Vox da otro paso más en relación a sus históricos del partido y cesa de sus funciones al frente de la presidencia de la formación en Madrid a Rocío Monasterio. Son meses de rumores, desde marzo de este año, cuando el nombramiento de José Antonio Fúster como portavoz se leyó públicamente como un intento de promoción de su figura, totalmente desconocida para la opinión pública, en aras de hacer un relevo en el futuro. Ese gesto ha llegado este miércoles por la tarde con una nota de prensa en la que se refleja el movimiento por decisión del Comité Ejecutivo Nacional (CEN). Por el cambio de estatutos en abril de 2022, no es necesario someter el nombramiento en primarias. Los comités provinciales los designa el CEN.

Hasta el momento, Fúster ejercía de portavoz adjunto en la Asamblea de Madrid, como dos de Monasterio, que seguirá de diputada autonómica. Concurrió el 28 de mayo de 2023 como número ocho de la lista autonómica. Natural de Santander (1968), es muy próximo al ecosistema mediático de Vox, lo que primó a la hora de su designación para aunar mucho más lo trasladado por entes como Toro TV y La Gaceta de la Iberosfera. Los primeros pasos de Fúster transcurrieron en la Escuela de ABC y en los comienzos del periódico La Razón, donde fue jefe de Reportajes. Fue jefe de Opinión y Editoriales en La Gaceta, precisamente. También director de La Gaceta de los Negocios, anterior a la actual. Además es colaborador de medios como la televisión de Julio Ariza y de Trece.

En lo personal, destaca por su tono pausado que contrasta con la dureza de perfiles como Abascal o Garriga. Es aficionado al Atlético de Madrid. Además, ejerce como miembro Voluntario de la Orden de Malta. Se trata de una organización internacional con sede en Roma y de corte católico que se centra en la ayuda humanitaria y en la creación de centros médicos de cara a guerras o desastres naturales.

El ascenso de Fúster dentro del partido ha sido meteórico, pasando de un puesto discreto que en base a los trece parlamentarios desde 2021 a 2023 garantizaban su entrada. Desde entonces, poco a poco ha ido ganando peso. Hasta tal punto que ha sido el encargado protagonizar los debates parlamentarios en la Asamblea de Madrid más importantes en términos ideológicos para Vox. En su papel de portavoz adjunto. Estos son el rechazo a la amnistía a los líderes del procés, recurrido ya por el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso, pero también ante el debate para las modificaciones a las leyes LGTB y Trans de la Comunidad a propuesta del PP. Sin contemplar la derogación solicitada por Vox.

Se desconoce si el nuevo papel de Fúster se saldará con un relevo, igualmente, en sus funciones de portavoz nacional. La decisión puede haber sido tomada este lunes en la sede nacional de Bambú, tras la reunión de la dirección nacional con los representantes autonómicos en vista a la negociación de los presupuestos con el PP. Monasterio acudió a ella.