"Los hechos objeto de investigación son todos los actos, conductas y comportamientos, que se han llevado a cabo por la investigada, desde que su esposo es Presidente del gobierno de España". El juez Juan Carlos Peinado acotaba así hace tres días los motivos por los que investiga a Begoña Gómez y por los que este viernes declara ante él como investigada.

La mujer de Pedro Sánchez está citada a las 10 de la mañana. Podrá entrar por el garaje, una medida excepcional adoptada por la decana de los jueces de Madrid por motivos de "seguridad", después de que la responsable de esta mareria en Moncloa haya expuesto sus argumentos para conseguirlo.

Begoña Gómez esperaba no tener que llegar al día 5 de julio con su causa entre las manos de Peinado. La Fiscalía Europea asumió parte de la investigación, y su defensa preguntó al magistrado con qué diligencias seguía. El juez le advirtió que estaba investigando otros hechos que "pudieran ser merecedores de ser investigados". La mujer de Pedro Sánchez está investigada por los delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios.

La investigación comenzó con la denuncia de Manos Limpias. En ella se incluían tres ramas de investigación: su relación con el CEO de Globalia, Javier Hidalgo, propietaria de Air Europa, las adjudicaciones y cartas de recomendación al empresario Juan Carlos Barrabés y su trabajo como codirectora de dos másteres en la Universidad Complutense.

Barrabés y las cartas

La principal línea de investigación del juez ha sido las dos cartas de recomendación que Begoña Gómez firmó en 2020 para una UTE participada por Juan Carlos Barrabés. Este las presentó a un concurso de Red.es, un ente dependiente entonces del Ministerio de Economía. El empresario terminó ganando los contratos por más de 10 millones de euros gracias a la valoración subjetivo del adjudicador.

Barrabés no era un empresario más. Fue el diseñador de uno de los másteres que dirigía Begoña Gómez, y participó en el lanzamiento de Wakalua, el hub de turismo lanzado por la matriz de Air Europa que patrocinó actividades de la primera dama. Esta parte de la investigación es la que se ha quedado la Fiscalía Europea, ya que los contratos contaban con fondos europeos.

El juez, sin embargo, quiere escudriñar toda la actividad de Barrabés desde que Pedro Sánchez llegó a Moncloa. Se centra también en otras seis adjudicaciones: cuatro del Ayuntamiento de Madrid, una del Consejo Superior de Deportes (CSD) y otra de Red.es sin fondos comunitarios.

Air Europa e Hidalgo

La relación de Begoña Gómez con Javier Hidalgo fue la primera piedra en las informaciones periodísticas. La mujer de Pedro Sánchez se reunió en varias ocasiones con el dueño de Air Europa mientras se fraguaba el rescate de la compañía por 475 millones de euros. Además, la aerolínea pactó presuntamente pagar 40.000 euros al año al Africa Center del Instituo Empresa que contrató a Gómez.

El juez ha pedido a la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que recabe toda la documentación a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) sobre el rescate a la compañía en plena pandemia.

El máster de Begoña Gómez

Este viernes también declra el rector de la Universidad Complutense de Madrid, Joaquín Goyache Goñi. El ente académico es donde Gómez imparte tiene su Máster de Transformación Social Competitiva. La clave de esta línea de investigación está en un software de sostenibilidad que Indra, Telefónica y Google crearon aparentemente gratis para el Máster.

Según publicó El Confidencial, el coste de esta aplicación ascendió a 150.000 euros, y las tres empresas lo desarrollaron gratis para Gómez. Además, La mujer de Sánchez terminó registrando la aplicación a su nombre, y tiene el 100% de una empresa que ofrece este software.

Pero hay más. El 29 de mayo, el juez Peinado admitió a trámite una nueva querella de Hazte Oír que había puesto "en conocimiento de este juzgado de nuevos hechos que pudieran ser merecedores de ser investigados". Apuntaban a una empresa, el Grupo Inmark, y a las adjudicaciones que recibió esta consultora. Aunque se ha publicado que Gómez es accionista de este Grupo, la UCO señaló en un informe que no había podido comprobarlo de "manera fehaciente hasta el momento". La organización ha pedido las cuentas de Begoña Gómez en España y en el extranjero y todos sus movimientos entre 2018 y 2024.