El portavoz nacional del PP, Borja Sémper, compareció este martes minutos después de que el Gobierno aprobase de nuevo el real decreto-ley ómnibus en Consejo de Ministros y se anunciase un acuerdo para convalidarlo con mayoría junto a Junts próximamente en el Congreso. Los populares aplazaron hasta después de la intervención del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, desde Moncloa, la rueda de prensa prevista pasado el mediodía que acontece tras la reunión semanal.
El acuerdo entre el PSOE y Junts para desbloquear la negociación radica en presentar un nuevo decreto con todo el contenido social y extrayendo todas las cuestiones económicas relacionadas con la fiscalidad, la industria electrointensiva y automovilística, medidas para suavizar el impacto contable del impuesto a los bancos o la prórroga de los anticipos por financiación autonómica, entre otras incluidas en el anterior ómnibus.
Habrá dos novedades de cara a este acuerdo, eso sí: de la mano de la moratoria de desahucios irá una garantía para que los caseros cobren sus alquileres o puedan pedir una compensación económica al Estado. A nivel político, y fuera de ese decreto, el PSOE acepta tramitar y 'descongele' la proposición no de ley de Junts para que Sánchez se someta a una cuestión de confianza, aunque no tendrá efectos legales.
Desde Génova, el PP, que abogaba por que Sánchez extrajese todo lo social de ese texto ómnibus, lamentó que el presidente del Gobierno haya decidido "plegarse a las imposiciones de Puigdemont" para sacar adelante la revalorización de las pensiones en un 2,8%, la bonificación al transporte público, o las ayudas a Valencia por la DANA de octubre. Hay que recordar que el PP le instó a presentar un decreto solo con esos contenidos para apoyarlo. Asimismo, registró tres iniciativas parlamentarias encaminadas a aprobar esas medidas, además de promover una petición a través de Change.org. "Dijo que era imposible trocearlo, pero lo hace ahora por las exigencias de sus socios. Ahora no lo parece tanto", apuntó Sémper en rueda de prensa. "La demanda del PP era clara, sensata y no hacía falta meter al país en este vodevil", lamentó el portavoz reivindicando las propuestas populares.
El PP pidió a Sánchez extraer las tres medidas sociales y de ayuda del Gobierno en un decreto independiente para poder votarlo
En lugar de ir de la mano de Alberto Núñez Feijóo, "Sánchez ha seguido su estilo, con trampas y chantajes", resaltó Sémper, que también cuestionó la metodología que sigue el Ejecutivo. La de hoy ha sido "una nueva jornada para la historia", detalló. "El Gobierno permaneció encerrado en una sala de Moncloa a la espera de que Puigdemont autorizase el inicio del Consejo de Ministros, esto solo pasa con Sánchez", se refirió por el aplazamiento de la reunión del órgano hasta tener atada la negociación con Junts pasada la una de la tarde.
"Hay evidencias de una clara precariedad del Gobierno y sale Sánchez sacando pecho cuando depende más que nunca de Puigdemont. Hemos perdido más de un mes con estas materias, mientras Sánchez ha jugado con los pensionistas. Su soberbia perjudica al país", dijo Sémper calificando de "tóxica" la política del Gobierno y ensalzando al PP como alternativa y representante de la "buena política".
Pidió elecciones Sémper, para salir del bloqueo que supone estar "cada semana pendiente del estado de ánimo de Puigdemont, de llamadas...". "Que los españoles opinen", expresó frente al llamamiento de Sánchez a ir "partido a partido" para legislar en torno a la agenda social y mediante pactos con los socios. "No podemos vivir en el regate corto, en ese 'partido a partido'", sino que hay que tener a un Gobierno "con proyecto común" y mirada "de futuro", demandó el portavoz del PP.
De cambiar Junts de posición y sostenerse el resto de la mayoría de investidura [falta por ver si Podemos acepta las nuevas condiciones], el decreto ómnibus, que baja de 80 a casi 30 medidas, saldrá adelante. Preguntado por la posición del partido, Sémper se emplazó a contestar una vez el decreto fuese analizado por los populares. De precipitarse, "sería imprudente". El PP comparte las cuestiones de fondo, y el añadido de Junts respecto a la vivienda garantiza medidas contra la okupación. Pero esperarán hasta que se compruebe que no hay otras "trampas" en la letra pequeña. De contener ese nuevo decreto la cesión del palacete parisino para el PNV, el voto será contrario. "No va al Gobierno vasco, sino a un partido, está valorado en 15 millones y el Estado pretende pagar el alquiler hasta 2030", recalcó Sémper. El PP estudia si esa entrega por parte del Gobierno supone ir contra la ley de financiación de partidos.
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