El comisionista del caso Koldo, Víctor de Aldama, consiguió una carta firmada por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) para vender un edificio que el Instituto de Empresa (IE) tenía en la calle Velázquez de Madrid. Así se lo relató en el Tribunal Supremo el pasado diciembre en una declaración a la que ha tenido acceso El Independiente.

El juez instructor le preguntó a Aldama por una parte de su declaración en la Audiencia Nacional. En ella explicó que el exministro José Luis Ábalos recibió "250.000 euros" en concepto de comisión por los contratos de las mascarillas con la empresa Soluciones de Gestión, y que "llegó a llevarse otros 400.000" por "otras cosas". Igualmente, contó que su asesor de máxima confianza, Koldo García, hizo lo propio: le entregó 200.000 euros además de los 100.000 que consiguió por el material sanitario.

El magistrado quiso saber a qué se refería con esas "otras cosas". Aldama respondió que eran "básicamente por adjudicaciones de obras" que licitaba el Ministerio de Transportes, que dirigió Ábalos entre 2018 y julio de 2021.

Juez: -No, pero básicamente no. ¿Sólo por adjudicaciones de obras o por alguna cosa más?

Aldama: -Bueno, por muchas cosas más. Yo al final le pedía muchos otros favores. Pongo un ejemplo. El edificio del IE que está en Velázquez, teníamos un comprador para ese edificio, y él [no especifica si Ábalos o Koldo] hace la gestión para ver si podemos comprar ese edificio. Se me da una carta de compra de ese edificio firmada por la SEPI, cuando luego nos enteramos que ese edificio no se podía vender. Pues con cosas así, le íbamos pidiendo cosas.

El juez, para resumir, aclaró: "El grueso eran las adjudicaciones de obra, pero si a usted le surgía algún otro negocio, pues también le ayudaba a llevarlo a buen término". "Sí, así es", respondió Aldama.

La SEPI, Air Europa y el IE

Esta parte de la declaración de Aldama en el Supremo presenta tres asuntos distintos entre sí pero que en los últimos meses se han visto conectados. Se trata del rescate de la aerolínea Air Europa. El comisionista estuvo a sueldo de la compañía durante un tiempo. Su misión era recuperar la deuda que mantenía con Venezuela, país y Gobierno donde tenía grandes relaciones al más alto nivel. Prueba de ello eran sus comunicaciones con la vicepresidenta bolivariana, Delcy Rodríguez.

Al mismo tiempo, durante lo peor de la pandemia, Air Europa se vio ahogada por las deudas. Dentro del plan del Ejecutivo español para ayudar a las empresas debido a las consecuencias de los confinamientos y las restricciones de movilidad, la compañía de viajes fue la más beneficiada. Recibió 475 millones de euros en dos préstamos, uno ordinario y otro participativo, que deberá reembolsar en el 2026. Y lo hizo a través de la SEPI.

En las comunicaciones intervenidas y analizadas por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, se vislumbra cómo Aldama presionó a Koldo García y al entorno de Ábalos para que el rescate se hiciera lo más pronto posible. La familia Hidalgo, propietaria de Air Europa, estaba en las últimas. El empresario mantenía buena relación desde hacía tiempo con el hijo del creador, Javier Hidalgo.

Además, en uno de sus informes los agentes señalan que la trama pensaba que la ayuda se canalizaría a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO), que ya les había otorgado 140 millones en mayo de ese mismo año, en 2020. Sin embargo, se hizo finalmente a través de la SEPI, aunque la Guardia Civil desconoce por qué se hizo así.

Intentan relacionarlo

Las acusaciones del caso Koldo han intentado varias veces llevar el rescate de la compañía a la causa de las mascarillas, pero el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ha sido contrario a que se pregunte a los investigados por el asunto. Incluso rechazó que declarase Javier Hidalgo, pero la sala le obligó a ello. El interés de varias de las acusaciones es demostrar que las ayudas del Gobierno están ligadas con otra causa judicial en la que están personadas: el caso Begoña Gómez.

La mujer del presidente del Gobierno está siendo investigada en un juzgado de Madrid por varios delitos: tráfico de influencias, corrupción en los negocios o apropiación indebida, entre otros. Uno de los aspectos que se investiga es la contratación de Begoña Gómez por parte del IE para dirigir su negocio en África.

Según se ha publicado, Air Europa contribuyó a esa parte del IE con 40.000 euros cuando Begoña Gómez estuvo contratada. Y lo hizo tras un encuentro de la Organización Mundial del Turismo (OMT) en San Petesburgo. Allí, la mujer de Pedro Sánchez coincidió con Aldama y con Javier Hidalgo. La tesis de las acusaciones es que el rescate y la contribución de la aerolínea al Instituto de Empresas están relacionados.