Instagram ha reabierto la cuenta de la periodista Cristina Fallarás tras haberla cerrado a última hora de esta mañana. La medida se adoptó después de que en su cuenta de Instagram se hubieran publicado nuevos testimonios anónimos de mujeres que denuncian abusos sexuales y tratos degradantes por parte de Íñigo Errejón, así como de otros políticos de otros partidos, tanto en activo como pasados.
La periodista había avisado a sus contactos para que se hicieran eco del cierre, destacando que se trataba de un cierre, no de una suspensión. La cuenta de la feminista es objeto de denuncias habituales para que la empresa Meta la bloquee, pero todo apunta a que no esa así en esta ocasión.
Nuevos mensajes sobre Errejón
"Me exigía enviarle fotos sexuales cuando él quería y me escribía instantáneamente si no le respondía", decía uno de los mensajes que había publicado la periodista. "Cuando iba a su casa tenía que seguir un protocolo muy estricto para que nadie se enterase de que había ido y me echaba justo después de tener relaciones sexuales. Era muy insistente en tener sexo sin condón y en realizar prácticas humillantes", continuaba.
Otro de los mensajes anónimos publicados y ahora no disponibles contaba lo siguiente: "Fue entorno al boom de podemos. Me atrajo su discurso de transformación. [...] La conversación que pensé que fuera a ser larga y reflexiva, compartiendo puntos de interés, se convirtió más bien en una charla escueta y directa al acto. Recuerdo que fue un sexo que yo no disfruté". Esta persona anónima también explicaba que, poco después de mantener relaciones sexuales con él, Errejón "busco la excusa" para que ella se fuera del hotel. "Al poco de haber compartido un momento íntimo con el, me vi yéndome del hotel".
Además de mensajes centrados en Errejón entre las denuncias que la periodista ha publicado hoy había mensajes apuntado a otros políticos de otros partidos políticos, sin precisar sus nombres.
Un mecanismo de comunicación de denuncia
Fallarás, que atendió a este periódico ayer en una entrevista, aseguró que en su buzón tenía más de mil mensajes de mujeres que todavía no ha podido procesar. La periodista utiliza el anonimato de las mujeres para animarlas a que cuenten sus experiencias de violencia sexual desde 2018. Su objetivo es crear un relato nuevo para que no se minimicen acciones de acoso a las mujeres.
"Tú no dices lo que te hace tu jefe desde tu propio perfil porque te echa, no dices lo que te hace tu marido, desde tu propio perfil, porque cuando llegas a casa te pega una paliza; y no dices como te violaba tu padre porque, seguramente, porque a tu madre no tienes por qué involucrarla", explica Fallarás. "Por eso cree que este mecanismo de comunicación, un mecanismo donde las mujeres pudieran relatar sin poner el nombre y lo único que hago yo es recibir el mensaje hago una captura de la pantalla y lo publico", añade.
Su mecanismo ha sido cerrado por Meta, la red social dice que no cumple con las normas comunitarias.
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hace 4 semanas
Es lo que tiene el monopolio de una red social. Deja de ser social cuando el contenido compromete el negocio.
Pura hipocresía, como el mundo actual
hace 4 semanas
Luego está la hipocondria, en la que crees que sufres los síntomas que lees o alguien te explica.
¿X le cierra la cuenta? Hay quien le cancelan con un único comentario. Basta con que un ejército de bots te denuncie. Sobre esto, las izquierdas saben mucho.