El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido este martes que el preacuerdo entre el PSC y ERC para la investidura de Salvador Illa es "bueno para Cataluña y para España" y ha subrayado que el texto recoge el compromiso con la "solidaridad interterritorial" y la "igualdad entre españoles".

En una rueda de prensa tras el despacho de verano con el rey Felipe VI en el Palacio de la Almudaina, en Palma de Mallorca, Sánchez ha calificado como una "extraordinaria noticia" este preacuerdo, que prevé un sistema de financiación "singular" para Cataluña, frente a las críticas del PP y de algunos líderes territoriales socialistas como Emiliano García-Page y Javier Lambán.

"El punto de vista que puedo trasladar, y así está recogido en el acuerdo, es el compromiso de la solidaridad interterritorial, el compromiso de la calidad y de la cohesión de los servicios públicos y, por tanto, de la igualdad entre españoles se viva donde se viva", ha añadido.

Sánchez ha expresado su "profundo respeto" y su "reconocimiento" a la labor que asegura que ha hecho ERC en la "normalización" y "avance de políticas sociales a nivel nacional y a nivel catalán", así como en la estabilización de la situación política en esta comunidad autónoma.

Y ha resaltado que ha encontrado en la formación republicana un "aliado" con el que ha compartido el objetivo de "superar toda la judicialización que se había vivido en Cataluña durante todos estos largos años" tras el procés.

Asimismo, ha dicho que los socialistas serán "absolutamente exquisitos" y "respetuosos" con la decisión que tome la militancia de ERC en la consulta sobre el preacuerdo prevista para el viernes, aunque ha manifestado su deseo de que lo refrenden.

"Eso significará que no hay una repetición electoral y que echa a andar la legislatura en Cataluña, porque hay muchas cosas que se tienen que abordar", ha declarado.

Sánchez ha recordado que la Ejecutiva Federal del PSOE ha respaldado en su reunión de este martes el preacuerdo, con apoyos por parte de todos sus integrantes y una abstención, y en la rueda de prensa ha defendido la singularidad de los territorios respecto a la financiación, poniendo como ejemplo el caso de Baleares.

"Lo que pido es que esa empatía, esa comprensión con la singularidad que tienen otros territorios, no esté reñida con ninguna cuestión que tenga que ver con la igualdad entre españoles, que desde luego está garantizada", ha insistido.

En este sentido, ha señalado que el nuevo sistema de financiación autonómica debe "reconocer esas singularidades" de las comunidades autónomas, aunque en ningún momento ha hablado directamente de conciertos económicos.

El presidente del Gobierno ha destacado que en el tiempo que lleva al frente del Ejecutivo las comunidades autónomas han recibido 300.000 millones de euros más que durante los siete años de Gobierno de Mariano Rajoy, y ha pedido que el PP no dé lecciones sobre igualdad entre españoles.

"Desde luego, yo no voy a aceptar ninguna lección de un partido político como el Partido Popular sobre igualdad entre españoles, sobre compromiso con el Estado del bienestar, que lo que hacen es precisamente recortar esos servicios públicos y abrir las puertas a la privatización tanto de la educación como de la sanidad en las comunidades autónomas que ellos gobiernan", ha declarado.