Solo 41º Congreso Federal. Solo eso. Es la idea que la dirección de Ferraz había instilado en los territorios, varios de ellos ansiosos porque sus posteriores procesos de renovación interna se percibían más que brumosos y a cara de perro. Pedro Sánchez quería que el cónclave federal, programado para el 29 y 30 de noviembre y 1 de diciembre en Sevilla, concentrara todas las energías del partido, que se aparcaran todas las disputas regionales, las que realmente cobran más interés ahora por los relevos que se producirán en varias federaciones. Pero ya sabe que no será posible. El estallido de la guerra a campo abierto en el PSOE de Castilla y León, entre el actual secretario general, Luis Tudanca, y sus críticos, frustra el anhelo del presidente del Gobierno. Con el agravante de que allí el choque en primarias, que las dos partes consideran ya "inevitable", se librará entre dos facciones alineadas con Sánchez.

El paso de las últimas horas no ha hecho sino enconar las posiciones. Nadie quiere recular y no se vislumbra un retorno al consenso interno. Las costuras están más que tensas en una federación socialista mediana, de cerca de 10.000 militantes, y aunque ningún candidato ha dado formalmente el paso de postularse como candidato a barón autonómico —ni siquiera Tudanca lo ha hecho—, todo indica que se lanzará también a la arena un rival más cercano a Ferraz. No hay nombres aún, pero los críticos aseguran que habrá una alternativa "de consenso" y "mayoritaria". Las quinielas apuntan al senador por Valladolid Javier Izquierdo, secretario de Acción Electoral y Formación de la dirección federal; a la ministra de Igualdad, la también vallisoletana Ana Redondo, o incluso el alcalde de Soria, Carlos Martínez. Las cartas no están boca arriba.

Tudanca, para sus críticos, pretendía apretar al máximo con unas primarias exprés para blindarse internamente. En el equipo del líder regional reconocían que no querían "alfombra roja" para sus potenciales rivales

No pueden estarlo porque el proceso está interrumpido. El viernes, la comisión federal de ética y garantías (CFEG) decidió, tras un recurso interpuesto por la Secretaría de Organización que dirige Santos Cerdán, suspender las primarias exprés que había impulsado Tudanca y que había aprobado el día anterior el comité autonómico del PSOE de Castilla y León, por 105 votos a favor, 14 en contra y 11 abstenciones. La cúpula regional había programado, contra el criterio de Ferraz, que el proceso arrancase este mismo martes, 8 de octubre, con la presentación de precandidaturas. Si dos o más aspirantes lograban reunir los avales necesarios —el 6% del censo—, entonces se habrían batido en duelo en primera vuelta el 9 de noviembre, y en segunda ronda una semana más tarde en caso de ser necesario. El cónclave regional tendría lugar el 25 y 26 de enero en Palencia. Es decir, que la federación tendría elegido a su líder antes del 41º Congreso Federal de Sevilla. Tudanca, advertían sus críticos, pretendía apretar al máximo el calendario para blindarse internamente y asegurarse su reelección, dando muy poco tiempo a sus rivales para montar una alternativa. En su equipo reconocían el derecho a no ponerles "alfombra roja".

El máximo tribunal interno del PSOE determinó que tanto las primarias como los congresos autonómicos deben celebrarse siempre después de la cita federal. Desde el 2 de diciembre en adelante y en un plazo inferior a 90 días. Esgrime que no es válido el precedente de 2021 —entonces, Tudanca fue proclamado de nuevo jefe de los socialistas castellanoleoneses sin rivales en contra y un mes antes del cónclave federal, que se celebró en Valencia en octubre—, porque cada proceso congresual se rige por las normas vigentes. En todo caso, como también señalan a este diario desde el órgano de garantías, aquel proceso de 2021 no fue impugnado, y este sí, y eso es lo que cuenta.

La comisión de garantías rechaza que valga el precedente de 2021 y admite que los estatutos son interpretables, por lo que pide aclaración al 41º Congreso Federal

No obstante, la propia CFEG admite que los estatutos del PSOE no son claros y, por tanto, son interpretables, dado que únicamente se prescribe que los comités regionales han de convocar sus respectivos congresos, que "habrán de realizarse tras la celebración del congreso federal, en un plazo inferior a 90 días". Sin detallar, por tanto, si se refieren a todo el proceso congresual o solo el cónclave físico. "Es consejo y propuesta" de la comisión de garantías "al próximo congreso federal que esta cuestión quede aclarada en los próximos estatutos, para evitar confusiones". Tudanca, en un comunicado posterior, expresó que acataba, pero no compartía, la decisión de la CFEG.

La cuenta de los secretarios provinciales

El hecho es que las primarias en Castilla y León están paralizadas por completo. Pero no se ha acallado el fragor interno, que va a pesar como una losa en el 41º Congreso de Sevilla. La tensión en la federación se sumará a la ya existente en otros territorios en los que se da por segura la pugna por el liderazgo, como Aragón, Madrid, Cantabria o Extremadura. Con la duda de lo que ocurrirá en Andalucía, en la que su secretario regional, Juan Espadas, es cuestionado internamente pero sin que esté del todo claro si Ferraz impulsará una alternativa para intentar arrebatar al PP el que hasta 2018 era su feudo histórico y que Sánchez necesita para aspirar a mantenerse en la Moncloa.

Los jefes del partido en Zamora, Segovia y Palencia, como también el alcalde de León y el líder de las Juventudes, apoyan a Tudanca. Contra él están los secretarios de León y Valladolid

En el aparato de Ferraz dicen no sentir "ninguna preocupación" por el vuelo que coja el patente enfrentamiento en Castilla y León. Sin embargo, sobre el terreno, las acusaciones y reproches mutuos suben de tono. A Tudanca le arropan su núcleo duro —capitaneado por su secretaria de Organización, Ana Sánchez, y su vicesecretaria general, Virginia Barcones—, y también varios líderes provinciales del partido, como han manifestado públicamente los de Zamora, Antidio Fagúndez, y Segovia, José Luis Aceves, ambos diputados en el Congreso, y Palencia, Miriam Andrés, alcaldesa de la capital palentina. Le apoya asimismo el líder de las Juventudes de Castilla y León, el senador Fran Díaz. En su contra tiene al secretario provincial de León, Javier Alfonso Cendón —diputado en el Congreso—, y al de Valladolid, el ministro Óscar Puente, los dos territorios con más afiliados. El alcalde de León capital, José Antonio Diez, está con Tudanca y contra su jefe provincial, Cendón.

Esther Peña, jefa de los socialistas de Burgos, es una dirigente muy próxima a Tudanca —él procede también de esa provincia—, pero a la vez es portavoz de la cúpula de Sánchez. Eso explica la prudencia de sus declaraciones del sábado. Expresando su acatamiento a la decisión de la comisión de garantías pero a la vez mostrando su apoyo y afecto al barón autonómico. Peña aseguró que "toda" la militancia se rige bajo los mismos estatutos, "una normativa que es igual para todos" y que todos tienen que "acatar". Algo, recordó, que hizo Tudanca en su comunicado del viernes.

La líder del PSOE burgalés, Esther Peña, también portavoz de la ejecutiva de Sánchez, manifiesta su acatamiento a la decisión del 'tribunal interno', pero también elogia al barón autonómico

La dirigente rebajó el choque a "una divergencia en las fechas", a una "inexactitud que había en la organización de esos procesos congresuales", y una vez resuelto, "todo vuelve a su cauce". La portavoz elogió al secretario regional, "un hombre que se ha ganado la confianza, el respeto, el cariño de no solo la militancia de Burgos, sino de toda Castilla y León". Él, subrayó, ha sido la única persona capaz de ganar al PP las elecciones en la comunidad —fue en 2019, pero no pudo gobernar por la alianza de los populares con Ciudadanos— y cree que tiene mucho que aportar, por lo que "se ha ganado el derecho a decidir lo que él quiere hacer en el futuro". Quienes no se han manifestado en redes sociales o con declaraciones públicas son los secretarios provinciales de Salamanca y Soria, los diputados nacionales David Serrada y Luis Rey, y de Ávila, el senador Jesús Caro. Para los críticos con Tudanca, es sintomático su silencio. En la cúpula regional, sin embargo, cuentan a los tres como de los suyos, igual que la provincia de Burgos, con la única duda del posicionamiento de Rey en el caso en que el alcalde de Soria diese el paso de competir por el liderazgo autonómico del partido.

En el PSOE ha resonado con fuerza también el apoyo cerrado que el sábado prestaba a Tudanca la diputada por León Andrea Fernández, hasta enero pasado secretaria de Igualdad de la ejecutiva federal de Sánchez, momento en que fue relevada por la ministra Redondo. Ella pasó entonces a integrar la dirección regional como responsable de Educación. "Todo mi apoyo —expresaba a Tudanca en X, reproduciendo su comunicado del viernes—. Es inadmisible que la interpretación de una norma varíe según convenga. Es inadmisible que se use para imponer relato lo que en otras instancias se califica como 'máquinas del fango'. No queremos un PSOE al servicio de la cosa nostra castellano y leonesa".

El PP hurga en la herida

Sus palabras fueron cazadas al vuelo por el portavoz parlamentario del PP, Miguel Tellado, para subrayar que hasta dentro del PSOE hay quien señala que funciona una "mafia" dentro. "No me utilices para tu política basura", le contestó a continuación Fernández también desde su cuenta. "La mafia que señalo es precisamente la mediática que se sostiene y sostiene al PP en Castilla y León garantizando un statu quo corrupto". Y es que entre los tudanquistas cunde la impresión de que sus contrarios han aventado su erosión contando con la complicidad de medios conservadores controlados por el empresario José Luis Ulibarri, condenado a 19 meses de cárcel por la Audiencia Nacional por el caso Gürtel. "Las declaraciones de Andrea están fuera de lugar, ha provocado que el PP nos ataque", se quejan los alineados con Ferraz. Fernández no está en absoluto alineada con su secretario provincial, Javier Cendón.

Luis tiene la federación a piñón. Si fueran listos buscarían una salida, pero ya no la queremos. Así que a votar. Las cartas están boca arriba, han hecho una sinvergonzonería a nuestra militancia y a nuestro líder", sentencian en el equipo de Tudanca

Desde la cúpula regional, hacen valer su mayoría orgánica, la que se manifestó el jueves en la votación del comité autonómico por 105 votos a favor y solo en contra, y están convencidos de que sus críticos y Ferraz "han medido muy mal sus pasos" pues han victimizado a Tudanca y ha hecho que bases y cuadros "cierren filas con él". "Tiene la federación a piñón. Si fueran listos buscarían una salida, pero ya no la queremos. Así que a votar. Las cartas están boca arriba, han hecho una sinvergonzonería a nuestra militancia y a nuestro líder y lo van a resolver abarrotando las urnas", señalan fuentes muy próximas al barón autonómico, seguras de una futura victoria en primarias, dando por hecho que tendrá rival enfrente.

Los contrarios a Tudanca también calculan que la competición en las urnas es absolutamente "inevitable". Sostienen que esa votación de 105-14 del jueves no es significativa porque "la gente que estaba allí no sabía ni qué se votaba" —el barón autonómico no contó el calendario en su intervención a puerta abierta— y porque una cosa son los dirigentes y otra las bases. "Nadie controla a la militancia del PSOE. Esa forma de pensar es propia de otro tiempo. Y no se trata de poner a alguien más o menos cercano a Ferraz. No creo que haya habido ninguna ruptura. Simplemente Luis se ha quedado fuera de juego y pensaba que haciendo esta cacicada Ferraz no se iba atrever a pararle. Pero veremos, queda mucha tela por cortar", indica a este diario un dirigente regional de mucho peso opuesto a Tudanca y en total alineación con Sánchez.

Luis no puede presentarse una vez más. Ha tenido tres oportunidades, por las tres elecciones en las que ha sido candidato, y una moción de censura fracasada. Ya está bien", afirman los contrarios al barón

"Luis no puede presentarse una vez más. Salvo sus amigos, que no le dicen la realidad, ninguno en Castilla y León consideramos que tenga que seguir —reseña otro alto cargo provincial—. Ha tenido tres oportunidades, por las tres elecciones en las que ha sido candidato [las de 2015, las de 2019, que ganó pero tras las que no pudo gobernar, y las de 2022, en las que el PP continuó al frente de la Junta, esta vez con Vox, aunque el PSOE se quedó cerca]. Y tuvo una moción de censura [en marzo de 2021], que fracasó. Ya está bien. Es que su grupo se ha atrincherado y él es rehén de Ana [Sánchez] y Virginia [Barcones]".

Los críticos con Tudanca le echan en cara su "pucherazo" del comité autonómico y advierten de que esa reunión será como el funesto comité federal del 1 de octubre de 2016, en el que los barones lograron defenestrar a Sánchez, pero luego meses después, en mayo de 2017, la militancia le devolvió a su puesto de líder del partido, arrollando a Susana Díaz y Patxi López. "Tienen desesperación, han intentado acortar los plazos para impedir la concurrencia de candidatos, para matar la máxima de un militante, un voto, alumbraron un proceso sin garantías. Esto no puede convertirse en que cada uno se salte las normas. Ferraz ha actuado de manera acertada", continúa este mismo cargo provincial, para quien no sirve el precedente de 2021, porque España estaba aún en pospandemia, y eso hizo que la celebración de los procesos congresuales del PSOE se retrasaran.

¿Qué candidato "de consenso"?

El sector opuesto a Tudanca le reprocha que haya sido él el que haya hecho saltar por los aires la calma (tensa) que reinaba hasta ahora de cara al 41º Congreso de Sevilla. Defiende que, no obstante, cuando se abra el proceso regional, el líder regional tendrá enfrente una candidatura "de consenso" y "mayoritaria". Pero ninguno de sus representantes quiere adelantar nombres por una cuestión simple: estrategia. "No es el momento de destapar las cartas", se excusa un responsable muy cercano a Sánchez. El senador Javier Izquierdo, exdelegado del Gobierno en Castilla y León, fue el dirigente que, con Cendón, protestó airado en el comité autonómico del pasado jueves. Él era la voz de Ferraz, de Cerdán, y a quien muchos ven como posible candidato. Otra opción sería la ministra Ana Redondo, a quien los tudanquistas no ven "con ganas" de rivalizar con el líder autonómico. Y Carlos Martínez atesora sus 17 años como alcalde de Soria, con cuatro mayorías absolutas consecutivas, la última en mayo de 2023.

Los contrarios prometen una candidatura "mayoritaria". Los nombres que circulan son los del dirigente federal Javier Izquierdo, la ministra Ana Redondo o el alcalde de Soria, Carlos Martínez

"Aquí les esperamos, conocemos la región como la palma de nuestra mano", defienden "sin miedo" en el equipo de Tudanca. "Si hay primarias, esto hay que currárselo y hablar con la militancia —concede otro joven dirigente próximo al líder autonómico—, ya sabemos que esto de contar secretarios generales no sirve para ganar una votación por sí solo, igual que no sirve decir que Valladolid y León suman sin más [son las provincias, de largo, con más militantes, sobre todo la segunda] y aquí no hay nada más que hacer. Y Luis se ha pateado en 10 años la federación de arriba abajo y tiene un plus en ese sentido. Primero hay que salir de Sevilla, ver las claves del congreso federal y ya a partir de ese momento sabremos más". Los próximos a Tudanca son conscientes de que su debilidad son sus tres intentos fallidos de alcanzar la Junta de Castilla y León. "Izquierdo se estrellará si va contra Luis. Y Carlos decía hace escasamente un mes que no se planteaba concurrir", apunta una responsable provincial.

El secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez (c), junto al alcalde de Soria, Carlos Martínez (i), y la exdelegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, el 22 de octubre de 2022, en un acto público en Soria. | EUROPA PRESS / CONCHA ORTEGA OROZ

Otros dirigentes, no obstante, confían en que fructifique un acuerdo, "fundamentalmente porque una candidatura promovida por Ferraz tiene cero opciones y solo serviría para debilitar aún más al PSOE en Castilla y León". "Espero que se opte por una vía negociada", verbaliza uno de los rostros jóvenes que respalda a Tudanca. "Decir que Luis no tiene apoyos... Son una panda de inconscientes y muchos de ellos de inmaduros", remacha esta responsable.

Ferraz asegura no sentir "ninguna preocupación" por el proceso en Castilla y León. Pero ahora, repetía este domingo Enma López, vocal del comité organizador del 41º Congreso, "es el momento de las ideas"

La lucha ya parece imparable. Pero Ferraz insiste en su mensaje de que no es el momento de la disputa de los liderazgos regionales. Lo decía este domingo Enma López, miembro del comité organizador del 41º Congreso, portavoz adjunta del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Madrid y valor al alza en el partido: este es un asunto "perfectamente aclarado por el órgano al que le compete", la comisión federal de garantías. Ahora, dijo, es el "momento de las ideas" en el cónclave de Sevilla, y después "llegará el momento en que los militantes elijan a sus líderes territoriales". Pero ese plan se ha agrietado por una esquina importante, la de Castilla y León.