Nada de lo que ha confesado Víctor de Aldama ante el juez es cierto, "todo es categóricamente falso". El presidente del Gobierno quiso ser rotundo este jueves tras las declaraciones del presunto cabecilla de la trama Koldo. No esperó demasiado para comparecer e intentar cortar de cuajo el vuelo de las explosivas declaraciones del empresario. Aprovechó el final del pleno del Congreso para explicarse ante los medios y negar radicalmente todo lo afirmado por Aldama, que ante el magistrado Ismael Moreno aseguró que entregó 250.000 euros al exministro José Luis Ábalos y otros 100.000 euros a su asesor Koldo García por el negocio de la compraventa de mascarillas. También que dio dinero a cargos socialistas, como al actual secretario de Organización del partido, Santos Cerdán, que lo ha negado también tajantemente. Y añadió que el propio Pedro Sánchez pidió conocerlo en un acto del PSOE en 2019. Tras concluir su declaración judicial, el expresidente del Zamora CF, en prisión provisional por el presunto fraude de los hidrocarburos, pidió salir de la cárcel por haber comenzado a colaborar con la Justicia.

Sánchez se dirigió a los medios al término del pleno y, tras congratularse de la aprobación de su reforma fiscal —ahora ya de camino al Senado—, tras unas dificilísimas negociaciones, y de la ratificación de Teresa Ribera como vicepresidenta europea, quiso hablar motu proprio de "la comparecencia de este personaje". De Aldama. Así lo definió. "Este Gobierno, mi Gobierno, es un Gobierno limpio que surgió de una moción de censura [en 2018] para acabar con la corrupción sistémica" del PP, se arrancó, recordando que precisamente ahora el Supremo ha confirmado la condena al partido de Alberto Núñez Feijóo como responsable civil por el pago en negro de la obra de la sede nacional de Génova.

Desde entonces, desde que llegó a la Moncloa, insistió el presidente, su máxima ha sido que cualquier "atisbo de corrupción" en el Ejecutivo sería "extirpado de raíz". "Y eso hemos hecho. A partir de ahí, las declaraciones de un presunto delincuente que está en prisión preventiva, que ha salido para testificar ante la Audiencia Nacional, me merece el crédito que tiene. Ninguno. Porque tendrá que ser el señor Aldama quien pruebe esas insinuaciones y esas acusaciones".

Si Aldama ha decidido desplegar una serie de acusaciones contra el Ejecutivo y contra el PSOE es para "desviar la atención, sembrar dudas y tapar" sus actividades presuntamente delictivas

Sánchez manifestó que en su partido están "tranquilos". "En lo que respecta a mi persona, en lo que respecta a mi Gobierno actual, en lo que respecta a mi organización, al PSOE, todo lo que ha dicho este señor es categóricamente falso. Y si ha demostrado algo es, precisamente, que su estrategia de defensa es la mentira", sentenció. Era importante el remarcado de Gobierno actual, para separarse de las actividades presuntamente delictivas que pudieron cometerse con Ábalos al frente de Transportes, donde anidó la trama encabezada por Aldama. A su juicio, si este ha decidido desplegar una serie de acusaciones contra el Ejecutivo y el PSOE es para "desviar la atención, sembrar dudas y tapar lo que aparentemente parecen unas ciertas actividades delictivas".

Aldama aseguró que el presidente quiso conocerlo para agradecerle en persona unas gestiones que estaba haciendo en México. Por según, según su versión, fue Sánchez el que quiso hacerse una foto con él —la que hace menos de un mes publicó en portada el diario El Mundo— durante el mitin que el PSOE hizo en el teatro La Latina, en la presentación de la candidatura de Pepu Hernández a la alcaldía de Madrid. "¡Menuda inventada! —exclamó Sánchez a los periodistas—. Poco menos que yo estaba esperando a que llegara este señor al mitin para poder hacer el mitin. Insisto, es la prueba de que la estrategia de defensa de este personaje es la mentira".

¿Fue él quien pidió hacerse la foto con Aldama en un mitin en 2019? "¡Menuda inventada! Poco menos que yo estaba esperando a que llegara este señor al mitin para poder hacer el mitin"

Feijóo, tras conocerse la declaración del empresario y presunto jefe de la trama, llamó a los socios del Gobierno a apoyarle en una hipotética moción de censura. Pero no dijo que él la fuera a presentar, sino que se abría a dar el paso si se lo pedían los grupos. Sánchez ironizó con el planteamiento del líder del PP: "Me hace mucha gracia porque cuando yo planteé la moción de censura [contra Mariano Rajoy] y salió adelante, el Partido Popular decía que era un instrumento inconstitucional. Por tanto, máximo respeto a que se puedan hacer mociones de censura porque entran dentro de nuestro ordenamiento constitucional" y "nada que opinar". Los grupos, recordó, son "libres" y "autónomos" para definir sus estrategias políticas.

Pero el presidente le recordó que en España las mociones de censura son "constructivas", y por tanto esta "incluso sería una buena oportunidad para que el señor Feijóo planteara una alternativa de gobierno que a día de hoy no se conoce". Como hiciera hace dos días en la rueda de prensa final tras la cumbre del G-20 en Río, Sánchez incidió que la "debilidad parlamentaria" se predica de las formaciones que "no son capaces de armar mayorías".

Reta a Feijóo a tener los arrestos de presentar una moción de censura contra él: la "debilidad parlamentaria" se predica, dice, de quienes no son "capaces de armar mayorías", y no es su caso

Y ese no es su caso: "Este Gobierno, un Gobierno de coalición progresista en minoría, desde hace seis años lo que está haciendo es construir sistemáticamente en todos los grandes debates, como por ejemplo el de la reforma fiscal [aprobada este jueves], mayorías parlamentarias". Retaba así a Feijóo a presentar una moción contra él, consciente de que a día de hoy su Ejecutivo, aunque en precario, aun con dificultades, tiene a los socios todavía a su lado.