El eurodiputado y líder de Se Acabó La Fiesta (SALF), Alvise Pérez, se ha pronunciado en su canal de Telegram sobre la investigación de la Fiscalía en la que se estudia un delito de financiación ilegal durante la campaña de las elecciones europeas.

Alvise Pérez ha reiterado que cobró 100.000 euros de su exsocio, Álvaro Romillo Castillo, como "autónomo" en un supuesto acto de rebeldía contra los aranceles financieros a los que está sometido cualquier partido político si quiere presentarse a las elecciones. La ley limita en 50.000 euros las ayudas que una formación puede recibir de un particular, por eso, Alvise Pérez se enfrenta ahora a penas de prisión, incluso.

"Todo impuesto que podáis evitar no lo paguéis, que se acabe la fiesta", indicó en un vídeo publicado en su Telegram pasadas las 20.00 horas.

"Estoy aquí para confesarme ante las millones de personas que me léeis desde hace años. A los más de 800.000 españoles que me habéis votado y a los cientos de jueces, políticos, periodistas, medios y canales de televisión de este país. No necesito ningún juez. Soy culpable", presumió Alvise, que reivindicó haber recibido un pago sin factura como autónomo "que ha cobrado de un trabajo del que luego el Estado me saquea más de la mitad. Culpable de ejercer legítima defensa contra el terrorismo fiscal del Estado"

"Somos millones de trabajadores esclavizados a impuestos en este país y para los que a veces cobrar una actividad legal sin factura es la única salida. Ya es hora de decir que Hacienda es una mafia", destacó.

El presidente de SALF ha reconocido que aceptó "cobrar esos honorarios privados sin factura", aunque ha achacado el hecho al fin de conseguir su objetivo de no enriquecerse con la actividad política.

"Me llamarán corrupto por una factura sin IVA, pero ¿quién de ustedes no ha hecho concesiones, pequeños sacrificios de moral, para llegar donde está?" Y, sin reparo, ha llamado a sus seguidores a seguir el ejemplo: "Todo impuesto que podáis evitar pagar, no lo paguéis", concluyó.