Pedro Sánchez ha convocado durante todo el día de hoy una ronda de reuniones con los diferentes portavoces de los partidos que tienen representación en el Congreso, a excepción de Vox para informales sobre la situación en Ucrania y el gasto en Defensa que el presidente ha prometido aumentar en un 2%.

Hoy, en el complejo de la Moncloa se ha vivido un momento único desde que España entró en democracia: la portavoz del grupo parlamentario vasco EH Bildu, Mertxe Aizpurua, ha asistido a la reunión con Sánchez. Aunque ambos partidos son socios de gobierno, ya que sin el apoyo de los vascos Sánchez no habría podido proclamarse ganador frente a Feijóo, la realidad es que Bildu nunca había asistido a ningún acto en el palacio presidencial.

La realidad es que el partido de Otegi ha remado siempre a favor de Sánchez, ya en las últimas elecciones general, Bildu anunció su apoyo a la investidura del candidato socialista por parte de sus seis diputados sin negociación alguna. Desde ese momento, socialistas y nacionalistas vascos se han convertido en una alianza tan potente que ha marcado, entre otros, la entrada del partido en la Moncloa.

Vox no entra

Tras los últimos acontecimientos a nivel internacional, el presidente del Gobierno ha salido en varias ocasiones la última semana reivindicando la necesidad de aumentar un 2% el gasto en Defensa, propuesta que ha llevado a Yolanda Díaz y a Podemos a ponerse radicalmente en contra de un rearme. Irene Montero se ha posicionado en sus redes sociales de una forma tajante tachando a Sánchez de "mentir": "Por decencia, los señores de la guerra deben dejar de negar lo evidente. El rearme es un robo. El dinero que se van a gastar en armas saldrá de nuestra sanidad y nuestras pensiones. Pedro Sánchez, deja de mentir".

Aún así, Sánchez anunció que se reuniría con todos los partidos que forman parte del Congreso exceptuando al partido de Santiago Abascal, que ha tachado de "farsa" la ronda de contactos y, dice, ha sentido un alivio el no ser partícipe. Por su parte, Feijóo a asistido a las diez de la mañana a una reunión que ha durando 30 minutos, diez más que para el resto de portavoces. En ese acto se volvían a encontrar después de más de un año, ya que la última vez que se reunieron fue en diciembre de 2023.