Con un marco de inviabilidad de negociaciones bilaterales en términos de financiación autonómica, e hilado al mensaje de independencia de los barones lanzado ayer por Génova, el presidente de Andalucía, Juanma Moreno, trasladó este viernes en Madrid, en la cumbre de presidentes populares celebrada en el Palacio de los Duques de Pastrana, que irá a ver a Pedro Sánchez por "respeto institucional". El dirigente andaluz se suma a su homólogo murciano, Fernando López Miras, el primero en comprometerse a ver al presidente del Gobierno tras años de espera para la exposición de asuntos diversos.

El compromiso llega, además, un día después de que Isabel Díaz Ayuso, la presidenta de la Comunidad de Madrid, caldeara la previa al cónclave pidiendo a sus compañeros que dieran un plantón general a Sánchez. Ello, ante previsiones de "sobornos" y de un "engaño" colectivo. Atrayéndoles a acuerdos bilaterales. Intenciones de las que hoy El Independiente da cuenta. Ofrecerá "singularidades para todos".

En detalle, y tras el compromiso general de no negociar individualmente con Sánchez cuestiones sobre financiación autonómica, Moreno Bonilla afirmó que "no vamos a aceptar la bilateralidad". "Vamos a actuar con responsabilidad, como siempre, y con respeto institucional", añadió, para matizar al segundo que eso "significa que vamos a hablar con todo el mundo y por supuesto con el presidente del Gobierno". Lo hizo, como Feijóo y el resto, en una ronda sin posibilidad de preguntas.

Con el plácet de Génova, Moreno Bonilla indicó que no entrará en "ninguna subasta ni vamos a blanquear al independentismo, como ha hecho Sánchez en sus últimas decisiones". De hecho, como pidió Feijóo, cualquier inicio de cauce para esta materia sigue siendo la Conferencia de Presidentes, que el andaluz exigió también. Un organismo máximo de colaboración entre administración central y las autonómicas que lleva desde marzo de 2022, tras la pandemia, sin citarse. Algo que incumple su reglamento, al superarse ya los dos años sin convocatorias.

Sin otro pronunciamiento claro, aunque con la mayoría de barones en la línea de Moreno Bonilla para dialogar y para atender la llamada institucional de un jefe de Gobierno, Ayuso guardó silencio al respecto. Aunque dio pinceladas de los posibles temas que le gustaría tratar con Sánchez: inmigración y movilidad en Cercanías. Insistió en su tesis, además. "Pretende que vayamos a verle engañados y a decirnos que nos va a dar dinero" cuando "no lo tiene", explicó Ayuso, quien rescató los peores momentos previos de la crisis económica de 2008 para implementar la atmósfera de tensión. Se congratuló, en cambio, de la "unidad" y el llamamiento a ir "todos a una" de Feijóo, en un amago de avalar la situación. Insistió a su vez en la Conferencia de Presidentes para comenzar a discutir conjuntamente sobre la financiación.