El presidente de Canarias, Fernando Clavijo solicitará este viernes al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la reunión agendada en la Dirección Insular de La Administración General del Estado de La Palma, que fomente lo antes medidas que rebajen la presión migratoria en las islas, como viene defendiendo estas jornadas. Especialmente, de cara a este inicio de curso político, en el que fuentes regionales estiman que habrá un implemento de llegadas irregulares de cayucos, como sucedió en el tercer trimestre del año pasado. Para ello, abogará por que Moncloa apueste por una respuesta coordinada con todos los actores necesarios para legislar acciones y ponerlas en marcha de inmediato. Estos son, las comunidades autónomas, destino último de recepción de los migrantes. Sobre todo de los menores no acompañados. Pero también el PP, de quien el Gobierno depende para tener mayorías que habiliten la actuación. Así lo trasladan fuentes conocedoras.

Para el líder canario, el mecanismo ideal para afrontar temporalmente esta crisis, como destacó este miércoles en declaraciones a los medios, sigue siendo la reforma del artículo 35 de la Ley de Extranjería. Pero, para acelerarlo, considera que debe hacerse no por proposición de ley como en julio, sino por real decreto ley. El objetivo sigue siendo el mismo: que en lo relativo a los menores, al superarse el 150% de la capacidad de los centros de acogida, puedan producirse repartos obligatorios con destino a otras comunidades autónomas. "Seguimos manteniendo que, efectivamente, son menores y las comunidades tenemos una responsabilidad, pero son inmigrantes y el Estado tiene otra responsabilidad", dijo. Para esa reforma, el voto del PP es esencial y ya cotiza al alza para Moncloa.

En esa solicitud del real decreto insistirá Clavijo. Su aprobación en Consejo de Ministros permitiría empezar a trasladar a menores a otras comunidades, y daría margen mientras se actúa a las negociaciones. Son 30 días desde entonces para conseguir apoyos parlamentarios, someterlo a votación en el Congreso y que no decaiga. El temor de los socialistas es que, al cumplirse ese plazo, vuelva a decaer la ley. Lo que requiere, en definitiva, negociar.

Como detalló a mitad de semana, igualmente, "si todos queremos dar una respuesta, tenemos que buscar el consenso para que sea unánime". Y en esa idea insistirá hoy en el encuentro con Sánchez. Al margen de alentarlo para el diálogo, Clavijo sabe que el presidente es consciente de las demandas que vienen reclamando desde que se desató la crisis migratoria, de lo que necesitan. Por eso acude con optimismo para escuchar si el socialista acude con alguna propuesta. Más, antes de que Sánchez parta hacia Mauritania, Senegal y Gambia, puntos de partida de la ruta atlántica hacia Canarias de estos inmigrantes irregulares, en una gira para intentar contener las salidas hacia territorio español e incrementar la colaboración en cooperación con esos países. Algo que celebró el también dirigente de Coalición Canaria.

El diálogo con el PP se antoja esencial para Clavijo. No sólo para dotar de pluralidad el tratamiento de esta cuestión con otros actores, sino porque la mayor parte de las comunidades son ahora de signo popular [excepto Asturias, País Vasco, Cataluña, Castilla-La Mancha y Navarra]. El 'precio' que Génova ha puesto a Sánchez para sentarse a negociar y hacer probable el voto favorable a ese real decreto que pide el canario está sobre la mesa. Se registró a modo de proposición no de ley en el Congreso de los Diputados este martes, con un contenido similar a las exigencias populares lanzadas en julio para abordar el voto positivo a la reforma de Extranjería. Este es el documento íntegro presentado por el PP:

Proposición no de ley sobre inmigración - PPDescarga

Las principales líneas son el reforzamiento fronterizo, el incremento de los agentes, la actuación en origen, la petición de ayuda a la UE, la revisión de los acuerdos de cooperación, la dotación de un fondo de contingencia y la declaración de emergencia migratoria nacional. La financiación es clave para el PP.

Clavijo comparte algunas de ellas, como la necesidad de que exista una buena coordinación interministerial, también presente en el texto. Y mientras el canario viene insistiendo en la necesidad de medios para la atención o la escolarización de esos jóvenes, los populares mencionan en su antepenúltimo punto la reivindicación de recursos para abordar "desde su acogida hasta su emancipación". Aunque apuestan por desarrollar un modelo de migración "efectivo" que esté "vinculado al modelo de trabajo". La afinidad entre Clavijo y los populares, quienes son sus socios de coalición, ha quedado patente con conversaciones fluidas durante el último mes. Tanto a nivel nacional como regional, con el compromiso del PP de ayudar a Canarias, trasladan fuentes del partido, pero siempre y cuando el Gobierno, "quien es el que tiene las competencias", recalcan los populares, acepte sus demandas. De ahí el interés de Clavijo a animar a Sánchez a tener altura de miras.

Más desde el fracaso de la votación de reforma de la ley de Extranjería el 23 de julio, hace hoy exactamente un mes, cuando Clavijo se mostró muy crítico tanto con populares, cuyo rechazo le dejó "perplejo", como con el Ejecutivo, especialmente con su conciudadano, el canario, expresidente autonómico y actual ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres. A él le reprochó no haberse reunido con el PP para dar salida a la modificación de la norma. Para mayor inri, Torres apuntó hacia Clavijo, indicando que era él quien tenía que haber conseguido los apoyos del PP a una iniciativa registrada en conjunto con el PSOE, Sumar y Coalición Canaria. La demanda de presión al PP será otra de las claves del Gobierno a Clavijo, dada su asociación en las islas.

El PP pide una Conferencia de Presidentes

Clavijo ha querido dar cuenta de cierta afinidad con alguno de los barones populares, caso del gallego Alfonso Rueda y del castellano y leonés Alfonso Fernández Mañueco. En declaraciones públicas este miércoles, afirmó que ambos se han mostrado disponibles a ampliar sus cuotas de recepción de un global territorial de 400 menores migrantes pactada en la última reunión de la Conferencia Sectorial de Infancia y Adolescencia. Ahora bien, la Xunta desmintió ayer que hubiera habido tal conversación con Rueda y desde Castilla y León se recalcó la saturación de casi sus 200 plazas destinadas a la acogida. Un intento, quizá, de rebajar cualquier protagonismo frente a Génova. Ambas administraciones sí abogan por esa actuación consensuada de todas las comunidades a partir de una Conferencia de Presidentes. El asunto es más que probable que esté presente en la reunión.

La propia Génova lo demanda. La última en exigirlo fue Cuca Gamarra, su secretaria general, quien solicitó a Sánchez que hoy mismo la convoque para "dar una respuesta de Estado" a la presión migratoria y "poner freno a las avalanchas que se están viviendo un día tras otro". La crítica a Sánchez en esta materia, como el de la financiación, está capitalizando el periodo estival. Desde el PP se le ha afeado la tardanza en encontrarse con Clavijo, pese a estar pasando las vacaciones en La Mareta, en Lanzarote, y sí haber recibido allí a Salvador Illa tras su investidura como president de Cataluña. Creen que el secretario general de los socialista lo hace a "regañadientes". La última conferencia se produjo en marzo de 2022, y radicó en las ayudas al volcán de La Palma o la respuesta a las derivadas de la guerra en Ucrania.

Conversaciones paralizadas

Desde el fracaso de la reforma en la Cámara Baja, y potenciado por las vacaciones de verano, los contactos entre formaciones han quedado congeladas. Sin embargo, las llegadas no se han paralizado y se cuentan casi por centenares cada jornada. Según datos del Ministerio de Interior, se han multiplicado en un 126% la llegada de migrantes a las islas. Alcanza, como publicó El Independiente, en un 66% más en el caso de todo el Estado. En concreto, Canarias tiene en estos momentos tutelados a 5.500 menores. No solo duplica la sobrecarga de 150% que se plantea en la reforma de Extranjería. Sino que la duplica hasta alrededor de un 300%.

Desde principios de mes han sido unos 133 menores los que han llegado a tierra procedentes de la ruta atlántica, incrementando el total. Se estima que las cifras puedan alcanzar los 7.000 a final de año. Hay temor a que, a partir de septiembre, cuando el mar se relaja, ascienda la actividad de las mafias de tráfico de personas. De los 31.000 migrantes totales llegados a España, las cifras más maximalistas que se manejan es de hasta 80.000 personas. Hay que destacar, no obstante, que este verano se han reducido respecto al año pasado las migraciones. El grueso lo representan las protagonizadas a principios de año.