La Guardia Civil busca renovar parte de su flota marítima. Para ello, el Servicio Marítimo del Instituto Armado ha solicitado la adquisición de tres embarcaciones patrulleras de tipo semirrígido por un coste de 1.200.000 euros (400.000€ cada una) para ser entregadas en 2026. Según se detalla en la documentación disponible en el Portal de Transparencia que ha consultado El Independiente, estas patrulleras prestan un servicio "fundamental" al tratarse de los navíos estándar con las que los agentes vigilan las costas de España.

El objetivo, indican, es dotar a la Guardia Civil de los "medios adecuados" para el desempeño de las funciones de vigilancia y control de la lucha contra el tráfico ilícito de sustancias, la inmigración irregular, la vigilancia de fronteras, la protección del medioambiente marino y el resto de tareas que el cuerpo tiene asignadas en el ámbito marítimo.

Tal y como detalló este periódico el año pasado, la Benemérita posee 98 patrulleras, de las cuales 57 (el 58%) fueron adquiridas en 2014, o antes. Las más antiguas llevan 20 años en el mar. Además, un "buen número" de ellas se encuentran "próximas a su fin de ciclo de vida", envejecidas después de años de uso, por lo que su renovación es necesaria. El pasado mes de noviembre, el Ministerio del Interior reconoció la "velocidad insuficiente" y las "reducidas dimensiones" de algunas de ellas. Lo hizo en medio de la polémica tras el asesinato días antes en Barbate (Cádiz) de dos agentes, Miguel Ángel González y David Pérez Carracedo, después que una narcolancha les embistiera y les pasara por encima intencionadamente.

Renovar la flota es de suma importancia, puesto que, como indica la memoria justificativa del Servicio Marítimo para la obtención de estas tres nuevas embarcaciones, es necesario para combatir eficazmente la llegada de narcolanchas, que ha experimentado un auge "escandaloso" en los últimos tiempos, en palabras de la Fiscalía General del Estado, que lo plasmó así en su memoria del año 2024.

El Ministerio Público explicó que éstas son el instrumento principal para el traslado de hachís desde Marruecos (aunque también se utilizan para otras actividades delictivas, como la inmigración irregular) y que están proliferando por toda la costa, especialmente en la zona del Estrecho, aunque no es la única localización en la que están presentes. Precisamente, el delegado en Jerez denunció la "proliferación escandalosa" en las poblaciones de Sanlúcar y Rota, ubicadas en la desembocadura del río Guadalquivir.

"Carencia de medios"

Al igual que el Instituto Armado señala que la renovación progresiva de las unidades de su flota es necesario, lo hace también la Fiscalía, que en la memoria del año pasado recogió la "carencia de medios" que sufren las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para el abordaje y detención de estas embarcaciones. Detalló que éstas suelen llevar varios motores de 350 caballos de potencia y que cuentan con sistemas de navegación y comunicación altamente sofisticados. Son, por lo general, más potentes de las usadas por las autoridades.

Los guardias civiles que fueron asesinados en Barbate navegaban en una Zodiac de poco más de cinco metros: "Las redes sociales y cualquier medio de comunicación muestran el atrevimiento en la exhibición de estas narcolanchas por parte de los narcotraficantes y la violencia con la que en más de una ocasión embisten a las embarcaciones de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado", indicó la Fiscalía, que también hizo hincapié en lo ocurrido en Cádiz: "El asesinato de dos guardias civiles en Barbate en febrero de 2024, que constituye uno de los episodios más lamentables, tristes e inadmisibles que se recuerdan, y muestra la impotencia del Estado ante unas redes criminales que deben ser inmediatamente desarticuladas".