Andalucía ha entrado en campaña electoral este viernes 3 de junio. Un mes y nueve días después de que el presidente autonómico en funciones convocara el anticipo de comicios, tras la incapacidad de elaborar unos presupuestos para el próximo año. La carrera electoral hacia el 19-J, para acceder al Palacio de San Telmo y situarse a la cabeza de la Junta, se prolongará dos semanas con numerosos actos, hasta el viernes 17 de junio. Frente al gran abanico de candidaturas, son únicamente seis las que tienen opciones de entrar con sus listas al Parlamento del Hospital de las Cinco Llagas.
Las dinámicas de cada partido serán completamente opuestas entre sí en términos de promoción política. Mientras el candidato que defiende mandato, el popular Juanma Moreno Bonilla, desarrollará una hoja de ruta prácticamente en solitario, únicamente con un par de actos junto al líder del PP nacional Alberto Núñez Feijóo -hará una campaña paralela por Andalucía, como la secretaria general Cuca Gamarra-, líderes estatales como el secretario general del PSOE, y los presidentes de Vox y Ciudadanos, arroparán y tutelarán a sus tres candidatos: Juan Espadas, Macarena Olona y Juan Marín. Por Andalucía, por su parte, tendrá un respaldo más limitado de Yolanda Díaz, que no quiere acercarse demasiado ante las malas expectativas en los sondeos. En contraste, Adelante Andalucía no dependerá de control nacional.
Con quince días por delante, así llegan las principales candidaturas con posibilidad de gobernar o condicionar la formación del próximo Ejecutivo regional; tanto en niveles electorales, capacidad de conformación o influencia en mayorías políticas, o en valoración media:
PP-A | Juan Manuel Moreno Bonilla
Barcelona, 1 de mayo de 1970 (52 años). Es el primer líder del PP de Andalucía que ha conseguido alcanzar la presidencia de la comunidad tras casi cuarenta años de hegemonía socialista. Y eso, entre los suyos le avalan como uno de los principales barones de la formación. Parte con la ventaja de la gestión en esta última legislatura, algo que pone sobre la mesa y muestra como su mejor carta de presentación sacrificando el componente ideológico del debate para evitar alentar en la campaña a Vox.
El modelo de candidatura que está 'vendiendo' Moreno Bonilla sigue la línea de la propuesta que quiere emprender Feijóo a nivel nacional una vez se convoque, a finales de 2023 y principios de 2024 -o antes, si la situación política requiere de adelanto-, los comicios generales: una propuesta calmada, sin levantar la voz, inclusiva a ambos brazos ideológicos desde el centrismo y girando en torno a la moderación. Por lo tanto, se puede considerar que para Génova, la candidatura del conservador andaluz y el escenario autonómico, es el primer laboratorio político de la nueva etapa.
Según las encuestas publicadas recientemente, Moreno Bonilla roza la mayoría absoluta con entre 45 y 50 escaños. Algo que le permitiría superar a todo el bloque de izquierdas en su conjunto. Pese a todo, sigue dependiendo de un apoyo directo, que partiría de Vox a cambio de representación dentro del nuevo Gobierno, o de una abstención de cualquier otro grupo a cambio de acuerdos puntuales para dar continuidad a la legislatura. Sociométrica, SigmaDos, Data10, GAD3 o 40dB, Key Data o Metroscopia, en las últimas dos semanas, el PP-A supera la barrera de los 35 puntos y medio, en comparación con la representación conseguida el 2D de 2018: un 20,75 porciento y 26 parlamentarios, que requirieron un pacto de coalición con Ciudadanos.
Indican los dos últimos estudios, en términos de valoración de liderazgos, que el dirigente popular es el más reconocido entre el potencial electorado. En el estudio realizado para 40dB, para el Grupo Prisa, Moreno Bonilla es el presidenciable favorito entre los andaluces con un 36,5 porciento de voto. En el caso de la encuesta preelectoral del Centro de Estudios Andaluces (CENTRA), que valora del cero al diez, el popular es el único representante que aprueba con un 6,3. El CIS andaluz de este jueves, rebaja a 6,28 esa valoración.
Moreno Bonilla se enfrenta a un complicado escenario electoral donde decida lo que decida, lo que elija tendrá consecuencias. O bien replica la fórmula de Alfonso Fernández Mañueco y de Castilla y León y cogobierna con Olona contradiciendo el discurso reivindicado; o bien aboca a los andaluces a una repetición electoral que complicaría el propósito de contar con unas nuevas cuentas el curso que viene.
PSOE-A | Juan Espadas
Sevilla, 30 de septiembre de 1966 (55 años). Los socialistas tienen dos retos complicados en las elecciones. El primero, es intentar regresar a San Telmo tras la primera derrota en Andalucía en la democracia; algo difícil, dado que, no se les augura crecimiento a costa del desgaste de sus socios de bloque y potenciales -como ha ocurrido con el PP-A y Ciudadanos-. Al PSOE-A se le estiman entre 30 y 34 escaños, y un resultado por debajo de esa cifra -actualmente cuenta con 33- significaría un duro golpe para Pedro Sánchez; cuya aspiración de revalidad el mandato en Moncloa pasa por tener un resultado aceptable y competitivo. Todo, aunque no le permita a Espadas gobernar. Ese es el segundo desafío.
El principal handicap de Espadas es que no es reconocido a nivel social en Andalucía -más allá de Sevilla, donde fue alcalde-, y eso lo saben en la sede nacional de Ferraz. Por ello, Sánchez se implicará para movilizar el voto. Ese desconocimiento ante la opinión pública lo capta el CENTRA, con una valoración de 4,4 sobre diez. 40dB lo sitúa muy por debajo de Moreno, con un 9,9 porciento de respaldo para ejercer la presidencia.
Los números a nivel de representación que alcanzaría con Por Andalucía y Adelante Andalucía, ni siquiera superarían o igualarían los de Moreno Bonilla en solitario, por lo que la principal batalla es la de intentar mantener todo lo posible al votante de centroizquierda que puede verse atraído por la propuesta técnica del PP-A para no seguir hundiéndose más. Como apuntan algunas fuentes conocedoras, el PSOE-A se encuentra en un momento de reconstrucción identitaria.
Vox | Macarena Olona
Alicante, 14 de mayo de 1979 (43 años). Olona es la gran apuesta de Santiago Abascal para garantizar el aguante de Vox en la cámara andaluz, la primera a la que accedieron tras los comicios de 2018. Pese a que la organización expresa constantemente que el votante verde respalda la marca y no el liderazgo, la presencia de Olona busca ir más allá: ser decisivos y condicionantes para que Moreno Bonilla pueda seguir ostentando el poder.
La peculiaridad de Vox es que la dirección nacional ha sacrificado a uno de sus mejores rostros a nivel nacional y desde Madrid. La alicantina ejercía de secretaria general del Grupo en el Congreso de los Diputados y daba la batalla cultural al Gobierno cada miércoles durante las sesiones de control. Ese mandato, pese a que Olona deseaba continuar en la política nacional, muestra hasta que punto es importante para Abascal conseguir otra nueva cuota de poder autonómica. Un nuevo feudo con el que presentarse a las generales con poder territorial.
En diciembre de 2018, Vox consiguió 12 parlamentarios. Los sondeos ahora le estiman una media de 22 representantes, 25 en los mejores casos. Aunque internamente contemplan un triple empate con populares y socialistas. Aunque en general es uno de los liderazgos más reconocidos del partido a escala nacional, afirma CENTRA que solo la mitad de los andaluces la reconoce y un 7,2 porciento, según 40dB, creen que sería la mejor presidenta posible. Asimismo, el CIS andaluz le da un 4,1 sobre diez de valoración social.
La máxima aspiración de la formación es arrancar el mayor número de sufragio posible al PP y calar en la abstención para que Moreno Bonilla no disponga de otra alternativa que no pase por dar una vicepresidencia y varias consejerías a los de Abascal. Desde Vox, consideran que el escándalo de Salobreña no perjudica, sino que reafirma su candidatura.
Por Andalucía | Inmaculada Nieto
Algeciras, Cádiz, 15 de marzo de 1971 (51 años). La nueva coalición de izquierdas a la izquierda del PSOE la ha elegido como representante. Por Andalucía llega a las elecciones con falta de oxígeno, provocada por errores como el retraso de Unidas Podemos a la hora de entregar la documentación pertinente para poder presentarse, por la falta de complicidad de los líderes nacionales y por la caída en las encuestas pese a sumar más apoyos al nicho de votantes morado.
Señala el CENTRA que Nieto solo es conocida por el 9,7% de los entrevistados y obtiene una nota de 4,6 sobre diez a nivel personal. Por su parte, 40dB indica que solo el 5 porciento de los andaluces ve como presidenciable.
La situación en el espacio que la vicepresidenta Díaz quiere reorganizar de cara al próximo año en una propuesta única no sugiere buenos resultados, por lo que, para no vincularse demasiado, optará por el perfil discreto y solo acompañará a Nieto en un acto en Dos Hermanas (Sevilla).
En solitario, en el mes de abril, a Unidas Podemos se le adjudicaba entre ocho y diez escaños en la cámara regional. Ahora, junto a Más País, Equo o Iniciativa del Pueblo Andaluz, esa cifra ha decrecido entre cinco y siete representantes. La incapacidad de un acuerdo con Adelante Andalucía y Andaluces Levantaos, sigue generando notable división a la izquierda.
Adelante Andalucía | Teresa Rodríguez
Rota, Cádiz, 18 de septiembre de 1981 (40 años). El hundimiento de la fuerza anticapitalista es más que notable. Rodríguez únicamente salvaría su escaño por Cádiz y, en el mejor de los casos, lograría dos diputados más. La valoración de la ex de Podemos, según CENTRA, es de un 3,6 sobre diez y de un 70 porciento de conocimiento general. 40dB la sitúa con un 8,8 porciento de preferencia para dirigir la región.
Ciudadanos | Juan Marín
Sanlúcar de Barrameda, Cádiz, 31 de diciembre de 1962 (59 años). Junto a Adelante Andalucía, los naranjas son los que más tienen que perder en esta convocatoria electoral. Todo, pese a que fuentes del partido indican que no sería "un desastre" perder 20 escaños de los 21 que tiene. Precisamente, un parlamentario es la estimación que hacen los sondeos, que también predicen la salida del partido del Parlamento y su paso a fuerza extraparlamentaria.
Los de Inés Arrimadas vienen de ejercer la vicepresidenta y cinco de las once consejerías de la Junta estos últimos cuatro años. La tabla de salvación para Marín y los suyos, que rechazaron ir en listas como independientes con el PP-A es conseguir cinco escaños que aproximen a Moreno Bonilla hacia la mayoría absoluta. De sacar solo ese escaño pronosticado, Marín anunció que dejará la política. El barómetro de Prisa lo sitúa como el último candidato preferido, con un 2,6 porciento, para ejercer el cargo de presidente. Por su parte, CENTRA le da una buena tasa de reconocimiento con el 78,7 porciento y una valoración positiva de 5,3 sobre diez. Es el segundo candidato por detrás de Moreno Bonilla que aprueba.
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