían a su candidato a la presidencia, Rull.

Un órdago que ha divido a los republicanos y conseguido que socialistas y comunes abandonaran el barco. "ERC tenía la presidencia del Parlament y prefieren renunciar e ir con Junts" lamentaba una fuente conocedora de las negociaciones. La decisión de los republicanos, de sumarse finalmente a la candidatura de Junts, ha dado al traste con la alianza tejida, que dejaba al PP fuera de la Mesa.

Los socialistas, aislados

Tras conocer la decisión de ERC, los Comunes se han negado a apoyar al candidato del PSC, alegando que "no podemos participar en ninguna ecuación en la que esté el PP", como sucedió en el Ayuntamiento de Barcelona. Motivo por el que han votado a su propia candidata, Susana Segovia. Para los morados, cualquier acuerdo en el que entren los populares "pone en riesgo la investidura" de Salvador Illa con un acuerdo tripartito de PSC, ERC y CatEC. "Nuestra prioridad no es la Mesa" concluyen.

Desde el PP, sin embargo, ya se había desmentido esa tesis. El presidente del PP catalán, Alejandro Fernández, denunciaba en redes la alianza de socialistas e independentistas que los expulsaba de la Mesa. Tras romperse ese acuerdo, el PSC se había quedado sin margen para tender puentes con los populares.

Tampoco ha habido alianza entre PP y Vox, que suman 26 escaños en la nueva cámara autonómica. Los populares han buscado el apoyo de Vox para asegurarse un puesto en la Mesa, en contra del bloque tejido por ERC y PSC, pero los de Ignacio Garriga se han negado a apoyar al candidato popular "gratis".

"Hay que ser realistas, no vamos a regalar los votos, no queremos que los sillones se los repartan unos y otros sean socialistas o populares" ha advertido Garriga, minutos antes del inicio del Pleno. El líder de Vox en Cataluña añadía, en este sentido, que su objetivo es que su grupo -el quinto de la cámara, con 11 diputados- "pueda tramitar proposiciones legislativas y por las últimas informaciones que tenemos no se ha levantado el cordón sanitario en esta cámara".