El magistrado de la Sala de lo Penal, Ángel Hurtado, ha acordado mantener por separado "por tener intereses diferentes" a las cuatro acusaciones populares personadas en el procedimiento contra el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, por un presunto delito de revelación de secretos.

En un auto al que ha tenido acceso El Independiente, Hurtado explica que aunque existe una "tendencia generalizada" a agrupar a las acusaciones bajo una misma representación, ello no significa que deba convertirse en "regla general" sin analizar las circunstancias de cada caso.

El magistrado considera que, de las cuatro acusaciones, dos de ellas -el Colegio de Abogados de Madrid y la Asociación Profesional e Independiente de Fiscales- tienen intereses corporativos propios, que no coinciden con el resto de las acusaciones -Manos Limpias y Fundación Foro Libertad-.

Esta decisión del juez se produce una semana después de que el juez que instruye en el Tribunal Supremo el 'caso Koldo', Leopoldo Puente, unificara las siete acusaciones populares --PP, Vox, Manos Limpias, Liberum, Hazte Oír, Adade y Iustitia Europa-- bajo la del Partido Popular, que fue el primero en personarse. Puente tomó la decisión ante el desacuerdo sobre "las personas en las que debería recaer dicha representación y defensa común".

El jueves, el día de la declaración de Ábalos, no permitió acceder a la declaración a ninguna acusación que no fuera la del PP, en una decisión que generó polémica y revuelo en las puertas del Tribunal Supremo. "Depender de una única acusación siempre nos perjudica. Estamos a rebufo y tenemos niveles de subjetividad (porque dependemos de lo que nos cuente) y de temporalidad (porque no sabemos cuándo nos lo van a contar", dijo Alexis Aneas, el letrado de Liberum, en las puertas del Alto Tribunal.