La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, reunió de nuevo a su espacio político, cinco semanas después, en la Fundación Ortega-Marañón de Madrid para abordar los principales ejes políticos que se seguirán de cara a las próximas semanas y con la intencionalidad de que sean la parte esencial en su negociación presupuestaria con el PSOE. Tras ello, Díaz participó y cerró un pequeño mitin junto a algunos portavoces y diputados nacionales de las seis fuerzas que acompañan al Movimiento Sumar en la confluencia plurinacional del Congreso. Además de promocionar medidas de corte social y ecológicas, Díaz buscó la confrontación contra la extrema derecha internacional.

"Sí, la ofensiva neoliberal es real y [Donald] Trump ha llegado a nuestras vidas", dijo Díaz horas después de la primera jornada de la CPAC en Washington. "Toca decirle a la extrema derecha, con sucursal en España y en Europa que no vamos a convertir a la democracia en una empresa gobernada por un CEO", mencionó en alusión a Elon Musk, el dueño de X, entre otras. "La democracia se gobierna votando y con políticas públicas que cambian y mejoran la vida de la gente", añadió Díaz, quien quiso movilizar al electorado de la izquierda a través de "un proyecto de país", sus propuestas. Incluso la animó a salir próximamente a marchar en favor de la sanidad pública.

En un momento en el que la UE parece quedarse cada vez más sola frente a la amenaza de Rusia, con un Trump que compadrea con Vladimir Putin con la resolución de la guerra en Ucrania como propósito de fondo, y en la que se empieza a plantear un aumento en la inversión en Defensa, Díaz quiso mandar un mensaje contrario. Incluso, como publica este viernes El Independiente, cuando la parte socialista del Gobierno de España estudia fórmulas para elevar ese gasto.

Con la cumbre social de Oporto de finales de marzo en mente, donde la UE busca estrategias para combatir la pobreza, Díaz apuntó que "necesitamos que las fuerzas progresistas reivindiquemos la Europa social más que nunca, no la Europa de la guerra, la de la economía de guerra, la que quiere aumentar el presupuesto en Defensa". "Hay que reivindicar la Europa que resuelve el desempleo, la pobreza y que permite mejorar la vida de la gente", añadió. Díaz, hasta ahora, había evitado posicionarse en contra explícitamente del rearme ante una posible agresión rusa, algo en lo que anteriormente sí insistió Podemos en el Gobierno, teme que la prioridad de una afecte a la otra.

Díaz rechaza el trasvase de fondos "para la guerra", mientras que defiende que se cree un fondo europeo para la recuperación para la modernización mediante la digitalización y la descarbonización.

"Una ola reaccionaria que vamos a parar"

Con los ministros Ernest Urtasun, Sira Rego, Pablo Bustinduy y Mónica García presentes, así como representantes de IU, Catalunya en Comú, Compromís, Más Madrid, Verdes Equo, Chunta Aragonesista y Més per Mallorca, Díaz clamó que "necesitamos más democracia, Estado, igualdad y esperanza que nunca". "La ola no es imparable, la detendremos desde abajo, tejiendo muchas redes, con derechos sociales, mucha inteligencia colectiva y con mucha gente que piensa diferente a nosotros".

Bajo el eslogan 'Estado plurinacional, social y verde', Sumar plantea cinco ejes clave para abordar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) con el PSOE: la vivienda, la emergencia climática, optar por un modelo económico sostenible que combata la despoblación y apueste por una financiación autonómica justa, y la protección de las políticas de cuidados. Pero con esa mirada europea señalada por Díaz, desde Sumar hacen varias propuestas. La primera es fortalecer los Estados, cuya disfunción cree que permite que crezcan los partidos ultraconservadores. Una propuesta para ello es la mejora del Ingreso Mínimo Vital para evitar la exclusión social. La segunda es la de no entrar a competir en una guerra comercial con el mundo, sino la de fijar un comercio abierto, pero justo en calidad y fiscalidad. Se niega retrocesos con el Pacto Verde.

Sobre el aumento del gasto en Defensa, Díaz quiso trasladar que "lo que se tienen que hacer es redirigir el crédito" para "movilizar la industria y generar empleo trabajando menos y mejor". Díaz incluyó el combate a la pobreza laboral con la subida del SMI, aunque ello con una fiscalidad justa. "El problema está por arriba, no por abajo", dijo la vicepresidenta en clara dirección de choque con el PSOE y el Ministerio de Hacienda de María Jesús Montero. Se propone gravar impuestos como el de sucesiones para las grandes herencias o penalizar el dumping fiscal, así como elevar al 21% el IVA de los pisos turísticos.