Sánchez anuncia a las CCAA que abre en enero la negociación de la quita de la deuda y les propone blindar la vivienda pública

No hay apenas expectativas de grandes y profundos acuerdos, pero en este caso la propia imagen es el mensaje. Y eso es lo que primero reivindicó públicamente este viernes Pedro Sánchez desde el palacio de La Magdalena de Santander, que acoge la XXVII Conferencia de Presidentes, la primera en casi tres años. Lo hacía el jefe del Ejecutivo porque hasta la capital cántabra se han desplazado todos los mandatarios autonómicos, incluidos el lehendakari, Imanol Pradales, y el president de la Generalitat de Catalunya, el socialista Salvador Illa. Todos ellos posaron junto al Rey y los presidentes de Congreso y Senado, Francina Armengol y Pedro Rollán. Una imagen "muy poderosa" que "demuestra la unidad territorial de nuestro país". Una foto, dijo, que "ratifica" y que "da certidumbre y seguridad al conjunto de ciudadanos".

Esa estampa precedió a la propia intervención de Sánchez, ya a puerta cerrada, en el inicio de la cumbre, en la que lanzó varias propuestas de cada uno de los cuatro grandes temas que la sustentan: vivienda, sanidad, inmigración y financiación. Así, el presidente planteó a las CCAA blindar el carácter público de la vivienda protegida, aprobar una ley del suelo que ofrezca más "seguridad jurídica a los ayuntamientos" o que ellas mismas hagan uso de las herramientas que ofrece la ley de vivienda. También les rogó que acuerden "de una vez" el reparto de menores migrantes no acompañados. Anunció 223 millones de euros extra en transferencias a las comunidades a principios de 2025 para que financien la adopción y desarrollo de nuevas soluciones sanitarias basadas en inteligencia artificial (IA). Avanzó también que convocará en enero un Consejo de Política Fiscal y Financiera para impulsar la asunción por el Estado de parte del endeudamiento de las comunidades del régimen común. Y garantizó que se acordará "entre todos" un nuevo modelo de financiación autonómica que "concilie la multilateralidad y la bilateralidad", que "blinde la solidaridad entre territorios" y que asegure más recursos para todas las comunidades.

El presidente reivindica la "imagen muy poderosa" de la Conferencia de Presidentes, con todos ellos en Santander, que demuestra la "unidad territorial" y da "certidumbre y seguridad a los ciudadanos"

Fueron las principales propuestas formuladas por el presidente ante los mandatarios autonómicos. En los días previos, los líderes del PP se quejaban de que la Moncloa no les había hecho llegar documentación previa, de que Sánchez acudía con las manos vacías. Pero el jefe del Ejecutivo se reservaba los anuncios para este viernes. Para después de los prolegómenos: de la llegada a La Magdalena de todos los presidentes, de su conversación distendida —y significativa— con Felipe VI tras los roces de los últimos días, de la foto de familia de todos los presidentes junto al monarca y de la declaración institucional de apertura de la cumbre en el exterior del palacio del lado de la anfitriona, la jefa del Ejecutivo de Cantabria, la popular María José Sáenz de Buruaga. La declaración de los dos llegaba minutos después de despedir a Felipe VI, con quien todos los participantes en la Conferencia habían mantenido un desayuno de trabajo. Tanto Sánchez como Sáenz de Buruaga llamaron a todos a alcanzar acuerdos en las cuatro materias objeto de debate este viernes. El presidente apeló al "espíritu de colaboración, de concertación" y al "ánimo constructivo". La dirigente cántabra recordó que los ciudadanos "no entienden la España de los muros", porque "anhelan la España del diálogo, del entendimiento y del acuerdo".

La reunión, la propia cumbre, comenzó justo después ya a puerta cerrada. Ahí Sánchez expuso sus propuestas a los líderes autonómicos. Y les avanzó ciertas decisiones muy relevantes. La primera, que el Gobierno convocará en enero un Consejo de Política Fiscal y Financiera —el órgano que reúne a Hacienda y a los consejeros del ramo— para negociar la quita de la deuda. Este era un compromiso al que llegó el PSOE con ERC para su investidura, pero que desde el principio aseguró que se extendería a todas las CCAA que quisieran. En este año, según venía contando la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, se han desarrollado los trabajos técnicos, y ahora llega la parte de la negociación, a la que el PP se ha mostrado más reticente por su oposición a la condonación a Cataluña de 15.000 millones de deuda. Por eso el presidente ha optado por una estrategia diferente: seducir a los gobiernos autonómicos con la convocatoria de un órgano multilateral como el CPFF.

Propone "acordar entre todos un nuevo modelo" que case "multilateralidad y bilateralidad, consagre la solidaridad interterritorial y garantice que todas las CCAA reciban "más recursos" de los que tienen hoy

Respecto a la reforma de la financiación autonómica, el presidente propuso a los mandatarios autonómicos "acordar entre todos un nuevo modelo" que case "multilateralidad y bilateralidad", consagre la solidaridad entre territorios y garantice que "todas las CCAA reciban más recursos de los que reciben hoy". Un planteamiento calcado al que salió del 41º Congreso Federal del PSOE, hace dos semanas. Además, Sánchez planteó a las comunidades que reprogramen una parte de los fondos europeos de cohesión FEDER y FSE+ para dar a los territorios afectados por la DANA una línea adicional de ayuda. Esta es una opción, explica el Ejecutivo, que permite la normativa europea y que podría ayudar a reforzar las medidas adoptadas por el Gobierno y la Generalitat Valenciana para "reconstruir y relanzar la economía de los territorios afectados".

La segunda carpeta más complicada de esta cumbre es la de la inmigración. Sánchez rogó a los presidentes que se acuerde "de una vez" una "solución compartida al problema del reparto de los menores no acompañados" a través de criterios objetivos, y apelando a la "solidaridad de todas las CCAA". El PP ha bloqueado hasta ahora la reforma del artículo 35 de la Ley de Extranjería para la derivación obligatoria a la Península de los chavales migrantes, y por eso el Gobierno explora un acuerdo con Junts.

El jefe del Ejecutivo defendió ante los presidentes autonómicos —buena parte de los gobiernos del PP dependen del apoyo de Vox, que presiona mucho en este punto— que se sumen a una "política migratoria responsable y solidaria, basada en la ciencia y no en los prejuicios, y responsable con las necesidades demográficas y laborales de nuestro país". Es la visión positiva de la inmigración que él mismo ya defendió ante el Congreso. El líder socialista pidió asimismo que las autonomías se unan a las iniciativas del Gobierno para el fomento de la migración "regular", que se sumen a los acuerdos internacionales para la migración circular y se impulsen las alternativas regladas, y que contribuyan al Plan de Integración y Convivencia Intercultural que el Ejecutivo central presentará próximamente.

Sánchez pide al PP una "política migratoria responsable y solidaria" y que hagan uso de las herramientas que contempla la ley de vivienda. Ofrece una reforma de la ley del suelo

En materia de vivienda, Sánchez ofreció la aprobación de una reforma de la ley del suelo que ofrezca "más seguridad jurídica a los ayuntamientos a la hora de modificar sus planes urbanísticos, ayude a acelerar la construcción de viviendas asequibles y a adaptar la normativa actual al reto del cambio climático". El Gobierno ya llevó al Congreso la reforma de esta ley, pero la tuvo que retirar por falta de apoyos. El debate de toma en consideración estaba previsto justo antes del inicio de la campaña europea, y el PP se giró y dio la espalda al proyecto, pese a que, según Vivienda, sí lo compartía y lo reclamaban sus alcaldes.

Sánchez también propuso blindar "el carácter público y social de las viviendas financiadas con recursos públicos de forma permanente e irreversible", para asegurar que el parque público de vivienda asequible siga "creciendo y llegue al 20% que tienen los países europeos más avanzados en este tema". Les reclamó asimismo que "hagan uso de la ley de vivienda", aprobada en 2023, que para el Ejecutivo sí está "contribuyendo a reducir el precio de los alquileres" allí donde se está aplicando. Pero los gobiernos del PP se niegan a la limitación de los precios en las zonas tensionadas.

La última carpeta, la de sanidad. El presidente anunció que transferirá a las CCAA 223 millones de euros extraordinarios a principios de 2025 para que financien la adopción de nuevas soluciones sanitarias basadas en la IA, para poder "mejorar la atención a los pacientes y aprovechar mejor el tiempo de los sanitarios". También avanzó que el Ejecutivo "consolidará y aumentará la financiación de nuevas plazas para profesiones sanitarias en las universidades públicas", siempre y cuando exista un compromiso firme de las CCAA para "contribuir de forma sostenida a su cofinanciación".

El Gobierno "consolidará y aumentará la financiación de nuevas plazas para profesiones sanitarias en las universidades públicas", siempre y cuando las CCAA contribuyan a su cofinanciación

La XXVII Conferencia de Presidentes arrancó con la presencia de todas las CCAA. Viajaron hasta Santander todos los presidentes, a excepción del melillense Juan José Imbroda, por motivos personales, y que fue relevado por el vicepresidente de la ciudad. Sánchez estaba arropado por las tres vicepresidentas —María Jesús Montero, Yolanda Díaz y Sara Aagesen— y cuatro de sus ministros —Ángel Víctor Torres (Política Territorial), Isabel Rodríguez (Vivienda), Mónica García (Sanidad) y Elma Saiz (Inclusión, Seguridad Social y Migraciones)—.