La DANA ha vuelto a azotar el litoral de España donde en esta ocasión una de las provincias más afectadas ha sido la de Málaga. Miles de desalojados, clases y transportes suspendidos, casas, comercios y calles inundadas y hasta una tromba marina son algunos efectos que mantiene en alerta roja (riesgo extremo) tanto a la provincia andaluza, con una descarga que no se conocía en 35 años, como a Valencia y Tarragona.

No ha habido de momento daños personales por estas nuevas lluvias torrenciales, que llegan 15 días después de la dramática DANA del 29 de octubre, que barrió sobre todo la provincia de Valencia y dejó más de 220 muertos.

Lluvia en la zona afectada, a 13 de noviembre de 2024, en Valencia, Comunidad Valenciana (España).
Lluvia en la zona afectada, a 13 de noviembre de 2024, en Valencia, Comunidad Valenciana (España). | EFE

Precisamente en Valencia, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) elevó la tarde de ayer a nivel rojo el aviso por lluvias en el litoral norte y sur de la provincia hasta el mediodía de este jueves, con acumulados que pueden llegar a 40 litros por metro cuadrado en una hora, 180 l/m2 en doce horas.

En los municipios más castigados por el anterior temporal han continuado las tareas de limpieza de lodo, aunque se suspendió la búsqueda por mar de desaparecidos y ahora se teme que la situación empeore con nuevas trombas de agua.

Justo en esas localidades, la población ha recibido un mensaje de Es-Alert en sus teléfonos en el que traslada las restricciones al tráfico de vehículos privados.

Llueve con fuerza también en el norte de la provincia de Castellón permanece en nivel naranja por precipitaciones que podrían dejar 60 litros en una hora y 150 en 12 horas hasta medianoche.

Pero la DANA se ha cebado de momento con Málaga y ha obligado a desalojar a unas 4.000 personas de zonas susceptibles de inundarse y se ha anegado el centro de la capital, convertido prácticamente en una balsa, en una jornada en la que las carreteras han estado prácticamente vacías, se han cerrado parques, recintos deportivos, museos y se han suspendido clases desde Infantil a la Universidad.

Pabellón deportivo Salvador Sánchez de Torre del Mar, en Vélez-Málaga, donde van a pasar la noche unas 750 personas que han sido desalojadas por el desbordamiento del río Vélez.
Pabellón deportivo Salvador Sánchez de Torre del Mar, en Vélez-Málaga, donde van a pasar la noche unas 750 personas que han sido desalojadas por el desbordamiento del río Vélez. | EFE/Enrique Bermúdez

Unas lluvias que han provocado además desbordamiento del río Benamargosa y el cierre de casi la totalidad de centros hospitalarios en las zonas más afectadas, salvo los puntos de urgencias, y la activación de planes de emergencia. 

Calles y viviendas inundadas, destrozos en una gasolinera, el cierre de centros sanitarios, una tromba marina que ha azotado la Costa del Sol sin causar daños personales y la activación de planes de emergencia en los hospitales son algunas de las incidencias que se han vivido en Málaga, con lluvias y granizo en algunos puntos de más de 100 litros por metro cuadrado en pocas horas.

También se ha suspendido de la actividad lectiva este jueves en todos los centros educativos de la provincia de Málaga y Huelva, así como los centros de las localidad de la Cuenca del Genil, la costa granadina y Nevada y Alpujarras. En Cádiz, permanecerán cerrados los centros de la campiña gaditana, así como el litoral y El Estrecho, así como varios municipios de la capital sevillana.

De acuerdo a los datos de la red Hidrosur, dependiente de la Junta de Andalucía, hasta las 17:00 horas se habían contabilizado 144,5 litros en Santón Pitar, situado en Los Montes de Málaga, y una cantidad similar (144,2 litros) en Alfarnatejo.

Además, en la capital malagueña se recogieron 140 litros, al igual que en otros puntos de la comarca de la Axarquía, y casi 120 litros en la localidad de Coín, perteneciente al Valle del Guadalhorce.

Aspecto que presenta el río Guadalmedina a su paso por Málaga este miércoles
Aspecto que presenta el río Guadalmedina a su paso por Málaga este miércoles | EFE

Ante esta situación, se han cancelado los viajes en tren -se ha suspendido por precaución el servicio de alta velocidad entre Madrid y Málaga, entre Antequera y Málaga, varios de media distancia y muchas líneas del Cercanías- y avión y varias carreteras se encuentran afectadas.

El presidente andaluz, Juanma Moreno, ha asegurado este miércoles que las actuaciones de la Junta ante la situación de emergencia provocada por la dana que está afectando hasta el momento a las provincias de Málaga y Granada se realizan con el objetivo de "prevenir" para poder "minimizar el impacto" de la misma. 

Asimismo ha pedido este miércoles a los ciudadanos que "aguanten" hasta que la segunda DANA finalice, para conseguir que la situación de emergencia pase sin que se registren víctimas mortales en la comunidad como hasta ahora, a pesar de las fuertes lluvias en la ciudad andaluza.

La situación es asimismo crítica en Tarragona, donde Protección Civil de la Generalitat catalana ha activado la alerta del Plan territorial de protección civil de Cataluña por fuerte oleaje, episodio que coincide con la alerta roja por lluvias intensas en el sur de la provincia.

Colas kilométricas en la AP-7 por las restricciones de movilidad y la suspensión de clases escolares en 439 centros que ha afectado a 128.864 alumnos han sido algunos de los efectos en Tarragona, donde también ha habido incidencias en el servicio ferroviario en líneas de Rodalies y Regionales.

El Govern catalán ha recomendado el teletrabajo y la mayoría de negocios no han abierto sus puertas, mientras el Departamento de Salud ha cancelado la actividad programada no urgente prevista para este miércoles.

Stadler Valencia: 400 empleados no pueden trabajar 

Stadler Valencia, con planta en Albuixech, tiene unos 400 empleados de la provincia de Valencia con imposibilidad de acudir a su puesto de trabajo y alrededor de 30 proveedores gravemente afectados por la dana que no han podido suministrar los componentes industriales.

El fabricante de locomotoras trabaja actualmente a un ritmo reducido y tiene que posponer entre 150.000 y 200.000 horas de producción de 2024 a 2025, debido a las interrupciones en las cadenas de suministro que han provocado que los vehículos no se puedan entregar según lo previsto, según informa la compañía en un comunicado.