Podría parecer un detalle menor, pero ayuda a hacer una composición de lugar sobre cómo se gestó la trama que permitió a Soluciones de Gestión y Apoyo Empresas ganar 54 millones de euros en contratos de material sanitario, durante el primer estado de alarma, por un procedimiento de urgencia y sin negociación. Es decir, mediante concesiones a dedo. El último informe de la UCO sobre la ‘trama Koldo’ demuestra que fue Víctor de Aldama quien movilizó al otro gran presunto comisionista para poder conseguir estas licitaciones.

Así se lee en las anotaciones a pie de página de uno de los dosieres, en las que se explica lo sucedido de la siguiente forma: “MTM 180 Capital, S.L, a través de Victor De Aldama, tuvo conocimiento de que el Ministerio de Transportes necesitaba adquirir EPIS [equipos de protección individual] para sus entes dependientes, y que dicha contratación se iba a realizar por el trámite de emergencia (...). MTM 180 Capital, S.L no disponía de medios materiales y humanos y financiación suficientes para acometer el proyecto en solitario, y junto con Deluxe Fortune, S.L. contactó con Soluciones de Gestión y Apoyo a Empresas S.L. y con el Grupo Cueto para unir fuerzas en el proyecto.”

Las ofertas se articularon a través de Soluciones de Gestión, que fue la empresa que -según descubrió la Guardia Civil- realizó ingresos por valor de 6,6 millones de euros en las cuentas de MTM entre abril de 2020 y enero de 2021. Esta entidad está controlada por De Aldama.

Cuestiones fiscales

La Agencia Tributaria de Aragón ya señaló esta sociedad en un informe, dedicado a la trama de las mascarillas, en el que se señala a Víctor de Aldama y a Juan Carlos Cueto como los responsables últimos de toda la operativa que les permitió conseguir estos contratos multimillonarios. Los cuales, a través de De Aldama, según concluye la UCO, tenían una influencia fundamental en el Ministerio de Transportes, dirigido entonces por José Luis Ábalos.

No era la primera vez que los caminos de ambos empresarios se cruzaban, tal y como ha podido comprobar El Independiente a través de fuentes de la investigación. De hecho, la Fiscalía contra la Corrupción es consciente de que Cueto -relacionado con el Caso Defex, de presunta corrupción en África- y De Aldama ya habían tenido relación a través de la empresa Businesscity S.L., algo que sucedió ocho años antes de que optaran a los contratos de mascarillas.

Esta sociedad está actualmente domiciliada en la calle de Maura 7, de Madrid, y cuenta con De Aldama como administrador único. Su objeto social es "la compraventa e intermediación de toda clase de fincas rusticas y urbanas, la promoción y construcción sobre las mismas de toda clase de edificaciones".

Su gestor -hoy en prisión sin fianza- se movilizó pronto para conseguir las adjudicaciones de material sanitario y lo hizo en mitad de la tormenta perfecta que afectaba al mundo como consecuencia de la pandemia de covid-19. De hecho, la Guardia Civil tiene constancia de que ya el 26 de marzo había calculado “los costes propios de la operación logística, como son el transitario, la aduana o los vuelos”. También “los gastos que parecerían ir asociados a beneficios económicos de personas físicas y jurídicas”.

La auditoría de Óscar Puente

Otro documento que resulta muy ilustrativo al respecto del negocio de Soluciones de Gestión y Apoyo a Empresas es la auditoría que encargó el Ministerio de Óscar Puente el pasado marzo -difundida en agosto-, en la que se cuestionan los criterios de contratación que siguió en ese momento el departamento de Ábalos, ahora acechado por la justicia.

Ahí se revela que, el 20 de marzo de 2020, sin que estuviera lo suficientemente justificado y entre graves deficiencias, decidió duplicarse el pedido de mascarillas -de 4 a 8 millones- en tan sólo 38 minutos, en una decisión que habría avalado el propio José Luis Ábalos.

Como dato significativo, los autores de esa auditoría interrogaron al director financiero de Adif y le preguntaron acerca de la elección de Soluciones de Gestión y Apoyo a Empresas. ““Vi que (...) tenía un entramado que me ponía los pelos de punta. Vi el contrato de Angola [intereses en este país], no me gustó un pelo, era una empresa de chicha y nabo”, expresó. 

Pese a todo, y pese a que había hasta dos empresas más interesadas en alguno de los contratos, tal y como demuestra la auditoría, el ministerio de Ábalos eligió a la empresa hoy relacionada con la trama Koldo.

Cabe recordar que estos empresarios hicieron su agosto durante la peor fase de la covid-19. Soluciones de Gestión pasó de facturar 0 euros en 2019 a declarar 54 millones en 2020.