Que la colaboración entre PP y Sumar es nula en el Congreso de los Diputados, es un hecho. Que en esta legislatura ha coincidido en algunas materias más con los populares, al menos a la hora de querer debatir, es una realidad. Ocurrió a finales del año pasado con la vivienda. Ahora se alinean para demandar al PSOE a llevar a pleno cualquier aumento en inversión en Defensa. Este martes, el rechazo a que los socialistas se nieguen a presentar Presupuestos vuelve a situarlos frente a un espejo, pese a las antípodas ideológicas.

En la rueda posterior al Consejo de Ministros, el Gobierno, a través de su portavoz Pilar Alegría, fue claro. No quieren "hacerle perder el tiempo al Congreso y a los ciudadanos" con algo que no va a salir. El Ejecutivo se daba de plazo hasta finales de primavera, pero estas declaraciones dejan poco margen ya para un cambio de ida pese a la presión de Sumar, irritado con la decisión, y el PP, que estalla contra los socialistas.

Por un lado, el PP se niega a que Pedro Sánchez, dicen, se salga con la suya. Creen que no puede tolerarse que se vuelva a saltar la legalidad y aluden al artículo 134 de la Constitución Española. En concreto, al punto tercero: "El Gobierno deberá presentar ante el Congreso de los Diputados los Presupuestos Generales del Estado al menos tres meses antes de la expiración de los del año anterior". Además de que se va tarde, argumentan, creen que es un despropósito que se prorroguen unas cuentas que no representan la voluntad de la actual Cámara Baja.

"Son de 2023, elaborados en 2022 y que corresponden a un hemiciclo ya disuelto tras el adelanto electoral del 23-J", consideran fuentes del PP, que salvan las distancias con ese argumento de la situación que experimentan sus aparatos en algunas regiones. Resaltan que las prórrogas de sus barones son de cuentas de 2023, acordadas en el marco de representación parlamentario actual.

El PP distingue a Sánchez de sus presidentes por no presentar Presupuestos. Quien debía por ley, presentó los borradores a finales de 2024 pese al rechazo de Vox

Precisamente siguen sin nuevas cuentas la Extremadura de María Guardiola, Castilla y León, de Alfonso Fernández Mañueco, Aragón, con Jorge Azcón al frente, la Región de Murcia, con Fernando López Miras, y la Baleares de Marga Prohens. Murcia apunta a ser la siguiente comunidad, con todo, en la que un acuerdo de PP y Vox similar al de Valencia abra paso a un acuerdo. El compromiso de su presidente, este martes, denunciando el Pacto Verde y rechazando las acogidas bajo la formulación de lo acordado por PSOE y Junts, es un paso. Para Vox, uno de los inconvenientes para ello era el Programa de Lengua Árabe que se imparte en la Educación murciana, que es resultado de un acuerdo entre España y Marruecos y que se financia desde Madrid. "Murcia no destina ni un euro", dijo López Miras, como guiño a sus ex socios.

Esa diferenciación la recalcó en rueda de prensa parlamentaria minutos después Miguel Tellado, el portavoz del PP en el Congreso. "No es normal que el Gobierno renuncie a la estabilidad que supone tener cuentas públicas". "Los presidentes autonómicos trabajan para dar estabilidad dentro de la normalidad, no renuncian como el Gobierno, que demuestra que improvisa y resiste, y no atiende a los ciudadanos", expresó Tellado. Posteriormente, fuentes populares recalcan que barones como Prohens o Guardiola han negociado sobre un borrador de Presupuestos. "El Gobierno ni lo tiene", aseguran.

Lo cierto es que en el caso extremeño y el castellano y leonés, el Estatuto de autonomía, insta al Gobierno regional a que se presente el borrador "para su análisis, enmiendas, aprobación y control antes del 15 de octubre de cada año". Algo que se hizo en ambos casos. Siguió esa línea Prohens, a diferencia de Azcón, López Miras y Mañueco. Ninguno de los estatutos de sus regiones, en cambio, obliga a ello con fecha y contempla las prórrogas al inicio del siguiente ejercicio si no hay proyecto. En eso se escudan los populares, en la responsabilidad de sus presidentes.

El PP contempla el recurso al Tribunal Constitucional

Por eso, el PP estudia acciones legales y la forma de que Sánchez tenga que presentar un borrador de Proyecto de Presupuestos pese a que estén abocados al fracaso por la negativa prevista de Podemos y Junts. Es una de las nuevas luchas que incorpora a su itinerario del principal partido de la oposición, para marcar perfil político. Independientemente de las declaraciones públicas de las diferentes voces del partido, instando al Gobierno a cumplir con su responsabilidad, los populares ya contemplan una batalla jurídica contra Sánchez. En cambio en Vox, argumentan que más allá de comparecer o de presentar Presupuestos, "lo que Sánchez tiene que hacer es dimitir y convocar elecciones".

El artículo 134.3 es claro y no deja margen de interpretación para el PP, que ya tiene a sus servicios jurídicos trabajando en ello

Fuentes de la dirección nacional del PP trasladan que sus servicios jurídicos ya están contemplando la posibilidad de recurrir al Tribunal Constitucional el asunto. Denunciar, en definitiva, una dejación de funciones de Hacienda y los socialistas. Aseguran que el artículo 134.3 "es claro" y no deja margen a la interpretación. La duda es cómo se articularía un recurso sin una ley como objeto. En todo caso, se alerta de que no hay nada decidido aún, que todo está siendo revisado. El caso presupuestario se une así a otra de las líneas en las que trabaja el equipo jurídico del partido: obligar a Sánchez a llevar al Congreso el gasto en Defensa, en lo que se coincide con Yolanda Díaz.

Otra batalla de Sumar con el PSOE

A las diferencias en Defensa o vivienda, se unen los Presupuestos, del que depende en gran parte todos los objetivos de Sumar en políticas sociales y verdes. Dentro del Grupo Plurinacional, algunos socios instan a presionar al PSOE mucho más y no conformarse con la decisión de renuncia de las cuentas. "Hay que debatir las cuentas, es nuestra responsabilidad. No solo por el hecho de traerlos, sino porque las medidas más ambiciosas, sociales y ecológicas dependen de ellos", aseguran. Se refieren a los límites de gasto marcados por las cuentas, que aunque el Gobierno las concibe como "expansivas", no se corresponden con "la realidad" de 2025.

En Sumar importa poco que haya una derrota, porque "se prorrogan y ya está", sin necesidad de elecciones generales, pero lamentan la falta de compromiso, sobre todo cuando en las conversaciones bilaterales con Junts hubo disponibilidad del PSOE a llevarlos al Congreso. Se descarta, además, que el PSOE rehúya el asunto por un interés de no querer obstaculizar una subida en Defensa, "algo que no depende de ello y puede hacerse de forma independiente", indican fuentes magentas. Sobre este ámbito, se limitarán a ver qué propone Sánchez en su comparecencia de este miércoles en el Congreso sobre Defensa, tras las últimas reuniones del Consejo Europeo ligados al plan de rearme. A partir de ahí, fijarán posición. Aunque creen en Sumar que poco a poco han atraído a Sánchez a una postura pro seguridad y no tanto militarista. Algo que reprocha Bruselas.

Sumar teme que el PSOE se parapete en la ausencia de Presupuestos para dejar de lado medidas acordadas en el pacto de la coalición

Desde Sumar se espera que la ausencia de Presupuestos no sirva al PSOE para justificar la falta de incisión en determinadas políticas sociales y ecológicas pactadas en el acuerdo de coalición. Ello, en plena batalla entre Trabajo con Hacienda por que el SMI no tribute o con negociaciones abiertas con Economía para que se reduzca la jornada laboral a 37 horas y media a finales de este año. Sobre lo primero, y con plazo hasta el viernes 28 de marzo para que el Gobierno presente su veto a las propuestas de PP, Sumar y Podemos para evitar esa tributación, desde Sumar se trasladó que Díaz hizo ayer a Hacienda una propuesta alternativa. "Las negociaciones siguen en marcha", dicen los magentas, que esperan que lleguen a buen puerto.

Hay una contradicción, pese a todo, en lo que traslada Sumar. Desde octubre en adelante, los de Díaz vienen recalcando que la propuesta presupuestaria del Gobierno estaba casi plasmada en la memoria y que quedaban "flecos" sueltos por resolver. Fuentes magentas afirman que el problema es que el PSOE "no se decide a presentarlos". "Somos conscientes de la dificultad" por la postura de algunos socios, pero hay que intentarlo, se recalca. No hay planificación de convocar la mesa de seguimiento del acuerdo de coalición, porque esto excede a ello y es evidente que "el rechazo a sacarlos no es por voluntad, sino por el contexto". Pero no se aceptará cualquier retraso de medidas acordadas con los Presupuestos como excusa. "Queremos que sigan adelante", se expone.

Presión de Podemos

Podemos se mostró muy duro este martes. Su portavoz parlamentario, Javier Sánchez Serna, a diferencia de lo que cree Sumar, considera que Sánchez quiere subir el gasto en Defensa "de tapadillo" y evita los Presupuestos para no abordar el debate de forma pública y viendo de qué otros ámbitos se sacará el dinero para afrontar el compromiso de subir al 2% del PIB la inversión en Defensa antes de 2029. Podemos, ante ello, como Sumar, cree que vendrá ligado de recortes públicos pese a que se niegue. Sánchez debe dejarse de "ambigüedades" y "medias verdades" y "explicar de dónde va a sacar el dinero y qué recortes de partidas sociales va a acometer".

Podemos viene exigiendo una rebaja del precio de los alquileres del 40%, así como otras medidas sobre vivienda inasumibles para los socialistas, a cambio de las cuentas. Junts, por su parte, reclama las transferencias restantes y anteriores por ejecutar. De darles el aval, pese a todo, tendría ya muy complicado condicionar buena parte de las decisiones de Moncloa en materia económica.