La exministra Dolores Delgado ha conseguido superar el trámite para volver a ser propuesta fiscal de Sala de Memoria Democrática, después de que el Consejo Fiscal haya considerado que no hay motivos de incompatibilidad para su nombramiento, que fue anulado hace unos meses por el Tribunal Supremo.
El alto tribunal ordenó dar marcha atrás para que el Consejo Fiscal valorase si existe incompatibilidad en el nombramiento de Delgado por la actividad profesional de su marido, el exjuez y abogado Baltasar Garzón, que dirige una Fundación centrada en la misma materia, derechos humanos y memoria democrática.
Y eso es lo que ha hecho este martes este órgano, que no ha visto razón de incompatibilidad y ha ratificado la propuesta del actual fiscal general, Álvaro García Ortiz, sucesor de Delgado, para situarla al frente de la Fiscalía de Sala de Derechos Humanos y Memoria Democrática.
La decisión del Consejo Fiscal, que tiene carácter vinculante, se ha adoptado por cinco votos a favor mientras que siete vocales no han ejercido su derecho al voto, según informa el ministerio público
Según informan a EFE fuentes fiscales, al iniciar la votación, los vocales de la AF han anunciado que necesitaban más documentación para adoptar una decisión, aunque otras fuentes explican que ya se les había mandado todo el expediente.
Tampoco ha votado Salvador Viada, vocal de la APIF que fue recusado por Dolores Delgado al ver falta de imparcialidad, junto con otros dos vocales de la AF.
Estas recusaciones no se han abordado porque el Supremo ordenó dar marcha atrás al 8 de junio de 2023, momento en el que el pleno del Consejo, "válidamente constituido" y sin ninguna recusación planteada "debatió la propuesta de nombramiento", según informa el ministerio público en un comunicado.
El alto tribunal ordenó que el Consejo Fiscal valorase si existe incompatibilidad en su designación como fiscal de Sala de Memoria por la actividad profesional de su marido, el exjuez y abogado Baltasar Garzón, que dirige una Fundación centrada en la misma materia: derechos humanos y memoria democrática.
Y eso es lo que ha hecho este martes este órgano, que ha considerado por esos cinco votos que no hay razón de incompatibilidad y ha ratificado la propuesta del actual fiscal general, Álvaro García Ortiz, sucesor de Delgado, para situarla al frente de la Fiscalía de Sala de Derechos Humanos y Memoria Democrática.
Ahora, García Ortiz propondrá la ratificación de su nombramiento para este cargo, indica el ministerio fiscal.
La sentencia del Supremo imponía también al Consejo Fiscal -explica el comunicado- que adoptase su decisión con agilidad y todas las garantías, al afectar al derecho fundamental de Dolores Delgado "a ser promovida en la Carrera Fiscal en condiciones de igualdad y con los requisitos establecidos por la ley".
Los magistrados aludieron al artículo 58.1 del Estatuto del Ministerio Fiscal, que establece que los fiscales no podrán ejercer sus cargos en una circunscripción en la que sus cónyuges o parejas estables "ejerzan una actividad industrial o mercantil que obstaculice el imparcial desempeño de su función, a juicio del Consejo Fiscal".
Aquella fue la segunda vez que el alto tribunal anulaba un ascenso de Delgado, que fue ministra de Justicia entre 2018 y 2020 y fiscal general entre 2020 y 2022. Antes, ya hizo lo mismo con su designación para la Fiscalía togada.
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