Emiliano García-Page, en una comparecencia institucional en el Palacio de Fuensalida, en Toledo, ha cargado contra el pacto que el PSC ha alcanzado con ERC, a través del cual Cataluña tendrá un concierto económico propio asimilable al régimen foral de Euskadi y Navarra. El presidente de la Junta de Castilla-La Mancha ha afirmado que esto "rebasa todos los límites".

"Siempre he defendido que ofrezcamos a los españoles esta hermosa flor, no sólo las espinas" ha dicho Page al inicio de su declaración, con una rosa en la mano. "Voy a fijar mi posición en torno a las declaraciones que escuché de ERC. No puedo hacerlo sobre ningún documento firmado por el PSOE porque no lo conozco. Veo simplemente borradores, un comunicado muy genérico que se lo puede llevar el viento de cualquier cambio de opinión pasado mañana".

Page, visiblemente enfadado, ha dicho que este planteamiento es el menos de izquierda "que ha visto", y ha señalado al PSOE: "El problema no está en ERC, sino en quien deja de lado sus convicciones. Yo y millones de personas no lo vamos a hacer". Al mismo tiempo, ha vuelto a defender que Salvador Illa es "lo mejor" que le puede pasar a Cataluña. "Estoy convencido de que con tiempo y tranquilidad desmontaría los montajes que ha hecho el independentismo, sería la mejor forma de desmontarlo por dentro". Sin embargo, ha pedido que esto no sea a costa del resto de España: "Hay que hacer posible la investidura del PSC sin que el coste lo tenga que pagar el resto, y particularmente el PSOE, al que no se le podrá obligar a defender lo indefendible".

Page ha incluido este pacto con los republicanos dentro "de una serie continuada de la misma política", tras los indultos, la reforma del Código Penal para rebajar las penas de malversación, y la ley de Amnistía. "Siendo grave todo lo anterior, esto rebasa todos los límites, porque afecta a la vida práctica y real de la gente, al bolsillo de los españoles. La riqueza nacional es de todos. La izquierda siempre ha defendido que tienen que pagar los que más tienen, ¿por qué vamos a abrir la puerta a que una comunidad pueda solicitar recibir lo mismo que aporto?" se ha preguntado el presidente de Castilla-La Mancha.

Page ha recalcado que, además, el pacto esconde un tono "xenófobo y despreciativo" hacia el resto de españoles. "Es bochornoso, es un planteamiento grosero. Estoy convencido de que mi partido no va a acabar representando esto. No podemos ser los que paguemos otra investidura".