El PSOE se quedó este domingo a las puertas de su ansiada "remontada" de europeas con la que publicitar una victoria sobre el PP de Alberto Núñez Feijóo que le permitiera afrontar con mayor eficiencia y seguridad los próximos meses en Moncloa. Pedro Sánchez, con todo el equipo arriba, lanzó un tripe desde fuera del área, haciendo suyo, para darle la vuelta, el eje temático de su esposa, Begoña Gómez, y el señalamiento de "la corrupción", pero la bocina sonó antes de tiempo. Sobre ese pitido del final del partido emerge Sumar, en estado crítico tras la renuncia, aunque a medias, de Yolanda Díaz como coordinadora general. Seguirá como líder política y condicionando las políticas de Sumar en el Ejecutivo. Que, afectado por unos meses sin legislaciones aprobadas más allá de tres reales decretos, la amnistía y la nueva regulación del estatuto del artista, pide ponerse ya a gobernar en serio.

El foco de Sumar está puesto sobre cinco ejes en el que el primero, el esencial y que más preocupa al potencial de su votante, es la vivienda y la regulación de los alquileres temporales y turísticos. Y ese tema, que ha conllevado horas de conversaciones entre magentas y socialistas, será la principal demanda al PSOE de Sánchez. Así lo indican fuentes del partido, que, no obstante, son conscientes del poco margen parlamentario con el que cuentan para proceder a ello antes del parón veraniego. Sobre todo para resolver el rechazo de la aplicación por parte de las autonomías del PP de la Ley de Vivienda aprobada a principios del año pasado con los votos de ERC y EH Bildu.

Por un lado, no contarían con cupo para integrar rápidamente una medida propia que sirviera para meter presión al PSOE. Tampoco ven disposición en sus socios para cederles el turno. Por lo tanto, la vista ya se orienta en el horizonte a septiembre. Aunque sí son claros: puede haber un pronunciamiento político que impacte al votante, que les anticipe lo que el Gobierno medita hacer. También recurrir, como en otras ocasiones, al recurso del real decreto ley para que luego cualquier legislación pase por el Congreso de los Diputados.

Sumar pide al Gobierno movilizarse y hacer anuncios de futuras políticas de corte social que motiven al electorado progresista

La propia Yolanda Díaz dejó constancia de este propósito al mencionar, en la retrasmisión telemática de este lunes desde el Círculo de Bellas Artes en la que anunció su dimisión orgánica, que la vivienda era uno de sus cinco ejes a tener presentes en la legislatura. Se añaden la reducción de la jornada laboral, los permisos retribuidos y de cuidados, la reforma fiscal y proseguir en el tema palestino y la paz en Oriente Próximo. Fuentes de Sumar recuerdan, de hecho, el último pleno previo a las europeas, y que Sánchez se comprometió a primar la agenda "en dos semanas".

"Ya han pasado", le reprochan esos sectores del partido, que no ven que vaya haber nuevos comicios hasta las andaluzas de 2026. Ni de generales, ni siquiera en Cataluña tras una repetición al no alcanzarse una mayoría para presidir la Generalitat: "Illa será presidente pese que Junts dirija la Mesa del Parlament", determinan. Del mismo modo, que le afean que desde la primera carta de finales de abril, de cara a las catalanas, que requería tomar decisiones concretas, el PSOE se ha dedicado a denunciar "a la ultraderecha y el fango". Pero "solo eso". Demandan que esa oposición a las derechas, para evitar el devenir de aliados de izquierdas en Europa, como la portuguesa, sea mediante medidas efectivas que hagan ver a la gente que el Gobierno progresista es la mejor opción para ellos.

La advertencia que hacen a Sánchez es que, puede "salvar los muebles" aglutinando parte de su voto, el de Sumar. Pero, de cara al futuro, como ha pasado con Europa, ello "no te garantiza que repitas". "Es el momento de dejar de lado el tacticismo y primer las políticas. No hay excusas", alientan voces de Sumar.

El partido aleja una crisis de Gobierno

Sobre esta idea, de echar a rodar definitivamente, pilotó su intervención el portavoz parlamentario de Sumar, Íñigo Errejón, este martes desde el Congreso de los Diputados. Una declaración posterior a la reunión de la junta de portavoces de la Cámara en la que se descartó a priori para tomar el relevo de Díaz en Sumar en lo orgánico. De hecho, dejó en el aire que vaya a haber un relevo completo, al mencionar que ella es "el mayor activo electoral" del espacio a la izquierda del PSOE y que comparte con Podemos a nivel nacional.

Errejón lo hacía durante una valoración del varapalo electoral, que les ha dejado, con 811.545 votos, a algo menos de 11.000 de Se Acabó la Fiesta, la candidatura antipolítica del agitador ultraderechista Luis Pérez, más conocido como Alvise, y a menos de 240.000 de Podemos, su ex socio. Concretamente, exponía que por el "giro a la ultraderecha" de la sociedad europea y española, con el crecimiento de Vox y Alvise, era más necesario que nunca poner "en marcha este Gobierno". Así se compensaría "la balanza social". Y, especialmente, porque determinaba que la dimisión parcial de Díaz no afecta ni al partido, ni al grupo parlamentario ni al Ejecutivo. "Hay legislatura para rato", expresó.

"Esto sigue porque tenemos un mandato popular" y deben fomentarse "medidas que democraticen la vida". "A nosotros nos votaron para eso, y somos tremendamente responsables. Lo vamos a cumplir", recalcó el portavoz, quien dio su plácet a la decisión de Díaz de abandonar las funciones orgánicas para centrarse en lo que mejor se le da, las políticas. Por delante queda un largo proceso de reflexión que apunta prolongarse hasta finales de verano sobre qué quiere ser Sumar y qué rumbo debe tomar de la mano o no de sus actuales aliados.